Celos.

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Ya fuera del bar, puso su mano en la pared, apoyándose en ella, sentía que estaba por caer al suelo, el no sabía sobre el embarazo de Lizzeth, ¿porque nunca lo dijo?. No pudo contenerlo más, la sangre comenzó a salir de sus fosas nasales mientras la cabeza le dolía a tal punto que incluso perdió el equilibrio y cayó al suelo mientras llegaban a su mente imágenes de Lizzeth.

—Nat, tengo algo que decirte.— dijo con un tono preocupado y una gran preocupación reflejada en su rostro.

—¿Que pasa cariño?— Preguntó Nathan, acariciando la mejilla de Lizz. —¿Esta todo bien?—

—Si... Es solo que...— Una larga pausa que no hizo más que aumentar la tensión. —Desde hace tres semanas debió llegar mi periodo, pero no lo hizo.—

—¿Estas segura?— Preguntó Nathan para después percatarse de lo tonta que era esa pregunta. —¿Has ido al médico? Quizás es alguna enfermedad.—

—Nathan, estoy embarazada.— Respondió con la mirada baja mientras sacaba un test de embarazo como prueba infalible de lo que decía.

—Hey, Nathan, ¿esta bien?— Preguntaba Jinni, preocupada. —Alguien llame a una ambulancia.—

—N-no.— Exclamó el chico mientras se sentaba. —Estoy bien, se lo dije, solo es cansancio, no he podido dormir muy bien las últimas semanas.—

—Esta bien...— Dijo poco convencida, algo le decía que era algo más que solo cansancio. —Pero, para asegurarme de que está bien, le acompañaré a casa.— Dijo en un tono que demostraba que planeaba hacerlo sin importar la respuesta.

—Supongo que no tengo elección.— Respondió mientras se levantaba y sacudía la tierra de su ropa. —Es por aquí.— Agregó, caminando lentamente con dirección al subterráneo.

Al llegar al metro, pagaron su boleto y entraron un vagón, debían transbordar después de unas cuantas estaciones para ir en dirección al lugar donde Nathan vivía.

—Nathan, ¿le puedo hacer una pregunta?—

—Acaba de hacer una.— Respondió el chico sonriendo de manera burlesca.

—¿Como era su relación con Lizzeth?— Sin darle importancia a la broma, lanzó su pregunta, provocando que Nathan estuviera un tanto incómodo.

—¿A que se refiere?— Dijo mientras desviaba su mirada.

—Solo... ¿Que tipo de relación era? Se que eran pareja, pero la última vez no me brindó nada de información.—

—Supongo que era buena, casi no discutíamos, nos entendíamos bien, había comunicación y confianza.—

—Entiendo... ¿Y como era ella con otras personas? ¿Con otros hombres?—

—¿A caso cree que me era infiel?— Exclamó notablemente irritado. —Ella solo me necesitaba a mi, jamás hubiera buscado a alguien más.—

Dada la reacción de Nathan, Jinni decidió no preguntar más, después de todo, no quería molestar a la única persona que le podría ayudar a descubrir a un asesino.

Una Mente Oscura Donde viven las historias. Descúbrelo ahora