Dolor

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Miércoles

-Doctor? Pregunto la enfermera golpeando la puerta del consultorio

-Loli?

-No es de mi incumbencia, ¿pero está bien?, no lo veo muy bien...

-Pasa y cerrá la puerta – Loli hizo caso – Te voy a contar algo, pero por favor esto queda entre vos y yo y no quiero que opines a menos que yo te diga.

-ah bueno, si me lo dice con ese tono ... lo único que le pido es que si mató a alguien no me cuente nada por favor

-Loli enserio, jurármelo!

-Gabriel hace cuánto nos conocemos? Sabes que soy una tumba, contame

-Termine con soledad el lunes ...

-Al fin! Dijo Loli alzando las manos como agradecimiento

-como? ¿No te caía bien? - la miro extrañado, no sabía que tenía una opinión sobre su ex.

-No, a mí me encantaba era hermosa, muy simpática pero no si a vos te gustaba tanto... dijo rápido mientras se mordió la lengua

-Es un don tuyo ese, el de leer a las personas, no sé cómo haces, seguro que lo que te cuento ni te sorprende.

Loli por dentro rogaba que, lo que sea que estuviese a punto de escuchar llevase el nombre de un chico en particular

-Me gusta alguien – dijo y miró a la enfermera, mientras esta escuchaba atenta – pero ... ese alguien, digamos que ... no sería el tipo de persona con la que siempre he salido ... ósea ... Gabriel rascaba su nuca, afirmar que le gustaba un hombre haría que todo lo que había pensado en su vida fuera más real ... he incluso las palabras de su padre revivieran.

-Ay Gabriel! ¿Te gusta un chico? - Si había algo que caracterizaba a Loli, además de su bondad, su carisma y su sexto sentido era la impaciencia – y Gabriel solía sacar esta parte de ella

-Que? ¡NO! ...bueno capaz, quizás sí, pero igual no sé - Gabriel parecía un niño perdido, de pronto el mundo le parecía una inmensidad

-Gabi - dijo la enfermera tomando su brazo, cual es el problema? Te gusta otra persona, da la casualidad que es un hombre

-Ya se, es que, ahora no sé qué hacer, apenas lo conozco y tampoco sé si es gay o bisexual, nada...

Loli por dentro gritaba de la emoción, sabia de quien hablaba, así que puso en marcha su plan...

-Bueno mirá, lo primero que Tenes que hacer es estar tranquilo, aceptar lo que te pasa, olvidarte de lo que piensen los demás, fijarte en que sentís vos, que te produce cuando lo ves...

-Si es por los demás, no me interesa, yo estoy bien, nunca tuve prejuicios por nada, eso lo sabes, y cuando lo veo me produce de todo ... literalmente de todo...

-bueno entonces ahora Tenes que crear oportunidades para que puedan encontrarse y como no sé nada del chico, eso lo tendrás que pensar vos – a no ser que me quieras contar quien es – Gabriel negó con la cabeza – ok, entonces ponete creativo y activá corazón ... ahora vamos arriba a la charla/coctel ...

-No, yo no voy, sabes que no me gusta.

-pero dale! mira que la comida va a estar excelente, hoy cocina el bomboncito de Renato quattordio , que tiene una mano ! Para la cocina digo... dijo Loli saliendo del consultorio mientras escuchaba los pasos de Gabriel atrás suyo ... su plan funcionó

Llegaron al salón, estaba lleno de gente, Gabriel buscaba con la mirada a Renato, pero no lo encontraba, pasó alrededor de una hora y seguía sin verlo, charló con algunas personas que conocía del hospital, pero no despego ni un segundo la mirada de donde se encontraba desplegado el buffet. 

Anatomia de un chefDonde viven las historias. Descúbrelo ahora