La Vida Te Alcanzó

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Después de quedarse embobado por los ojos de aquel chico, Wally mira que un hombre ya viejo lo toma del brazo y se lo lleva, y como desde un principio Wally mira que los ojos de ese chico están llenos de cansancio. Eso le provoca un sentimiento de tristeza ya que en su posición no tiene nada que hacer para ayudar a ese chico. Lo cual le parece raro ya que jamás se había preocupado de esa forma por un desconocido. Y con ese sentimiento en la garganta es que él también se va de ese salón en busca de la salida.

Cruzando pasillos parecidos a un laberinto que le tomaron mucho tiempo, logró encontrar una salida. Y cuando cruzó esta, se decidió a tomar su móvil ya que por tanto ruido no percibió que tenía muchos mensajes de su prometida Linda. Tomando camino al estacionamiento, divisando el auto y entrando en él, se la paso respondiendo los numerosos mensajes que Linda le había enviado, aún estaba en la tarea de responder en donde estaba, cuando el sonido de alguien tocando la ventanilla lo sorprendió, dando un pequeño respingón. Pero cuando se calmó pasó a mirar de quien se trataba. Se quedó pensativo puesto que el responsable es el chico de hace rato. Después reaccionó y rápido abrió la puerta para salir del coche.

Cuando estuvo por fin afuera cara a cara con el ébano ambos volvieron a tener ese encuentro de miradas. Wally se da cuenta que está poniendo nervioso al otro. Rápidamente se disculpa por tan raro comportamiento.

- Lo siento, no quería... me llamo Wally, bueno me conocen por ese nombre, en realidad me llamo Wallace Rudolph West.-

-Descuida... Me llamo Richard, pero por favor llámame Dick. Wally, dime. ¿Eres de aquí?-

- No lo creo, vengo de ciudad Central, mis amigos y yo vinimos, pero la verdad no quería... no es por ofender claro... más bien quiero decir... yo, mis amigos y linda y y y...-

Wally es consumido por los nervios y comenzó a tartamudear con lo que le decía a Dick. Este solo le pareció gracioso la forma en que este chico trataba de resolver el lío que dijo con respecto al trabajo de Dick.

- No quise ofender tu estilo de trabajo... es un trabajo honrado y lo reconoz...-

- Ya puedes parar, te traje esto.-

Dick en un intento ofreció la copa extra que tenía en su mano para que Wally la tomara y se callara o jamás terminarían. El pelirrojo toma el objeto y le agradece a Dick el gesto.

-¿Detectas la deshidratación en las personas?- Dice Wally.

- Digamos que sí, es un don.- Responde Dick.

- Pues es un don genial.-

- Creo que todos me dicen que todo lo que hago es genial, si entiendes a lo que me refiero.-

-Ok creo que entiendo más o menos... y dime, ¿qué se siente?-

-¿Que?-

- ¿Ser un chico con esos trabajos? ¿No te parece asqueroso que otros hombres te vean de esa forma? bueno creo que por parte de las mujeres está bien, pero un hombre, es una locura.-

Un silencio muy tenso se vino en el lugar, Wally comprendió lo que dijo y se maldijo por siempre tener esa manía de nunca pensar lo que dice. Todo se quedó callado por varios minutos. Wally parecía estar listo para recibir un insulto o un puñetazo de Richard. Eso jamás llegó.

-No tengo ningún problema que sean hombres o mujeres, estamos en pleno siglo XXl... Me da igual. Solo que si es un poco molesto seguir con eso.-

-¿Porque lo dices?-

-Es una tontería que no quiero que escuches, no quiero hacerte perder tu tiempo.-

- Descuida, los amigos jamás serán una pérdida de tiempo.-

La Casa De La Luna NacienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora