eighteen | Kim Taehyung

Capítulo 1

   —Estoy seguro de que Taehyung tiene novia -dijo Jimin recargando sus manos en la paleta de mi banca.
—Jimin, no lo se, puedo preguntárselo si eso quieres -tenía que admitirlo, aún que Jimin fuera una de las personas más lindas que conozco había momentos en los que llegaba a ser desesperante, y justo hoy era uno de esos días.
—La verdad es que me encantaría que fueras a preguntárselo. Pero hay un problema con eso.
—¿Cuál?
—Tú.
—No entiendo.
—Que tú eres su mejor amiga, no puedo saber si lo que me dices es cierto o falso.
—No sé que quieres que haga entonces.
—Dame alguna pista de si tiene novia o no.
Me sorprendí de que Jimin quisiera saber con tanta insistencia si Tae estaba soltero o no.
—¿Y tú por que quieres saber?
—¿Eso es un si?
—Es un tal vez -la verdad es que Tae no estaba de novio, al menos que yo sepa.

Jimin me miró directo a los ojos y por mi expresión se dio cuenta de que de mi boca no iba a salir nada a no ser que él me respondiera primero. Suspiró derrotado.
—Mi hermana se le confesó -dijo medio susurrandolo-. Pero él no sólo la rechazó, si no que le dijo de una manera no muy agradable que no le interesaba alguien como ella.
—¿Tae le dijo eso? -pregunté incrédula, claro que me imaginaba a Tae rechazando a alguien, pero no me imaginaba a Tae utilizando esas palabras para rechazar a alguien. Y mucho menos a la pequeña hermana de Jimin.
—Bueno, eso fue lo que me dijo mi hermana pero estaba muy enojada asi que no lo puedo asegurar.
Estaba por responderle cuando vi a Tae llegar al salón. Me buscó con la mirada y cuando me encontró me miró acusandome de algo y como si las consecuencias hubieran sido por mi culpa.

—¿Se puede saber por que no me despertaste? -me dijo medio enojado. Podía ver que con claridad como es que su cabello fue peinado por sus dedos.
—Te desperté y dijiste que me adelantara, que después vendrías tú.
—¿En serio?
—Si -le mentí con todo el descaro del mundo. La verdad no lo había despertado, ayer por la noche quiso ver una película de terror que me dejó asustada un buen rato. Así que como dormí demasiado noche pues como mínimo esperaba que él llegara demasiado tarde a la escuela.

Sentí una pequeña patada en mi pierna cuando vi a Jimin haciéndome gestos raros con la cara. Vire los ojos.
—Por cierto, me contaron que tienes novia.
Él me miro con cara de asombro y después su rostro se fue aclarando como si entendiera algo. Se volteó hacía Jimin y dijo.
—No, no tengo novia.
—¿Como sabes que fui yo? -dijo Jimin riendo nerviosamente.
—Seyeon no se interesa por mi vida amorosa, que casualidad que está sentada con el hermano de la chica que se me acaba de declarar ayer.
—Lo siento.
—No vuelvas a hacerlo.
Jimin se levantó y se fue a sentar hasta el otro extremo.

—¿Que pasó exactamente? -le pregunté a Tae y vi que aún se acomodaba su desalineado uniforme.
—Pues para empezar no me dio tiempo de bañarme, cuando salí de mi casa me di cuenta que se me había olvidado desayunar pero ya venía tarde así que sólo corrí hasta acá -me dijo sentándose en donde había estado Jimin.
—Me refería a la hermana de Jimin.
—Ah, ayer me la encontré, empezamos a platicar, ella me dijo que desde hace un tiempo le gustaba y yo le dije que no estaba interesado en ella por que había alguien más.
—Pues aclara la situación con Jimin por que su hermana se lo contó de otra manera.
Él suspiró y asintió.

—Entre otras cosas, ¿Que quieres hacer mañana?
—¿Mañana? -mañana sería mi cumpleaños dieciocho, y de no ser por Tae no le tomaría importancia.
—Podríamos hacer algunas cosas mañana que tengas dieciocho.
—Hay una diferencia entre tener dieciocho y tener mi carnet.
—Si, pero ahora tienes mi permiso.
—Woooooooow, eso me sirve de mucho. Claramente.
—Podríamos beber alcohol en tu casa, sólo si no están tus papás.
—¿Beber?
—Un adulto tiene que enseñarte niña, ¿quieres que sea Jimin?
Negué con entusiasmo.
—Descuida, me avisaron con anticipación desde hace meses que el que fuera mi cumpleaños no era una razón para estar conmigo todo el día y los escuché platicar en la cocina en la mañana así que me imagino que los veré dentro de unos días y tendré mi casa sola.

Se me quedo mirando fijamente y pensé que tal vez le había causado cierto sentimiento de lástima hasta que dijo muy seriamente.
—Tenemos que hablar, es urgente -me dijo señalando hacia arriba, quería que fuera a la azotea.
La campana sonó y entró el profesor a dar su clase. Me quedé mirando a la pizarra sin pensar en otra cosa que no fuera en lo que Tae tenía para decirme. No recuerdo la última vez que dijo que tenía que decirme algo urgente pero Tae no es de las personas que se toman las cosas en serio. Así que era de preocuparse cuando lo hacía.

Bueno gente, es la primera vez que escribo así que no estoy muy segura hacerca de como se hace esto.

PD1: Se que es el primer capítulo y no tuvo literal nada de emocionante, pero aún hay más por venir, este capítulo fue algo así como la introducción.