¿Puedes verlos? Allí, tras los arbustos. ¿Ves sus ojos?
Los veo cada noche, y me susurran cosas.
¿Quieres escucharlas tú también?
Te prometo que no dolerá, ya verás.
En la Tierra pasan cosas extrañas.
...
Hace mucho tiempo que todo permanecía en calma. Ya no se escuchaban las cadenas, ni los lamentos. No se oían pasos por los pasillos. Ni niñas riendo. Ni niños llorando.
La galería del terror: decaída. Descuidada, abandonada. Incluso por sus propios demonios. O eso nos hicieron creer.
Qué ingenuos fuimos.
Cuándo aprenderemos que de aquí nadie sale. Nadie con vida, al menos.
He visto por los corredores el ruedo de un vestido negro y pétalos marchitos de rosa que se desprenden a su paso.
He visto sombras del fuego bailar por las paredes y un candelabro tembloroso recorrerse la mazmorra una y otra vez.
La viuda del velo negro ha desaparecido de la portada de este libro. ¿A dónde ha ido? A las paredes de este calabozo se les han abierto de par en par los ojos. Y agudizaron el oído. No les va a gustar nada lo que me han contado. Y les va a gustar menos lo que está a punto de suceder.
Y es que me dicen, al oído muy bajito, que las ratas les traen rumores. Han empezado a escuchar que respira. No está muerto. No está muerto.
Y entonces, retumba el eco de un espantoso grito. Nos confirma lo que sospechábamos. No solo está vivo.
Se ha despertado.
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¡Hola a todo el mundo!
¿Adivinan lo que esto significa? Así es. Luego de mucho tiempo de silencio, el terror ha decidido que nos ha dado suficiente descanso. ¡Ahora viene a por nosotros y no tiene freno!
A dos años de la publicación inicial de Susurros a medianoche, me hace mucha ilusión anunciarles oficialmente que se aproxima una segunda ronda de relatos de terror. Volveremos a tener 25 nuevas historias, más aterradoras, mórbidas y despiadadas que las anteriores. Nuevos asesinos, fantasmas, demonios y... ¡brujas, criaturas del océano, enfermeras, títeres, bestias, entre muchos otros protagonistas de estas historias que nunca debieron ser narradas!
¡Y eso no es todo! Los reyes del terror de la primera parte no cederán su trono tan fácilmente. Es probable que veamos algunas caras conocidas en esta nueva entrega.
Es un verdadero reto para mí emprender de nuevo este viaje por los oscuros pasillos de la mazmorra, en especial cuando es plena época de carga académica y exámenes. Pero el asunto es que estas cosas no las decido yo. ¿Cómo le dices a un demonio enfurecido que espere un rato más?
Estas son sus historias. Estas son sus versiones. Todas las cosas horripilantes que han hecho narradas detalle a detalle en cada uno de estos susurros. Te invito —y mas aun, te ruego— a que no me dejes solo en este viaje maldito.
Es hora de desempolvar tu gorro azul, tomar un puñado de valor y caminar conmigo hacia la aterradora penumbra.
Ya conoces las reglas. Avanza junto a mí, sin importar qué ruidos escuches, ni cuántas garras te arañen.
Quizás así tengas alguna posibilidad de llegar conmigo hasta el final de la historia.
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