La Casa De La Luna Naciente

Avecilla Azul

La casa de la luna naciente fue construida desde un principio para la comodidad de la millonaria familia Wayne. Dicha familia se bañaba en oro, pues nunca les falto nada. Pero desde que el hijo único de la familia se hizo cargo del lugar, decidió llevar más allá las riquezas de la familia. Por ello que la mansión Wayne pasó a ser la casa de luna naciente.

Para el actual dueño de la mansión desde un principio se le inculcó el deber de ayudar a los demás, y ese  comportamiento se fue retorciendo al grado de que esa ayuda sea buena, pero, no de los mejore medios. Es por ello que Bruce Wayne, el dueño del lugar decidió ayudar a jóvenes pobres y sin hogar dándoles techo, tres comidas al día y un buen salario, pero todo esto a costa de que tienen que ser objetos de entretenimiento para las personas.  Se desconoce la razón por la cual este hombre actúa de esta forma. 

Muchos tratan a Bruce como un maldito y egoísta proxeneta pero para la  vista de las chicas y chicos que trabajan para él, lo consideran como un salvador. Pero eso es una de las tantas mascaras que este hombre tiene para ocultar sus verdaderas intenciones...

Richard Grayson es un joven de cabellos negros con unos hermosos ojos azules que a todos ponen de rodillas, una hermosa figura delgada pero musculosa. Esta persona es considerada la primera avecilla.

...

Los gritos de personas a su alrededor lo asustaban más. Ver como dos hombres rápido ponían a su madre y padre en camillas listos para ser movidos a la ambulancia que se acercó. Todo a su alrededor le aterraba, pero fueron las palabras de los para-médicos que dijeron, y fueron la razón de que el pobre niño comenzara a llorar. Sus padres estaban muertos, y pues ¿quién estaría vivo después de caer de tremenda altura?

Los voladores Grayson eran una familia de acróbatas que trabajan en un circo ambulante, pero estos dejaron de ser padres de aquel niño cuando se impactaron contra el suelo después de un descuido. Richard es aquel niño que llora para que lo dejen ver a su madre, que está cubierta con una sábana blanca. Los médicos le impiden el paso pues es demasiado joven. Todo lo que esa pequeña alma quería, era volver a ver a sus padres y verificar que los médicos mentían.

Llorando desconsolado es cuando se topa con una persona. Lucía un traje negro y sombrero el cual no dejaba ver su rostro. Este hombre le extendió la mano.

-Miré lo que ocurrió... ¿quieres venir conmigo a comer algo? seguro tienes hambre pequeño.-

Ese fue el primer encuentro de Richard que tuvo con el magnate Bruce Wayne, esta persona le ofreció un hogar. Y desde entonces Richard Grayson vive bajo las condiciones del millonario siendo el primer chico que trabaje para él y también ser la avecilla azul.

Todo eso sucedió cuando Richard tenía diez años de edad. Pero ahora, quince años después. El niño deprimido y enfermizo cambio a una muchacho atractivo, siempre preocupado por el bienestar de los demás y más de aquellos chicos que trabajaban con él, ya que los considera como su familia. Pero como se dijo, han pasado 15 años desde que este muchacho trabaja en la casa ganando se el puesto del ave azul. Este chico es el responsable de que la alegría y la diversión estén siempre en la casa, jugando con los chicos, animandolos a que sus vidas son afortunadas aunque no lo parezcan.

Pero este chico está cansado de fingir tanto, el buscaba en Bruce una nueva figura de padre. Pero este jamás lo demostró con nadie. Y siendo visto y tratado como mercancía, era la vida que este chico decidió tener, creyendo que lo soportaría. Pero no fue así. Richard está cansando de fingir tanto. De fingir que es feliz en un hogar al cual no pertenece. Pero fue lo que él decidió cuando tomó la mano de Bruce en ese entonces. Ahora solo está destinado a dar sonrisas para alegrar a sus amigos y no preocupar los , también a dar sonrisas que provoquen a los hombres que requieren y compren de sus servicios si de un objeto se tratase. Esa no es la vida que él quería. El solo quería que hubiera una persona a la cual darle tantos años de cariño reprimido.

Pero fue ahí cuando en un día rutinario de trabajo en la mansión lo miró. Un muchacho pelirrojo. Estaba tomando una copa de la gran mesa del saló,  cuando Grayson mira sus ojos verdes. Parecía una fantasía tal vez de tanto que bebió esa noche para reprimirse y sonreír más a los clientes. Pero no, ahora lo tenía enfrente de él, quieto. Ambos mirándose a los ojos. Pero cuando estuvo a punto de decir algo una decrepita mano lo toma y se lo lleva.

Ahora estaba con un anciano, arrugado por el tiempo. Richard solo estaba sentado a un lado de este hombre, callado y mirando el suelo mientras pensaba en aquel chico pelirrojo que vio en la sala. Después de unos momentos un hombre se les acerca.

-Bien Rick, se terminó tu tiempo con Dick.- el hombre se refería a Richard, este solo se levantó y se dirigió a buscar a ese chico en compañía del hombre de hace un rato. Ambos llegaron al salón de hace unos momentos.

El hombre miraba a Dick, notando que este estaba buscando a alguien o algo.

-Sí quieres te puedes retirar ya.-

-No lo creo, va a llegar otro cliente.-

-No lo creo, llamó para cancelar su cita . Así que tienes el resto de la noche libre.-

-Pero Bruce me pondrá a trabajar en barra o algo.-

- Descuida, no se lo diré.-

-¿Enserio? gracias.-

Y después de eso el joven chico se dirigió confiado en encontrar a aquel sujeto de hace unas horas. Pasó por pasillos y cuartos en busca de esa cabellera roja. Logrando divisar una cabellera pelirroja a lo largo de un corredor. Siguiéndole a paso veloz lo alcanzó. Dick toma el hombro de esta persona para llamarle la atención. Esta persona llevaba una sudadera con capucha de color gris, muy sospechoso ya que esa persona parecía estar merodeando en lo que parecía el vestidor de los chicos. Cuando este gira su cabeza Dick comprende que se equivocó de persona. Y viendo que este no era el chico que buscaba y también de darse cuenta que estaba fisgoneando en los vestidores de los hombres, es cuando Dick decide cerrar la puerta del vestidor enfrente de ellos.

-Deberías ir a recepción a pagar por una cita si quieres ver a uno de mis amigos y no fisgonear- después de eso Dick se retira.

Continuando en su búsqueda es cuando llega a otro salón ya agotado por no poder ya, se sienta en una silla para tomar algo y es cuando se da cuenta que en la ventana cerca de donde está sentado mira como aquel chico pasa por la puerta con la intención de irse. Y sin reparo alguno Dick pide dos vasos de bebida y cuando los tiene se dirige a toda velocidad a donde miró al pelirrojo. Llegando en si al estacionamiento.

Con paso un poco temeroso se encamina por los montones de autos que hay en el lugar. Mirando que en uno hay una luz, se acerca a ese coche para verificar, y efectivamente, el pelirrojo estaba ahí.

Tocando ligeramente la ventana es cuando mira que el pelirrojo se sorprende. Eso provocó algo en Dick, la reacción de ese hombre.