Estúpido Hyung ♥ Vkook

CAPÍTULO 17

El joven camarógrafo se encontraba respaldado en una de las columnas exteriores del edificio, pensando e intentando calmarse, cuándo divisó que la pequeña limusina que les llevaría al aeropuerto ya había llegado.

Le extendió las maletas al chófer para que comenzase a meterlas en el maletero mientras que él se dirigió a llamar a los modelos.

-Taehyung, Hoseok, el chófer ha llegado. - pronunció desde la puerta.

-¿Ya? Vale, vamos Hoseok.

Se oyó un bufido.

-¿Estás mejor? - preguntó el de cabello naranja una vez que se encontraba a su lado, apoyado en el marco de la puerta.

-Si... v-vamos.

Jungkook cometió el error de levantar la mirada y toparse con los ojos de Taehyung mirándole con preocupación a la vez que con dulzura.

«No...»

«No me mires así...»

El mayor comenzó a inclinarse mientras sus ojos se iban entrecerrando lentamente, ambos sabían que iba a suceder, pero uno de ellos no estaba estable emocionalmente.

«N-no te acerques Taehyung...»

«¿Por qué no digo nada?»

«¿Por qué me quedo parado sin hacer nada?»

Apenas un par de centímetros separaban sus labios.

«¡Reacciona joder!»

Agradeciendo a que todos sus estímulos reaccionasen, el menor se separó dando un par de pasos hacia atrás, y, antes de que el mayor volviese a abrir los ojos, el castaño ya había desaparecido.

-¿Jungkook?

-Está un poquito raro tu secretario, ¿no crees? - preguntó el sobrio una vez de pie.

-Quizá está nervioso por montar en avión... - reflexionó por lo bajo.

-Pff... - el mayor no pudo evitar reír - Es la conclusión más estúpida que te he escuchado decir.

-¿Qué se supone que debo pensar?

-Yo que sé, conmigo no va la cosa. - excusó.

-Entonces cállate de una puta vez. - comentó enfadado.

El pelirrojo alzó sus manos dando a entender que no opinaría más y se dirigieron al vehículo, dónde se encontraron al castaño mirando muy profundamente la pantalla de su móvil.

-¿Qué ves? - preguntó Taehyung al sentarse a su lado.

Este inmediatamente apagó la pantalla y le dio la vuelta al móvil.

-Nada.

-Jungkook ya... ¿qué te pasa? ¿He hecho algo malo? ¿Has recibido alguna mala noticia? Lo que sea, dímelo por favor no puedo verte así.

El pequeño giró su cabeza y sintió un fuerte pinchazo en el estómago, no podía decir nada, debía esperar, observar, pensar, y entonces, hablar.

-Yo... estoy nervioso, por el viaje.

Taehyung suspiró con alivio.

-Debías haberme dicho antes, me preocupaste. ¿Necesitas que haga algo por ti?

-Déjame solo.

Instantáneamente el pequeño se giró apoyando así su cabeza en el respaldo y mirando hacía la ventana.

-¡Nos vamos de viaje chicos!

Anunció gritando mientras entraba al coche con... ¿una chica?

-¿Y ella quién es? - preguntó el joven secretario.

-Natasha, mi... acompañante. - la miró de forma pícara.

-Otra vez... - el de cabello anaranjado tiró su cabeza hacia atrás.

-Y-yo e-encantado de conocer a tu...

-¡Una puta! - dijo sorprendido.

-¡No grites niño! Natasha es una scort de lujo. - recalcó.

-¿Pero no eras gay? - cuestionó cada vez más confuso.

-Hoseok es bisexual y en los viajes se suele traer a putas que no entienden el idioma, ahora ya dejad el tema. - intermedió.

-Tampoco es que me interesase mucho... - volvió su vista a la ventana.

-Ya bueno, Natasha y yo nos vamos a la parte trasera de la limusina, disfrutad las vistas. - dijo con un estúpido aire de superioridad.

Ya todo dicho y guardado, emprendieron camino al aeropuerto y en cuestión de segundos se encontraban en el avión, camino a París.

Y es que se pasó desesperadamente lento para ambos locuelos enamoradizos, pues ninguno cruzó palabra alguna durante todo el trayecto.

***

-¿Cuántas camas tiene nuestra habitación? - preguntó el modelo menor.

-¿Nuestra? Ah no, vosotros tenéis una habitación, y Natasha y yo otra. - sonrió pícaramente - De hecho ya nos vamos, pasadlo bien.

El pelirrojo y la rubia polioperada salieron de la habitación demasiado risueños, justamente lo contrario a los otros dos, quienes apenas en cuestión de minutos parecían dos extraños. 

Y así fue como pasó el resto del día, sin intercambiar palabra.

Nada más acomodarse, el pequeño fue a dar un paseo, solo, para poder tranquilizarse y pensar cuidadosamente que debía hacer.

Mientras el mayor, se tomó una ducha caliente en la que no pudo evitar que su mente se viera atormentada por todos los pensamientos que se le cruzaban.

No encontraba respuesta alguna a por qué Jungkook estaba así, la noche anterior fueron a cenar juntos, rieron, se besaron al despedirse, y de repente, era una persona totalmente diferente.

Le miraba pero no le sonreía, le hablaba pero él callaba, le veía pero no le sentía.

Si tan sólo tuviese una pista, podría intentar adivinar qué pasaba, sólo una...

-¿Qué ha pasado Jungkook? Por favor, díme algo...

Susurró entre ligeros sollozos mientras las ardientes gotas seguían descendiendo por su cuerpo.

Gracias por leer!~ ❤