Mensaje de Amor "Flozmin"

CAPÍTULO 5

Tras leer la carta, se recargó en el respaldo de su silla y llevó sus dedos a sus labios. El ruido de la oficina parecía como algo lejano. Tomó su bolsa, buscó la primera carta, las puso una junto a la otra. Leyó la primera carta, seguida de la segunda, después las leyó a la inversa, sintiendo como si estuviera espiando en un momento privado y secreto.

Se levantó de su escritorio sintiéndose confundida y alterada. Fue a una de las máquinas expendedoras y compró un jugo de manzana. Intentando aclarar su mente comenzó a ordenar todas las cosas en su escritorio. Cuando terminó, nada estaba fuera de lugar, excepto las dos cartas que no había movido

Hace unos días había encontrado la primera carta y las palabras habían causado una gran impresión, aun cuando una parte de ella intentó olvidarlas. Pero ahora eso parecía imposible. No después de encontrar una segunda carta, escrita por aparentemente la misma persona. Habría más? se preguntó. Parecía increíble que otra persona, hace tres años, hubiera encontrado una carta y la hubiera mantenido guardada. Sin embargo había sucedido. pero que significaba todo?

Sabía que realmente no debería de importar mucho para ella, pero lo hacía. Abrió su lata de jugo de manzana y tomó un sorbo. Colocó las cartas de vuelta en su bolsa. Dónde estás? Esa pregunta se repetía una y otra vez en su cabeza. Salió del programa que utilizaba para escribir su columna e ingresó a un buscador de Internet. Tras dudarlo unos minutos, finalmente escribió las palabras.

RÍO QUEQUÉN GRANDE

Sabía que obtendría algo, y en menos de cinco segundos tenía una gran variedad de resultados .

Mapa de río Quequén, Necochea en Argentina.

Municipalidad de Necochea.

Necochea, Mural "Reflejos"

De pronto se sintió ridícula. Aunque Jazmín viviera en algún lugar de Necochea, aun sería casi imposible localizarla. Por qué, entonces, estaba intentando hacerlo? Claro que si sabía el motivo. Las cartas estaban escritas por una mujer que amaba a otra de manera profunda, una mujer que ahora estaba sola. De niña, había soñado con el hombre ideal -el príncipe de cuento. En el mundo real, sin embargo, la gente así simplemente no existía. La gente real tiene agendas secretas, demandas reales, expectativas reales sobre como se debería comportar el otro. Ciertamente existían buenas personas también, personas que aman con todo su corazón y permanecían persistentes a pesar de grandes obstáculos -la clase de persona que había estado buscando desde su divorcio con Daniel. Pero cómo encontrar a alguien así?

Aquí y ahora, sabía que tal persona existía -claro que era una mujer, eso no lo había esperado, menos había esperado sentir lo que fuese que estaba sintiendo desde el primer día - pero saberlo causaba algo en su interior. Le resultaba obvio que Elena, quien fuese, probablemente había fallecido. Aun así Jazmín seguía amándola lo suficiente para enviarle cartas por al menos tres años.

Dónde estás?

No tenía la respuesta, pero existía en algún lugar, y una de las cosas que había aprendido desde joven era que si descubrías algo que moviera tu interior, era mejor seguir adelante. Si ignorabas tus sentimientos, nunca sabrías lo que pudo ser, y eso era mucho peor que descubrir que estabas equivocado. Porque si estabas en un error, podías seguir adelante con tu vida sabiendo que al menos lo intentaste sin ver sobre tu hombro preguntándote una y otra vez que pudo ser.

Pero que representaba todo esto? Acaso fue el destino que la llevó a encontrar la carta o una simple casualidad? O tal vez, pensó, era un simple recordatorio de lo que le hacía falta en su vida. Decidió que podía vivir con esa última posibilidad.