Dangerous love» jariana

Capítulo 48

"Tengo una buena razón para quererte lejos de ella"

—Buenas noches papá.—me despido antes de subir las escaleras.

Entro en mi habitación y cierro la puerta, todo está en completa oscuridad pero cuando volteo, me paralizo al observar una silueta de pie junto a la ventana.
¿Será ese hombre, John? ¿Está aquí para hacerme daño? son mis primeros pensamientos, unos realmente malos.
Estoy apunto de gritar cuando la silueta se acerca a la luz, descubriendo el rostro de Justin.

—Shhh, soy yo.—susurra con un dedo en sus labios.

—¡Joder Justin! ¿Cómo te atreves a entrar de esa forma? —susurro eufórica.

—Lo siento.—dice simplemente.

—¿Qué haces aquí?

—Salí a fumar un cigarrillo y termine aquí.

Se que algo anda mal por su expresión.
Me acerco a él y aprovecho la luz de la luna que se cuela por la ventana para observarlo con atención, poco después me percato de las heridas en su rostro.

—¿Qué te pasó? —pregunto acariciando su mejilla con suavidad.

El cierra los ojos ante mi toque y después de un rato los vuelve abrir.

—Nada importante, solo una pelea.

—Justin...—musito, tomo su mano y lo conduzco al baño.— Te limpiare eso, vamos.

Le indico que se siente sobre el taburete del baño mientras yo saco las cosas del botiquín de primeros auxilios.

—¿Así que ahora eres mi enfermera? —pregunta con sorna mientras observa cada uno de mis movimientos con atención.— Tal vez debería meterme en más peleas con tal de que lo seas.

Le doy una mirada de falsa molestia.

—No seas tan arrogante. Para la próxima te curas las heridas tú solo.

Su rostro se tiñe divertido y no abandona el tono burlón.

—Pero te tengo a ti.

—Nada de eso tú te los buscaste por andar de buscapleitos.— tomo la gasa y el alcohol para desinfectar la herida.— Cuidado esto puede escocer.

Justin hace una mueca.

—Yo se que te parece totalmente caliente limpiar las heridas de tu novio.— me provoca una vez más.— Ouch.—se queja.

—No seas cobarde.—lo regaño.

Limpio la sangre que aún está fresca sobre su labio inferior partido para después seguir con su mejilla.
Justin se queja una vez y aprovechando que queda más bajo que yo, me rodea con sus brazos y apoya su cabeza en mis pechos, impidiendo que continúe.

—Suéltame. Aún no termino.—me río a la vez que me estruja más fuerte.

Niega con la cabeza como niño pequeño.

—Duele mucho.—es su única respuesta.

—¿Como soportas una extracción de bala pero no una simple curación?—enarco una ceja, divertida.

—Simple. Tú estabas ahí.

Lanzó una sonora carcajada.

—Que cursi eres.—respondo sin poder contenerme.

—Acabas de matar el momento. Eres la peor.

Su rostro permanece serio mientras se hace el indignado pero a los segundos explota en carcajadas.