Mi chico favorito. EreRi|SNK

Capítulo 6.

[Narra Eren]

—Cogí a un cliente y lo maté. Si. Como lo oyes. Ese día me pasó algo que no puedo contar. Lo apuñalé, pero mi jefe me dijo que aquello quedaría en secreto si trabajaba para el 6 años sin rechistar. Acepté, y todavía me quedan 3 años...—dijo Levi con un rostro frío y débil.

—Bebé, él lo que quiere es dinero... yo le daré su dinero.

—¡¿Acaso sabes cuanto es dinero de 3 años trabajando?! ¡Es demasiado Eren! Ni se te ocurra.

—Y ahí llega mi turno... ME LA SUDA. Esta noche iré contigo al trabajo y hablaré con tu jefe tranquilamente. ¿Está bien?

—No, te estoy diciendo que no. No está nada bien.—estaba muy furioso por mí propuesta.

—¡Perfecto! Allí nos vemos precioso~—sonreí y le besé, por lo que él se quedó perplejo. Siguió rechistando después de eso pero no me importó demasiado.

Estaba dispuesto a proseguir mi plan.

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Ya era por la noche, esperé frente al apartamento de Hange y Levi. Cuando le vi salir, le hice una seña para que subiera a mi moto. Con un leve sonrojo en sus mejillas me dio una colleja.

—Tsk, mira que eres estúpido... mocoso—dijo rodeando mi cintura con sus brazos. Notaba un ligero temblor.

—Ya veremos si soy estúpido esta noche, bebé.

Sentí que le dió otro escalofrío. Conducí hacia el trabajo de Levi y aparqué la moto en el estacionamiento para motos. (JAJAJAJ XDXD NO ME JODAS EREN NO LO SABÍA)

Cuando se bajó de la moto, cruzó sus brazos y se dispuso a entrar en su cabina para la actuación. Pero antes de que lo hiciera, lo agarré de la muñeca y lo llevé a la cabina de su jefe, obviamente ya sabía la estructura del lugar. Llamé educadamente a la puerta y me abrió un chico alto y rubio de ojos azules con las cejas gordas.

—Buenas noches, ¿es usted el dueño del local?—le dije educadamente.

—Si. No me hables como si fueses un policía, por favor...—respondió con una leve sonrisa. Oh dios me apetecía arrancarsela de la cara.

—Esta bien, ¿puedo saber tu nombre?

—Erwin. Soy Erwin Smith.—se le notaba tranquilo.

—A Levi, tu mejor empleado, le faltan 3 años para poder pirarse de este trabajo. Yo sé que tu solo quieres el dinero. ¿Está bien si te lo pago no?—clavé mi mirada en él.

—Pues no, no se quién eres pero anda deja de hacer el imbécil, es mucho dinero. Ademas, Levi esta aquí por algo mas que por el dinero.

—Eh?—miré a Levi el cual apartó la mirada—Es eso cierto, bebé?~ Responde de inmediato.

—Ya te he dicho que no lo hagas... por favor vete... o quedate si requieres de mis servicios.

—Bebé... no me iré si te veo hacerlo con otros tíos, ¿entiendes?

—JODER TE ESTOY PIDIENDO QUE TE VAYAS!! NO LO ENTIENDES?!

—Ni se te ocurra hablarme así...—mis ojos empezaban a oscurecerse.

—Ríndete—dijo Erwin riendo—ya le has oído, si quieres de sus servicios págame, si no ya te puedes ir. Levi, continuamos lo del otro día?~

"¿Lo del otro día?" Mi sangre se calentaba.

—Yo sé que lo disfrutas, dejemos a este cliente y ven aquí~—me quedé paralizado viendo como se acercaba Levi a él... Levi estaba apenado.

Todo se volvió oscuro en el momento en el que toco su brazo, y lo siguiente que ví fue a Erwin en el suelo y yo encima de él. Su cara estaba llena de moratones y sangre. Mi puño lleno de sangre al igual ¿yo lo había pegado?
Después giré la cabeza y vi la expresión que Levi mostraba. Miedo. Me levanté dejando a Erwin ahí y me dispuse a abrazar a Levi, pero se apartó...

¿Apartarse? ¿Levi? ¿De mi?
Con los ojos como platos le miré. Vi como una lágrima se caía por su mejilla. Después echó a correr.

—Levi! LEVI! LEVI ACKERMAN!

Se paró en seco. Se desparramó en el suelo. Las lágrimas recorrían su mejilla. Monté en la moto junto a él y lo llevé a la fraternidad. Le dejé entrar en mi habitación.

—Bueno, te he dicho que nadie entra en mi habitación... pero quiero saber que es lo que pasa. Estoy harto de los secretos.

—Y yo estoy harto de tí—me cortó Levi con una mirada fría.

—No vuelvas a repetir eso.

—Es la verdad. Déjame irme ya. No quiero estar a tu lado.

Sin pensarmelo dos veces metí la mano por su camiseta y la saqué por el cuello sujetando su cara.

—Que no quieres qué...—sonreí y dije con voz ronca—Bebé?

Sus brazos se paralizaron y sus mejillas se tornaron rojas. Sentí su debilidad y empecé a besar su cuello y a succionarlo. El gimió un par de veces.

—No! Para... yo... ah...—realmente podía haberse apartado ya pero obviamente no quería hacerlo.

Conseguí deshacerme de su camiseta y succioné sus botones de carne. Los torturé. Quería sentirle. Saborearle. No se en que momento mi camiseta acabó en el suelo y yo le estaba masturbando. Sacando agudos gemidos de su boca.

—Sigue... agh... Eren...—al oír mi nombre paré y sonreí mirandole. Se aclaró la garganta y gimió—Daddy~

Seguí al oírle. Más rápido. Sus gemidos se volvían más altos. Sentía un placer inmenso y acabábamos de empezar. Ya notaba mi dura erección sobre mis pantalones. Me encantaba escuchar su voz pidiendo por más.
Sin avisar, él se corrió.

—¿Ya? Demasiado rápido~—cuando dije esto, el apartó la mirada rojo.

—Tsk... cállate...

—Nadie me manda callar Ackerman~ N-A-D-I-E.

Le dí la vuelta y lamí su nuca. Mas tarde me introduje bruscamente en él. Levi se estremeció y gimió del dolor por unos minutos. Pero después empezó a gemir de placer. Nuestros gemidos inundaban la habitación y le tapé la boca ya que eran tan altos que alguien nos oiría. Tiré de su pelo excitado y le dije:

—Dilo... ah joder!

—DADDY~!—lo gritó con énfasis y se corrió por segunda vez. Yo estaba excitado pero aún faltaba.

Seguí embistiendo hasta el fondo, escuchando sus deliciosos gemidos, observando sus semblantes de placer y sintiendo la adrenalina. Levi mostraba cansancio y supe que estaba en lo cierto cuando habló.

—Estoy cansado... ya... no puedo más...—su respiración le impedía hablar más.

—Te voy a follar hasta el cansancio... no lo dudes.

Y sus párpados se cerraron. Se veía tan dulce. No entendí hasta que punto podía desmayarse en un momento así. Seguí embistiendo por unos minutos más hasta que me corrí.
Salí de él y lo arropé junto a mi. Yo abrazandole y el tan dulce mientras respiraba agitadamente. Mis ojos se fueron cerrando y me quedé dormido junto a él.