Elizabeth
Anoto sobre el procedimiento y avance de los chicos. Y déjenme decirles que para ser ya una semana, van en un buen avance.
-¿Van bien cierto?-me pregunta el entrenador y asiento.
-van muy bien-sonrío. Recuerdo los consejos que me dijo mi hermano el día de ayer cuando estábamos hablando en el café.
-¿Crees que les irá bien en el partido?-miro al equipo y frunzo el ceño.
-supongo que sí-me pienso un poco y digo.-aunque, Alexander quizás necesite motivación.-el entrenador me mira sorprendido.
-pero él es el capitán-afirma.-siempre tiene una buena motivación-asiento.
-habría que lograr que él sea un BUEN capitán, que piense en el equipo y no solamente en sí mismo.
-quizás...-lo interrumpo.
-tú sabes perfectamente que es así Richard, él siempre termina de hacer los pases solo, hace los goles. Hace todo en realidad.
-¿Qué propones hacer entonces?-frunzo los labios un segundo pensando en algo y sonrío.
-tengo una idea-toco el silbato y hago que el equipo venga hacia mi, y de reojo noto como Alexander se saca la remera y la tira al pasto.
Deja ver sus abdominales, muy bien marcados, al igual que su pecho firme y lleno de sudor. Mierda.
-uhm... chicos-me concentro.-sé que hoy es un día muy caluroso, pero será algo sencillo el día de hoy-declaro.-deberán hacerse pases en una fila, junto a un atacante e intentar hacer un gol.
-¿Quién será el atacante?-pregunta uno.
-el número 9 obvio-dice Alexander seguro pero yo niego.
-en realidad...-sonrío.-serás tu Alexander-este me fulmina con la mirada.
-tiene que ser una broma de muy mal gusto-dice con acento italiano característico.
-no, no lo es-lo miro.-así que al arco, a ser atacante-se acerca a mi y se planta en frente mío, desafiandome.
-¿Y si no lo quiero ser?-pregunta cruzandose de brazos.
-no jugaras el resto de la temporada.
-Elizabeth eso no...-interrumpo a Richard.
-yo decido quién juega y quién no, por ende es tu decisión Williams -sonrío superior.
-me las pagarás-se da media vuelta y va al arco hacer lo que le pedí.
-empiecen-todos comienzan hacer sus jugadas, y Alexander hace todo lo que puede para que la pelota no pase. Pero al parecer, únicamente sirve como goleador.
Al terminar el entrenamiento, los chicos se van a los vestidores, pero yo miro un rato la planilla de jugadas y pienso en otras nuevas para anotarlas.
Me muerdo el labio pensando en como realizarlas y a quienes poner en la cancha y a quienes no.
-ejem...—levanto la vista encontrándome con Williams.-¿Feliz?
-¿Qué si estoy feliz porque sacaron a mi bailarín favorito del programa de la televisión?-suspiro dramáticamente.-pues no. No lo estoy.
-deberías serlo ya que no volveré a hacer eso en mi vida.-río.
-ay Williams .-me mira.-¿De verdad esperas que yo siga tus ordenes cuando yo soy la entrenadora? Soña.
-no, no...—se acerca a mi y me toma de la cintura. Veo a mi alrededor y básicamente estamos solos en la cancha.-tú sueña con que volveré a hacer esa estupidez cara. Yo seré el jugador que soy de forma innata.
-ahora escúchame Williams .-sacó sus brazos de mi cintura y frunce el ceño.-no soy otra de tus "zorras". Yo soy una persona normal que quiere ayudar a tu equipo. Espero que colabores. Porque seré capaz de hasta sacarte por el resto de tu carrera si es necesario.
-no te entiendo.-justifica.-me dijiste que no te iban los jugadores de fútbol ni el fútbol siquiera.-me señala.-y aquí estás haciéndote la entrenadora estrella.
-es verdad.
-¿Qué?
-Qué es verdad.-digo sonriendo.-odio el fútbol. Desde que tengo memoria, pero necesito que ustedes me demuestren que vale la pena jugarlo.-me acerco y toco su pecho con mi dedo índice.-Qué vale la pena verlos jugar.-lo miro fijamente.-Qué vale la pena entrenarlos.-me alejo de golpe.-demuéstrame eso y vas a tener mi respeto el resto de mi vida.
Me doy media vuelta, y me voy. Lejos de su mirada hipnotizante.
••••
Entro a mi casa para dejar mi llaves encima de la mesa. Pero, para cuando me doy cuenta, ya es demasiado tarde.
Escucho un par de voces en lo que sería la cocina.
-no puedo creerlo.-es... oh no.
Entro y veo a mi mamá junto a mi hermano charlando muy pacíficamente en MI cocina.
-¡Beth!-dice mi hermano sonriente, mientras mamá se gira a verme con la sonrisa más falsa que he visto en toda mis vida.
-hija que gusto verte.
-¿Qué hacen en mi casa?-digo furiosa.
-vinimos a verte.-se acerca.-te extrañé cariño.
-¿Te extrañé? ¿Cariño?-digo exaltada y ella gira los ojos.
-no es para tanto Elizabeth.
-claaro. Porque vos siempre fuiste acompañada por tu familia cuando la necesitabas.-me cruzo de brazos.-no como en mi caso.
-debes dejar de ser tan dramática hija.-toma agua.-yo lo único que quiero es tu bien.-sonríe.-no que le saques fotos a personas semidesnudas y que te paguen un salario mínimo, eso no es digno de una Anderson.
-ay no.-río sarcástica.-soy la mediocre de la familia.-enarcó una ceja.-esas frases ya no sirven conmigo madre.
-no te entiendo. De verdad que no hija.-se sienta en una butaca.-siempre quisiste ser la mejor, tu hermano igual. Y míralo.-lo mira con amor, una mirada que nunca tuve desde que empecé a ser fotógrafa.-famoso, apuesto y en pareja. ¿Dónde está tu pareja Elizabeth?-dice enarcando una ceja.
-madre ya basta...-intenta pararla pero no logra un pepino.-es momento de que la familia se vuelva a unir otra vez.
-¿Queres saber donde está mi pareja?-digo furiosa y el enojo me domina en la respuesta que le doy. Ya que bueno, esa respuesta es la que me trajo todos los problemas que seguirían.
-decime.-dice acercándose a mi.
-entrenando.-me mira sin entender.
-¿Entrenando?-dice curiosa.-¿Entrenando que cosa?
-él... él...-la miro fijamente y segura contesto.-él juega fútbol.-abre los ojos como platos al igual que Logan.
-¡¿Qué?!-dicen los dos sorprendidos.
-si, como escucharon. Mi novio juega fútbol, es el mejor de la liga española a decir verdad.
-¿Quién es entonces?-dice mamá.
-ya vas a ver. Mañana anda al entrenamiento y verás quien es.-ella sonríe y asiente.
-bueno eso voy a hacer.-agarra su bolso y se va hacia la puerta.-ah y Elizabeth.-la miro.-más te vale que no sea mentira, ya que bueno tu padre se sentirá muy decepcionado.-y se va, junto a Logan.
Un momento. ¡¿Qué mierda hice?!
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La Jugada Perfecta (#2 Saga Real)
Teen FictionSegundo libro de la saga "Real" Elizabeth Anderson. -23 años. -mujer de carácter fuerte. -hermana del gran jugador Logan Anderson. -fotógrafa y odia a muerte el "Fútbol". Alexander Williams. -26 años. -hombre guapo, y atractivo. -mujeriego y nunca...