Un grito del alma

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  • Dedicado a Katia Ponce
                                    

Corrí hacia el mar, llena de lágrimas no podía seguir fingiendo que no la extrañaba, me acerque y comencé a entrar en la profundidad del mar, yo era excelente nadadora sin embargo lo único que quería era escapar nadar hasta una isla en la que estuviera mi hermana, en la que nunca me abandonara

-Danielle vuelve!!- Comenzaban a gritar yo nade hasta un risco de piedras, comencé a treparlo y cuando me encontraba en la sima grite, grite y saque toda la tristeza que escondía en mi corazón debía de desahogarme y sabia que Daisy en algún lugar del infinito cielo me escuchaba entre la oscuridad de la noche entre la profundidad del mar, ella estaba a mi lado y por siempre la iba a amar, quizás ya no la tuviera físicamente pero era mi hermana y siempre viviría en mi corazón...

-Daisy!! - Comencé a gritar sin importarme que mis amigos me vieran y escuchasen solo quería desahogarme - Hermana te amo, eres mi ejemplo a seguir, ¿Por que tenias que irte? ¿Por que me abandonaste? Gustabo te amaba, mama y papa te amaban, yo te amaba todos te amábamos, merecías ser feliz, te necesito Daisy te extraño, por tres años eh estado fingiendo que supere el dolor pero hermana el dolor jamas se ira siempre queda una cicatriz imposible de borrar, imposible de olvidar, gracias a ti comenze a creer en los cuentos de hadas me di cuenta que el verdadero amor existe pero también que siempre tiene un final, Daisy si en algún lugar del universo me escuchas recuerda que te quiero y jamas me abandones, nunca más. Siempre estas en mi corazón jamas te iras pero necesito a mi hermana te necesito- Dicho esto comenze a llorar pero con algo de fuerza de voluntad grite hacia la inmensidad del mar - Adiós, para siempre Hermana 

Baje de las montañas y me encontré a los chicos quienes me veían preocupados Santi comenzó a llorar y me abrazo, yo me sentía mal de que me aigan visto tan desesperada, tan fuera de mi pero necesitaba gritar necesitaba llorar, necesitaba a Daisy, pasaron 3 años en los que finji que no me dolia pero esta noche algo en esa playa me hizo volver a aquel día el día en que la perdí.

- Perdonen chicos - Comenze a hablar un poco mas tranquila cuando volvíamos a sentarnos al lado de la fogata y Mike me abrazaba - Es solo que necesitaba liberarme dejar salir todo el dolor

- No te preocupes Dani te entiendo cuando yo tenia 8 mi hermano murió - Comenzo a hablar Santi - la historia es muy diferente por que el era menor que yo tenia 6 años y jugaba con un carrito, papa estaba con migo volando un papalote, mama cuidaba a Penelope mi hermana recién nacida, nadie cuidaba a Bruno el seguía con su carrito pero nunca vimos que se salio del camino y estaba en la carretera - Santi serró los ojos - Un estruendo de un camión, un llanto y una parte de mi muerta, yo quería a Bruno quizás no eramos tan cercanos como tu y tu hermana pero lo quería mi madre aun llora por las noches. mi padre se ahogo en el alcohol y Penelope ni siquiera lo conoció, yo me hice cargo de mi hermana desde los 8 soy 7 años mayor que ella pero eramos lo único que teníamos los unos a los otros pues nuestros padres a partir de ese momento nos olvidaron

- Santi de verdad lo lamento, se que es difícil hablar de esto

-Danielle tienes razón en esta vida llegamos a un limite para desahogarnos y no te juzgo por lo que hiciste en el risco, por que hasta a mi me dan ganas de subir y gritar

- Yo también quiero gritar, se que muchos piensan que soy una mimada que quería un perrito pues no, yo no perdí a mi hermana, yo no perdí a mi madre yo perdí a mi mejor amigo- Comenzó a decir Sam - Era un pastor alemán lo tenia desde los 5 años crecimos juntos, se llamaba Max, una tarde mi hermana de 8 años se salio enfurecida de la casa por que mi padre la regaño yo solo tenia 12 y una semana después conocí a Dani ella me salvo de ser una mierda, mi hermana cruzaba la calle sin fijarse, pasaba un camion y ella tenia una muerte segura sin embargo Max  la salvo, el se cruso y quedo aplastado - Sam comenzó a llorar - Dani se fue mi ángel pero llegaste tu y Santi y también Stephan y ahora Mike, los quiero chicos

Yo abrace a Sam 

- Tranquila amiga, te compraría muchos perrritos ahora ambas tenemos a Sandi y es una muestra de nuestra amistad, seremos amigas por siempre te quiero

- Y yo más Dani, ahora Stephan es tu turno 

El sonrió amargamente y hablo

- Ya que nada de lo que hablemos saldrá de aquí, se los contare, muchos piensan que soy egocéntrico y frió pero nadie sabe lo que sufrí - Sus ojos se llenaron de lagrimas - Yo no sonrio como los demas debo de ir al psicólogo una vez a la semana, las amigas de mi madre siempre iban a la casa pero una tarde Lorena una de sus amigas se quedo hasta tarde yo tenia 9 años y ella comenzo a tocarme, me violo y no fue la unica vez cada que iba me violaba y me amenazaba pero una vez mi padre llego y la descubrió fue difícil para toda mi familia y más para mi

Mi corazón se rompió como alguien a quien yo amaba tanto había sufrido demasiado, como alguien con su cara de angel tenia recuerdos de un duro pasado, que podia hacer yo por volver a verlo sonreír, para que supiera que siempre estaría allí

- Stephan de verdad que nadie puede juzgarte y es duro por le que pasaste pero aquí estaremos tus amigos para apoyarte siempre que lo necesites

El me abrazo, Stephan me abrazo me sorprendí pero le devolví el abrazo

- Chicos vamos a los riscos y gritemos 

-Si yo apoyo a Dani chicos servirá para sacar el dolor- Dijo Mike 

-Vamos- Dijeron y comenzamos a subir

En la sima del risco gritamos, gritamos con toda el alma dejando salir lágrimas, despidiéndonos, diciendo adiós al dolor, esa noche fue la noche de lágrimas fue la noche de comprensión fue la noche que más nos unió como amigos como confidentes como hermanos... Muchas veces en la vida necesitamos un momento para poder gritar llorar, dejar de guardar el rencor y el odio en nuestro corazón un momento para liberarnos para ser felices para comenzar de nuevo y abrir nuestro corazón.

Una estúpida ilusiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora