XXIII: Déjame protegerte una vez más...

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Narra Aisha:
Estábamos todos callados por unos segundos hasta que Gloxinia empezó a hablar.

Gloxinia: En el pasado, nosotros cuatro tratamos de vencer al Rey Demonio juntos, ahora somos enemigos, el destino siempre resulta irónico ¿No es Así?- dijo serio- Meliodas, Aisha, quiero saber lo que realmente piensan, ustedes no quieren que peleemos a muerte ¿Verdad?

Meliodas: Por supuesto que no- dijo él para que los dos comenzaremos a caminar hacia sus direcciones.

Aisha: Nosotros conocemos perfectamente la razón y el sentimiento que los provocó a irse a ese lado- dije de manera muy seria.

Meliodas: Gloxinia, fuiste traicionado por aquellos en quién creías y te arrebataron algo incluso más importante que tú vida- dijo con la misma seriedad.

Aisha: Drole, tu eras un Guerrero que aspiraba a ser el mejor, no obstante, tu gran orgullo fue aplastado- dije de una manera un poco despreciable.

Gloxinia: Sí tanto dicen entendernos, entonces, ¿Por qué hacen esto?- dijo un poco irritado.

Meliodas:  Porque aunque entendamos sus situaciones, ¡Una vez que te vas a ese lado, todo se acaba!

Hice mi mirada hacia un lado pensando en todas las muertes que alguna vez causé y que a pesar de tener buenos momentos, también hubo muchos malos momentos por los que pasé.
Sin pensarlo dos veces saltamos para dar un ataque y Gloxinia sacó su lanza sagrada una vez más y nos sacó volando a hacia una dirección opuesta a la que estábamos. Tardamos unos segundos en recuperarnos, pero regresamos a toda velocidad a nuestro lugar de combate, Gloxinia trató de detenernos con alguna especie de árbol maldito, pero lo corté en pedazos en un instante.

Aisha: Lo siento, ¡Pero no podemos esperar!- dije con mucho enojo.

Meliodas casi atraviesa el estómago de Gloxinia de un simple golpe, yo estaba cuidando la espalda de Meliodas, le Di un golpe a Drole pero el logró apartarme de la espalda de Meliodas haciendo que interrumpiese su plan de matar a Gloxinia.
Pero a pesar de mi falla, Meliodas logró herir de gran manera a Drole pero no servía de nada ya que ellos lograban curarse con la "Gota de vida" otorgada por el tesoro sagrado de Gloxinia.

Aisha: ¡AGHH! Ese maldito tesoro sagrado está siendo un asqueroso fastidio- dije muy molesta y malumorada.

Meliodas: Sólo no hay que darles la oportunidad de sanarse- dijo de manera muy seria.

Esta vez nos dividimos, el fué contra Gloxinia y yo contra Drole, estuvimos combatiendo por un buen rato hasta el punto que ellos estaban cansados.

Aisha: Ya es hora- dije de manera seria

Meliodas: ¡Es hora de acabar con ustedes dos!- Meliodas estaba apunto de atacar hasta que los demás mandamientos llegaron.

Narra Meliodas:
No quise empezar con la batalla de manera rápida, tenía que sacar a Aisha de este lugar pasara lo que pasara...

《Te sacaré de aquí》 le dije a Aisha de manera mental y ella se quedó ligeramente congelada por lo que pude ver de su expresión.

《¡Ni lo sueñes!
¡No te dejaré morir aquí  sólo!》
Respondió mentalmente muy enojada
Y preocupada.

《¡NO  TE ESTOY PREGUNTANDO! ¡TE LO ESTOY DICIENDO AHORA!》 exclamé molesto mentalmente para herir ligeramente a Aisha y sacarla volando de ese lugar.

Derrieri: ¡Mira! ¡Esa bastarda está escapando!- exclamó furiosa a Monspiet.

Teldram: Yo me encargaré de ella... iré a darle un saludo- dijo de manera fría desvaneciendose por su velocidad.

La mejor amiga de Meliodas 2:  La historia continúa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora