Clarke Griiffin tiene 23 años, estudiante de idiomas en una universidad privada, no quiere saber de sus padres, tiene gran resentimiento por el daño que causaron a su vida. Alexandria Woods es de familia humilde, trabaja en una fabrica para pagar su...
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Un año después
Clarke
Parece increíble como ha pasado el tiempo, hace año y medio que llegamos a Brasil en busca de oportunidades para mi hermosa novia y para mí, nunca pensé que emigrar a otro país fuera una aventura tan desafiante pero a la vez tan emocionante, mi diosa ha logrado consolidar su carrera y fue ascendida a ingeniero de diseño principal en muy poco tiempo, sus ideas le han valido nuevos negocios a su compañía y esta perfilada para llegar muy pronto a ser jefe de alguno de los grupos creativos; yo no me quejo, mi empresa ha sido todo un reto pero hemos sido muy exitosos en los negocios que emprendimos, ya tenemos un nombre consolidado en el mercado, muchas convenciones buscan nuestros servicios de traducción, me siento muy feliz de todo lo que hemos logrado.
Este fin de semana hemos tenido una experiencia increíble, hemos estado de niñeras de la pequeña Laura, la hija de Costia, jamás pensamos estar en ese rol pero nuestras amigas Costia y Nylah después de varios meses de amistad y conocerse finalmente se declararon su amor y desde hace 1 mes son pareja, y ante la dificultad de tener una escapada a solas decidimos ayudarlas cuidando a la niña. Disfrute tanto con ella, siempre hemos tenido una gran empatía, según ella aún sigo siendo una muñeca grande. Nos hizo reír mucho porque trajo a casa varios juegues entre ellos dos muñecas una rubia y una morena a la cuales llamo Clarke y Lexa, al parecer somos algo así como un referente pero en sus juegos las dos muñecas son hermanas y se pelean por un novio. Si tan solo supiera que Lexa no es mi hermana.. pero no romperé las fantasías e inocencia de una niña.
Pero todo lo bueno termina y hoy domingo al final de la tarde Costia ha venido por ella, me dio mucha tristeza separarme de la pequeña al punto que mi amorcito se dio cuenta y a la hora de la cena me abordo con el tema.
- Clarke amor no estés más triste, vendrán otros fines de semana para que juegues con la pequeña Laura – me dijo entre tono serio y broma-
- Amor es que me encariño muy rápido con ella, pero tenerla acá este fin de semana fue tan maravillo.
- Si sobre todo cuando jugaron a las escondidas y siempre te ganó.
- No es verdad hubo empate, además ella es muy pequeña y se escondía muy fácil, además sabes que no me gusta perder – sentí la mano de mi novia acariciando mi rostro y me recosté un poco en ella disfrutando su cariño-
- Amor tu eres también un pequeña niña, cuando las veo a las dos jugando, lo tengo muy claro, serás una maravillosa madre. – ¡ser madre!, escuchar eso me llenaba de emoción pero también de miedo-
- No lo sé, soy buena con Laura pero no sé cómo sería como madre – le exprese mis dudas-
- De hecho amor – se aclaró la garganta y tomo mi mano- he pensado que deberíamos dar ese paso de formar una familia, siento que estamos listas para ser madres, podríamos ir al médico y hacernos unos chequeos, yo albergaría tus óvulos fecundados, quiero ser la madre gestante – su declaración me dejo atónita-
