𝗥𝗘𝗦𝗖𝗨𝗘 𝗠𝗘

12: Las cerezas no son coronas

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11:30 pm, tan solo 30 minutos más para que dieran las 12.

Tan solo 30 minutos más para que "corriera contra Penny" y lo digo entre comillas porque la que en verdad iba a montar la motocicleta, en medio de la noche desde Riverdale a Greendale, era Cheryl.

— ¿Estás segura de que quieres hacer esto? —pregunté a mi prima.

— Por enésima vez, sí. —dijo Cheryl acomodando la falda azul pastel. — Aaagh, me siento como monja.

— Jódete. —le dije rodando los ojos, ella solo rió.

— Es broma, prima Betty. —Cheryl dijo con su típico tono. — No seas tan amargada y relájate un poco.

— ¡¿Cómo me pides que me relaje?! Estoy apunto de decirle a Jughead que estoy embarazada y no sé cómo vaya a reaccionar.

— Él va a estar encantado con la noticia, B. —Verónica me calmó abrazándome. — Y si no lo está, es porque es un idiota y no te merece.

— Concuerdo con Verónica. —dijo Toni quien se encontraba cepillando la peluca rubia que mi prima usaría. — Jughead estará más que maravillado al saber que ya tiene próximo heredero o heredera al trono.

Las cuatro reímos ante lo dicho por Toni.

— Eso espero. —dije a todas mis amigas, Verónica seguía abrazándome sin querer soltarme y era algo que realmente le agradecía.

— ¿Estás lista? —preguntó Jughead del otro lado de la puerta.

— No, pero puedes irte ya. —le contesté, él no sabía nada del engaño que armaría. — Te veré ahí, todavía me falta maquillarme.

— ¿Betty Cooper? ¿Maquillándose? —Jughead preguntó incrédulo.

— Bueno, solamente déjame terminar este capítulo y ya. —mentí para que me creyera.

— Bien, eso si suena más como tú. —Jughead rió. — Te veré allá.

— Sí. —contesté y en cuanto escuché los pasos de él bajar por las escaleras, suspire.

— Bueno, estoy lista. —Cheryl sonrió al terminar de caracterizarla.

— Wow, son más parecidas de lo que creen. —dijo Toni viendo a su novia.

— Esperemos que Penny y los Ghoulies se la crean. —suspiré algo preocupada.

— Todo va a salir bien, tú tienes que estar tranquila. —Verónica volvió a consolarme.

— Oye, prima Betty. —me llamó Cheryl. — ¿Qué es esa caja?

— El regalo de Jughead. —contesté.

— Oh mierda. —Toni se quejó con frustración y sacó su celular. — Se me olvidó por completo que hoy era su cumpleaños.

— ¿A quién le llamas, Tee-Tee? —preguntó Cheryl pintándose los labios de rosa.

— A Sweet Pea, le diré que organizaremos algo rápido en el Wyrm terminando la carrera. —dijo Toni marcando unos números en su celular.

— Mala idea. —negó Verónica.

— Terrible idea. —corregí. — Su cumpleaños pasado le organicé una fiesta de cumpleaños, decoré con globos, e incluso le horneé un pastel en forma de hamburguesa. Y lo jodí todo. Él odia su cumpleaños y créeme que una fiesta es lo que menos desea.