Troborkia: el guerrero definitivo.

014: Nueva molestia.

*tap

*tap

-...

*tap

Ahí me encontraba, en mis horas de clases, tratando de formar una pirámide cuando nos pidieron hacer la forma de una fogata con unos palillos que nos dio la maestra, detrás de mí estaba parado Atrehus, el hijo menor de Athena y hermano de Athina, aparecer no le agrado...

*tap

*tap

-RRRrRgggg

Ya que se encuentra dándome golpecitos con una vara de esponja, él es el segundo mejor de la clase, tiene apariencia y es listo, todas las chicas tienen puesta sus miradas sobre él, pero al parecer a él solo le gusta pasarse el tiempo molestándose, ya que soy mejor que él en todo, desde lo físico hasta lo académico, bueno técnicamente está tratando de competir con un hombre de mediana edad... lo cual es un poco tramposo, pero sería mejor que se rinda le llevo miles de años de conocimiento de mi mundo anterior.

*tap

*crash tintitnti

-¡Ellestior! ¿Qué se supone que estás haciendo? Tienes que formar una especie de triangulo, no amontonar los palillos al azar *suspira

*La clase se ríe*

Maldito mocoso... primero tuve que lidiar con Athina y ahora tengo que lidiar con su versión hombre, siento que estoy dando espirales, a parte de tener que soportar a ese mocoso mis pesadillas se han vuelto más fuertes, recuerdos de mi vida pasada  surgen todas las noches, a parte de que aún no me acostumbro a este cuerpo femenino... ¿En serio por qué tuve que reencarnar como una bestia femenina? también tengo que lidiar con varios instintos que van contra mi conciencia y  lógica...

-Al parecer la perrita no sabe razonar jajajaja

-¿Si quiera sabe sumar hasta el 10?

... los niños son crueles, pero no voy a discutir con estos niños, la última vez que discusti con alguien fue con Rivir la hermana de Pipir, he hice llorar a esa rizos de oro, si... quizás me pase de la raya, desde entonces solo me quedó callada, mostrar mis cualidades intelectuales a mis padres me hacen sentir más que satisfecho.

-¡eh! bicho bola.

-... ¿Ahora qué quieres, Atrehus? 

-Fea.

-...

-Fea.

Este niño es incluso peor que Athina, ¿por qué no puedo tener simplemente a alguien normal para platicar?... uf, ya quiero llegar a mi casa.

*Ting ting

Y así paso las horas de clase, tome mi mochila y me fui directo a casa, no sé porqué pero siempre Atrehus me sigue, si yo paro él para, tomo otra ruta y el me sigue... al final me rendí, nunca hablamos de nada, ni siquiera cruzamos miradas, pero cuando toca la hora de separarse el se queda mirando desde lejos hasta que literal llego al edificio principal, no sé si es un acosador o un bravucón...

Los dos salimos de la puerta principal de la academia, y un grupo de chiquillas que siempre me dicen de cosas estaba esperándome a la salida.

-¡Eh! animalito, mira que hay muchas aves, ¿No te dan ganas de comerlass?

-¡Eso, eso! vamos menea la cola, cómo un perrito.

Yo simplemente las ignoré y pase de largo, pero ellas irrumpieron a Atrehus.

-¡Eh! Atrehus, sabes mi mamá hice unas galletas muy deliciosas y te he guardado algunas.

-Gracias, pero odio las galletas.

Atrehus también paso de largo y simplemente me siguió.

-...

-...

-¡Atrehus, Ellestior! chicos les he dicho que me esperaban por hoy, cielos...

-Lo siento, Tía.

-Lo siento, madre. Por cierto ¿Dónde está hermana?

-Sigue en el academia, al parecer se ha estado esforzando más en sus estudios?

-ya veo.

Tan frío como siempre ¿eh?

-Por cierto, Tía.

-¿Qué pasa Ellestior?

-Quisiera saber cómo es la escuela para señoritas, ¿puedes hablarme de ella? quisiera prepararme cuando sea el momento.

-...

De repente Athena se quedó callada, por un momento y el clima se empezó a obscurecer, parecía muy preocupada, y sus pupilas estaban sobreexaltadas.

-Yo... lo siento, pero no puedo hablarte de ello Ellestior.

-¿Ni siquiera sabes sobre eso, bola de pelos?

-¡Atrehus!... lo siento Ellestior, pero tendrás que esperar un poco más ¿vale?

-... claro.

Lo que Athena dijo me puso muchas dudas, ¿por qué esa aura de misterio y compansión?, genial otra cosa que causará más pesadillas....

Caminamos los tres, hasta que llegamos al punto donde Athena y su hijo se separaron, yo ya estaba muy cerca de casa así que camine hasta llegar a un pequeño puente...

De repente sentí un escalofrío en mi espina dorsal y una brisa muy helada viniendo detrás de mí, por un momento creí escuchar un "Te amo" pero fue tan tenue que pude haberlo imaginado, ese momento me dejo un mal sabor de boca, pero no le tome más importancia y seguí mi camino.

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¡Otro capítulo más! lamento que sea tan corto y haya tardado tanto, pero últimamente tengo mucho trabajo y tengo que comer primero :v

Sin nada más que decir, espero hayas disfrutad el capítulo (Y)