Mensaje de Amor "Flozmin"

CAPÍTULO 14

En el poco tiempo que le tomó cocinar los filetes, Jazmín observaba a Flor. Había algo increíblemente atractivo en ella, en su figura iluminada por el sol que estaba terminando de ocultarse. El cielo había tomado un color naranja, y la suave luz la hacía lucir especialmente hermosa, oscureciendo sus ojos, su pelo moviéndose junto a la suave brisa.

-"En qué piensas?"

Se tensó con el sonido de su voz, de pronto dándose cuenta que no había dicho una sola palabra desde que comenzó a cocinar.

-"Solo que tu ex marido es un boludo por todo lo que te hizo" -Flor le regaló una sonrisa levantándose de su asiento y caminando a su lado.

-"Pero si todavía estuviese casada, no estaría aquí con vos"-Tocó gentilmente su hombro.

-"Y eso"-Dijo sintiendo su tacto -"Sería una pena"

-"Si lo sería"

Sus ojos se cruzaron, perdiéndose en la mirada de la otra por unos instantes. Finalmente Jazmín desvió la mirada y aclaró su garganta.

-"Creo que esto ya esta prácticamente listo"

Viendo a su alrededor, Flor comentó

-"Es muy pacífico aquí. Me doy cuenta por que compraste el lugar"

-"Algo en el océano ocasiona eso en la gente. Creo que por eso vienen aquí a relajarse"

-"Dime Jazmín, en que piensas cuando estás aquí sola?"

-"En muchas cosas"

-"Algo en particular?"

Pienso en Elena, quiso decir pero no lo hizo.

-"No en realidad. Algunas veces pienso en el trabajo, algunas pienso en lugares nuevos que quisiera explorar. Otras pienso en navegar lejos y dejar todo atrás"

-"Realmente podrías hacer algo eso? Irte y no volver?"

-"No lo sé, pero creo que si podría. Contrario a ti no tengo familia, de hecho fuera de mi amigo Javo no hay nadie más, y de alguna forma, creo que el entendería. Nos parecemos mucho, creo que si no fuese por mi, el se hubiera ido hace tiempo"

-"Pero eso sería como huir"

-"Lo sé"

-"Por qué querrías hacer eso? -Presionó, aunque de alguna forma ya sabía la respuesta. Cuando no respondió, se acercó a ella y habló suavemente -"Jaz, se que no es de mi incumbencia, pero no puedes huir de lo que estás pasando. Además tienes tanto para ofrecerle a alguien."

Jazmín permaneció en silencio, pensando en lo que le había dicho, preguntándose como es que parecía saber exactamente que decirle para hacerla sentir mejor.

Durante los siguientes minutos, los únicos sonidos a su alrededor provenían de algún otro lugar. Jazmín terminaba con los filetes, la suave brisa causaba el movimiento de unas campanas de viento, las olas rompiendo en la costa.

La mente de Jazmín se perdió en los acontecimientos de los últimos días. Pensó en aquel primer momento que la vio, las horas que pasaron en Destino, y su caminata por la playa. La tensión que había sentido al inicio del día había desaparecido casi por completo, y mientras estaban una junto a la otra en el ocaso, tuvo la sensación de que había algo más a esta cena de lo que alguna de ellas quería admitir.

Florencia entró nuevamente a la casa para terminar de arreglar la mesa. Sacó las papas del horno, quitó el aluminio y colocó una en cada plato junto con la ensalada y diversos aderezos que había encontrado. Debido a que ya estaba oscuro dentro de la casa, encendió las luces de la cocina, pero era demasiada luz. Volvió a apagarlas. Por impulso, encendió las velas, dio un paso atrás para evaluar si era demasiado. Decidió que era perfecto, tomó la botella de vino y la colocó sobre la mesa al mismo tiempo que Jazmín entraba.