~CAPÍTULO 07~

2K 265 43
                                    

~CAPÍTULO 07~

~AMIGOS~


Veo como poco a poco las palomitas van explotando en el microondas, el pitido de éste me avisa que ya están listas. Voy sonriendo a mi habitación con el bowl de palomitas en una mano y un enorme vaso de Coca-Cola en la otra.

Es sábado y nada me hace más feliz, ya que tengo todo el día libre tanto en la escuela como del trabajo, lo cual significa una cosa, ver dramas coreanos hasta el anochecer, mi momento favorito es cuando enciendo el computador y elijo a ese bello drama que me hará gritar, llorar, reír odiar y amar a cada personaje.

Soy una loca fanática de los dramas coreanos, de hecho, soy una loca fanática de todo lo que sea coreano, sobre todo los chicos. Los coreanos tienen algo que los hacen tan atractivos, tan sexys, tan ¡Ahgg! Concéntrate, Duxelle.

Enciendo la laptop y coloco uno de los nuevos que estaban en la página, mis ojos, mi mente y todos mis sentidos se concentran en la pantalla, todo lo demás pasa a segundo plano.

¿Tengo un problema? Tal vez, pero podría ser peor. Mi madre ama que pase la mayoría del tiempo en casa, así sea enviciada en esos "chinos" >>así los llama ella<< mi padre y ella son algo paranoicos, ya que se enfrentan con tantos casos en sus trabajos.

Papá debe atender a chicos que en la madrugada se van de fiestas, conducen ebrios y no terminan nada bien. Mamá por su parte, debe atender a tantos adolescentes en adicciones, así que mi locura por lo dramas es una tontería.

Ellos están agradecidos, pero la que debe agradecer soy yo me han dado una buena educación y siempre, siempre están ahí para nosotros.

Mi celular comienza a sonar, pero yo no puedo apartar la vista de la pantalla de mi pc, así que dejo que suene mientras yo como más palomitas y bebo de mi Coca-Cola. Seis capítulos después ya no sé si pueda parpadear, mis palomitas junto con mi Coca-Cola se había acabado, me levante arrugando la cara al estirar mi pierna, tomo el vaso y el bowl, salgo de mi habitación y llegó a la cocina para así poder hacer más palomitas.

Mientras escucho explotar el maíz mi celular comienza a sonar de nuevo, miro la pantalla y el nombre de Michelle aparece.

¿Habrá pasado algo?

—¿Hola? ¿Michelle? —Contesto algo preocupada, se supone que los sábados no trabajo.

Dulce, hola. Lamento llamarte hoy, pero—se quedó en silencio unos minutos—de verdad lo lamento, pero necesito de tu ayuda.

—Si dime Michelle ¿En qué te puedo ayudar?

Veras me acaban de llamar mis padres, sucedió algo de último minuto y necesito ir a su casa ahora ¿Tú puede venir y...?

—¿Cuidar a Thomas? Por supuesto Michelle, puedo quedarme con él hasta que tú llegues.

Ese es el problema, la casa de mis padres esta fuera de la ciudad y me tendré que quedar allá hasta mañana, así que...

—¿Quieres que me quede a dormir? —Eso no sonaba bien.

Sí, entiendo si no puedes yo veré que puedo hacer o... No sé. No debí llamarte.

—¡Espera! Yo... Está bien, yo me quedaré—no sé en qué me estaba metiendo, no sabía si mis padres me darían permiso.

—¿De verdad? Ay linda muchas gracias, de verdad no sabes el peso que me quitas de encima.

—En unos minutos llego a tu casa.

Gracias de nuevo, aquí te espero.

¿Y ahora qué hago?

¿Mi libro favorito? Tú (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora