Dark Casttle.

Problema pegajoso.

El fuego se esparcía por todo el campo de batalla, la cantidad de muertes aumentaban, y ambos bandos tenían menos de la mitad de soldados.
Los dos caballeros enfrentaron espadas tantas veces que, con la fuerza que estas se movían, lograron dañar severamente ambas armaduras poderosas.
El caballero blanco se debilitaba, pero no se rendía, ya que cargaba con la salvación de los diez reinos.

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Lizbet había conseguido una túnica sucia, con la cual pensaba escapar de aquel reino oscuro sin ser descubierta.
Su plan estaba listo. Consiguió un mapa y obtuvo la suficiente habilidad para abrir la cerradura de su cuarto, pero aun había un problema. Alvar y el otro guardia seguían custodiando la puerta.
Ella tenía que salir antes de que la dejaran libre por el castillo ya que en ese momento, la vigilancia aumentaba y salir sería muy difícil.
Empezó a formular un plan perfecto, y cuando uno de ellos se retirara, ella abriría la puerta y noquearía al otro, solo esperaba que no fuera Alvar.
Puso su oído en la puerta y escucho la conversación entre Alvar y su compañero, y cuando escucho que Alvar se fue, espero unos segundos, y con una almohada en mano, abrió la puerta y dejo inconsciente al hombre lagarto.
Lo metió a su cuarto y luego le quito las llaves. Después lo encerró.
Lizbet empezó a buscar rutas de escapes, y cuando bajo lo suficiente, entro a un cuarto y escapo por una ventana.
Se escondió en unos arbustos hasta que logro salir del castillo, pero ahora tenía que cruzar las puertas del imperio, pero este era muy grande, y no sería tan rápido como ella pensaba.
Daw y los demás acababan de salir de otro pueblo donde descansaron y comieron después de derrotar a unos criminales.
Su viaje era casi normal, a excepción de que en el pueblo pasaron un montón de cosas entre ellos.
Gadea había aplastado por accidente a Froilán y él no lo había tomado muy bien.
Xarot y Brais se embriagaron demasiado, y Brais coqueteo con dos camareras mientras que Xarot intento imitarlo con Liliet, y por no controlar sus palabras, ella le dio una buena bofetada.
Daw y Yamilet empezaron un entrenamiento con sus espadas, y después de unos movimientos en falso, Daw golpeo un árbol con resina y las gotas que tenía en su espada se pegaron en las ropas de ambos y luego sus ropas se pegaron con las del otro, y teniendo en cuenta que los dos ya habían tenido encuentros raros con el otro, esto era algo incómodo.
Luego, mientras Xarot seguía ebrio, se subió al cabello de Gadea y después de gritar varias cosas, se enredó en su cabello y tuvieron que sacarlo con aceite, el cual tuvieron que comprar.
Después de esa aventura, Brais estaba lleno de besos, Gadea con el cabello revuelto, Yamilet y Daw no se podían ver directamente otra vez, Froilán estaba enojado y adolorido, y Liliet estaba cargando a Xarot después de haber tomado su primer cerveza.
Toda la aventura había tomado caminos distintos, y más que un grupo de guerreros, parecían un grupo de amigos raros e inadaptados.
El camino iba casi normal hasta que entraron a un bosque. Un bosque tan grande como Gadea, por lo que ella no los iba a poder orientar.
Daba algo de miedo, pero no podían detenerse, ya que podrían perderse entre los árboles, ya que el camino había desaparecido.
Xarot se despertó y estaba muy confundido y ebrio.
Él no recordaba nada de lo que había hecho antes de salir del pueblo.
-¿Dónde estoy?-
-Por fin te levantas- dijo Lili mientras lo tiraba.
-¿Qué paso?-
-Te juntaste con Brais- contesto Gadea.
-No le digas esas cosas al joven- se quejó Brais.
-Xarot- decía Lili -Te recomiendo que no le hagas caso a Brais. Es muy mala influencia-
-Punto para Lili- dijo Daw.
-(Desgraciado) Mejor no digas nada...- respondió Brais.
-Además, tarde o temprano Xarot iba a beber- completo Froilán.
-Pero aún es muy joven- dijo Liliet.
-Y causo muchas molestias- dijo Yamilet.
-¿También el accidente con la resina?- respondió Brais sarcásticamente.
-Nadie lo está culpando por eso- respondió Yamilet.
-¿Y por qué paso eso?- pregunto Gadea.
-*sarcástico* Veras. Cuando dos personas se aman, ellas empiezan a hacer cosas que no...-
-¡QUE NO SOMOS NOVIOS!- le gritaron Daw y Yamilet a Brais.
-Me duele la cabeza- se quejó Gadea -Podrían bajarle al volumen de sus bocas-
-Solo deja que se besen y ya-
-¡QUÉ NO SOMOS NOVIOS!-
-¿Ehhh?- miraba Xarot de cabeza mientras lo jalaba Lili -¿Desde cuándo tenemos a un nuevo compañero?-
Todos se detuvieron y se voltearon para ver lo que había detrás de ellos.
-Blump- dijo una slime que venía detrás de ellos.
-¡Yo la derrotare!- dijo Brais sacando su espada.
Luego ataco a la slime, pero ella evito su ataque. Brais lo intento de nuevo, pero ella volvió a evitarlo, como si fuera un baile.
Después de un tiempo, él intento cortarla en dos, pero ella dio un gran salto y luego trato de comerse la mano de Brais.
Cuando él la vio en su brazo, trato de quitársela golpeándose en un árbol, pero solo termino lastimándose a sí mismo.
Luego la slime se acercó a los demás, y al estar lo suficientemente cerca de ellos, bajo la cabeza en señal de respeto.
Todos se quedaron sorprendidos cuando ella había hecho ese gesto ante ellos.
La slime levanto su rostro y sus ojos, completamente verdes con amarillo, se hicieron grandes y tiernos, provocando que las chicas la vieran de la manera más tierna posible.
La slime sonreía, y sin previo aviso, una espada la atravesó por detrás. Era Brais quien sostenía la espada, pero eso no fue suficiente para matarla.
Ella se dio la vuelta y, gracias a su estructura física, la espada no la había lastimado. Lo miro fijamente y luego coloco su mano encima del rostro de él.
Brais se separó rápido de ella, dejando su espada en la slime. Ella la tomo y se maravilló con el resplandor que esta tenia.
Brais intento de nuevo atacarla, pero Lili lo detuvo.
-¿Qué crees que haces, Liliet?- pregunto Brais.
-No la lastimes-
-¡Pero es un monstruo!-
-No es cierto. Ella no es ningún monstruo. *dirigiéndose a la slime* ¿Cuál es tu nombre?-
-Blup-
-¿Vives por aquí?-
-Blump- dijo asintiendo.
-Eres muy buena, ¿Verdad?-
-Blump-
-Es hora de irnos- decía Daw.
-Muy bien, ya casi termino- respondió Lili -*mirando a Blup* Luego te veo, ¿Si?-
-Blup-
-Awwww. Cosita tierna-
Luego retomaron el viaje, pero Brais estaba nervioso.
Salieron del bosque y todo había vuelto a la normalidad, a excepción de Brais, quien estaba nervioso.
En un momento, Brais escuchó un ruido raro, y decidió darse la vuelta, solamente para ver a su nueva pesadilla.
-¿Chicos?- dijo con miedo.
Todos se dieron la vuelta y vieron a Blup que los seguía.
La saludaron y luego trataron de continuar, pero a cada paso que daban, Blup daba uno, y si ellos daban dos, Blup también los daba.
Liliet se acercó a ella, y extendiendo su mano como si de un cachorro se tratase.
Blup se acercaba poco a poco hasta que Lili empezó a acariciar su cabello y ella hacia unos soniditos raros, pero agradables.
-¿Qué haces aquí?-
-Blump-
-¿Tienes hambre?-
En ese momento, Brais acerco un poco su mano, y ella intento comérselo de nuevo.
-No hagas eso. Él está sucio-
-Bluuupy-
-*abrazando a Blup* Daw. ¿La podemos llevar con nosotros?-
-¡NOOO!- grito Brais -No quiero que esa cosa este con nosotros-
-No seas cruel-
-¡Ella casi me come!-
-No seas exagerado, simplemente estaba jugando-
-Blup-
-Daw, dile que no podemos aceptar a una monstruo en el grupo-
-Solo mírala Daw. No la podemos dejarla sola-
-Daw, decide-
-Sí. Tú eres el líder del grupo. Decide-
-Muy bien- respondió Daw -Yo digo que se puede quedar-
-¿Enserio? Gracias gracias-
-¡Pero ella es una slime...!-
-Tú eras un criminal y te aceptamos en el grupo- dijo despreocupado.
-Tienes razón pero... *frustrado* ¿Sabes qué? Que se quede, pero que no se me acerque-
Continuaron el viaje, y con una nueva compañera muy especial se podría decir que el equipo al fin estaba terminado.
El atardecer empezaba a caer, y a todos les empezaba a invadir el sueño. Pararon y empezaron a montar un pequeño campamento para pasar la noche.
Todos hacían varias cosas para prepararse o distraerse en lo que se oscurecía el cielo, y con la ausencia de cualquier otro rastro de vida, todo era pacifico.
Brais estaba con una hoja de papel, donde escribía otra carta como todos los días. Pero había algo que él no había visto y era que estaba siendo observado.
-Blump-
-¿Qué? ¿Qué haces aquí?-
-*mirando la carta*¿Blup?-
-Ni se te ocurra-
-*decisiva*Blup-
En ese instante, Blup ataco a Brais para quedarse con la carta, pero Brais se defendió con el pie, pero eso no la detuvo ya que la había atravesado.
Los dos empezaron a pelearse hasta que Blup jalo de la carta y la rompió.
Brais se enojó mucho y trato de darle una cachetada, pero su mano la atravesó. Blup volvió a intentar comerse la mano de él, pero él la saco de su boca demasiado furioso.
Brais recogió los pedazos de la carta y se fue muy enojado, pero no se dio cuenta que olvido uno.
Blup recogió el pedazo olvidado y trato de entenderlo, aunque no sabía leer ni escribir, pero aun así, a ella le parecía entretenido ese pedazo de papel, roto y arrugado, pero con palabras extrañas que escondían algo.