Cap. 15 - La Coincidencia.

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Capítulo 15 – La Coincidencia.

¿Alguna vez te has detenido a preguntarte si realmente, sos quien queres ser? ¿Estas donde deberías estar? Y ¿Qué estas dispuesto a hacer para cambiar eso?

A lo largo del final del año, mientras trabajaba, estudiaba, y pasaba con la cabeza en las nubes, tuve un par de colapsos donde me hacia estas preguntas a mí mismo. Cosas que no podía compartir con mis amigos, mis grupos de WhatsApp en los que llevaba años o mis padres.

Gracias a Jafet, siempre pensé que, si iba a querer a alguien, lo primero que tenia que hacer era quererme a mi mismo. Por eso cambiaba y cambiaba hasta que me complaciera ser quien quería ser, para poder quererme. Me costó, era un gusto adquirido, debo admitirlo.

Pero después empecé a reflexionar sobre lo difícil que se me era estar viajando una hora, todos los días. Si viajaba en la mañana, hacia una calor inmensa y si solo traía una camisa, mi espalda acababa empapada. Y si viajaba de noche, el bus iba tan lleno que tenia que ir parado una buena parte del trayecto. Así que colapsé, y empecé a buscar maneras para solucionarlo. Me volví loco por quererme mudar, y tenía todas las razones del mundo. Pero aparte de conseguir muchos electrodomésticos, Allison era la razón que lanzaba la balanza hacia el otro lado. Porque ella estaba aquí, en el puerto, en el pueblo, lejos de la gran ciudad y de sus depredadores.

Entonces me puse a pensar, que, en realidad, no es como si acabara de empezar a viajar. Llevo dos años de estar viajando, y un año de estar trabajando mientras estudio. Así que me trague mi saliva y seque mis lágrimas, y empecé a vivir con el hecho de que así son las cosas, sin ese pequeño sacrificio no iba a poder hacer nada. Y que no hay hogar como el hogar.

Pero eso fue leve, extremadamente leve comparado a lo que venía. Ni siquiera recuerdo como empezó, cual fue la gota que derramo el vaso, ni que fue lo que me hizo empezar a pensar así. Un día simplemente me puse demasiado triste, y ese sentimiento de tristeza me inundo, y mi cabeza solo pensaba ojalá hablara con Allison como lo hacia antes, para que ella me hiciera sentir mejor. Pero luego pensé Estas muriéndote, y de seguro Allison está sonriendo, pensando en todo, menos en vos. Y fue cuando comprendí, que no podía esperar que Allison me hiciera feliz, tenia que ser feliz si quería estar con Allison.

¿Realmente que es la felicidad? Si lo que la vida nos depara, es nacer, estudiar, trabajar y morir. Podría hacer como el resto del mundo, fijando su objetivo en la vida en un título, pero una vez que tenes ese titulo lo único que queda es trabajar y trabajar hasta que eventualmente tu corazón se detiene y todo lo que hiciste o no hiciste, al final, termino sin importar para nada.

Así que, si mi tiempo en esta vida es corto, y cuando muera, todo lo que he dicho o hecho, habrá valido, entonces, ¿Por qué no hacer lo que quiero? Si realmente quiero hacer ruido con una batería, entonces voy a conseguirla. Si quiero que me joda la vida un gato, pues voy a conseguirlo. Si quiero mi título universitario, voy a conseguirlo. Si quiero ahorrar para una casa y un carro, voy a conseguirlos. Si quiero hacerme ese tatuaje que tanto quiero, voy a conseguirlo. Si quiero que Allison y yo estemos juntos, voy a conseguirlo. Si quiero ser feliz, voy a conseguirlo.

Porque al final, si fallo, o si lo logro, seguro habrá valido la pena intentarlo. Y prefiero arrepentirme de todas esas cosas que hice, que de las que no tuve el valor de hacer. Porque mi nueva creencia, es que en eso se basa la vida. Nacer, estudiar, trabajar y morir, pero ser feliz en el proceso. Porque nadie más moverá un dedo por mí, solo yo.

Pero tampoco voy a dejar la tristeza. Porque soy French Fries, el sad del grupo. El que hace comentarios sarcásticos y dice cosas tristes para hacer reír a las personas. Porque la tristeza es la que me ha acompañado en el largo camino, y siempre será parte de mí. El balance perfecto que debe haber entre blanco y negro. Era lo que nunca comprendí, y ahora sé.

Que, para conseguir el color gris, no puedo excederme con el blanco, tengo que agregar un poco de negro. Tanto felicidad como tristeza. Porque esta bien que los hombres lloren, así como está bien que alguien quiera ser feliz. No a base de cosas materiales como mi papa piensa que creo. Sino a base de momentos, de personas, y de mi mismo. Soy feliz por quien soy y por lo que hago con mi vida.

Después de tanta basura motivacional voy a necesitar una coca.

La cita con Allison es dentro de unos cuantos días. Honestamente, no creo poder llevarla en carro como tanto quería. Pero no me molesta, porque, realmente hice todo a mi alcance para conseguir llevarla yo mismo. Pelee con mi padre y mi hermano porque no querían enseñarme, y luche por conseguir la licencia de conducir a tiempo, cambie de maestro con una de mis tías, pero manejar desde donde vivo hasta la gran ciudad es peligroso y ocupo más tiempo.

Pero después de todo ir en los buses hace que todo tenga mas sentido, mas nostálgico y claro, más dramático.

El capitulo se llama La Coincidencia y el libro también, creo que, a este punto, ya es tiempo de que confiese porque decidí llamarlo así.

Es algo obvio, pero en verdad, es por el primer viaje que tuve con Allison. Cuando le dije que parecía obra del destino y ella dijo No creo en el destino, fue solo una coincidencia. Lo bueno de las coincidencias, es que nadie las planea, ni siquiera el maldito destino. Simplemente suceden, y no hay nada que hacer para evitarlas. La coincidencia es una cadena de suceso que llevaron a un evento mayor sin ninguna voluntad, y el hecho de que nos volviéramos a ver después de tanto tiempo era eso. Quizás ella tenía razón, fue una coincidencia, la mejor coincidencia de mi vida.

Y no tengo la más mínima idea de como terminar este libro, no es como que vaya a estar escribiendo mientras estoy frente a ella en la cita. El libro trata de mi vida, de mi punto de vista. Y mientras yo siga respirando, el libro podría seguir escribiéndose. Pero el libro, es mi punto de vista, en la historia de Allison. Y esta cita, su cumpleaños, la película, el libro, es el mejor final que podría darle. No porque la historia con Allison termina aquí, sino porque aquí es donde empieza lo interesante. Y no quiero escribirlo, quiero vivirlo.

Y me he puesto a pensar ¿Qué quiero conseguir dándole este libro a Allison? ¿Espero que se enamore de mí solo por leerlo? ¿o solo es el ataque de sinceridad mas grande de mi vida?

—Y la verdad es que no, solo espero que ella pueda entender, todo lo que ha pasado por mi cabeza todo este tiempo. Que sepa todo lo que pasaba en mi vida mientras ella no estaba. Que llegaron muchas personas, que pudieron haberse quedado, pero siempre había algo que hacia que se fueran, y ese algo era ella. Porque no podía desprenderme de esa sensación, y no es que sea algo malo. La verdad me emociona bastante, porque nunca me había empeñado tanto a conseguir algo en toda mi vida. Y que sepa que es por a ella que estoy aquí. Que soy quien soy ahora. Y este libro solo es un Gracias de mi parte.

..

El día de la cita llego, y cuando estaba intentado que Allison me confirmara si de verdad íbamos a ir, ella solo dijo No tengo excusa, pero no se va a poder lo de mañana.

Así que entré en un colapso mental donde realmente pensé que a ella no le importaba mi libro, y mucho menos yo. El día paso, y ni siquiera nos vimos, tenía todo listo, había pedido mi día libre del trabajo y había comprado la memoria para dárselo. Y todo ese esfuerzo, se fue por el caño en un mensaje.

Mas noche le dije que si ella no lo leía, nadie más lo haría y que cuando quisiera leerlo, si es que quería, que solo me avisara.

—Si quiero leer tu libro, no me malinterpretes. — me mandó.

Siglos después de que lo malinterpretara todo. Conocía muy bien a Allison y sabia cuando ella quería sus momentos a solas, pero no quería que fuera justo ese día. Un mes después de ese día era cuando todo mundo debía leerlo, y ella, quien mas me importaba, era quien menos quería hacerlo.

El tiempo paso.

Allison cumplió años, y mi regalo seguía en mis manos. Mientras tanto, estaba haciendo planes con Gabriela de mudarme con ella a la gran ciudad. Creo que ese era una de las primeras señales de que estaba decepcionado, y que la única cosa que me retenía en el puerto, ya no podía sentirla.

Sentía que ya no podía estar con Allison, y que, aunque yo quisiera verla, ella simplemente no quería, y realmente quería que esa sensación desapareciera. Igual que yo.

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