Cap. 3 - El Primero de Muchos.

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Capítulo 3 – El Primero de Muchos.

Un día tenía examen de español, así que, como el examen se dividía en dos días la mitad de la clase no hacia examen uno de los días. El día que no me toco, era mi oportunidad de viajar a las 12, así que le pedí a mi prima que me apartara asiento. Cuando llegue al bus, Allison estaba ahí también. Le había comentado previamente a mi hermano sobre todo esto, él le dijo a Genesis, y ella era mi ayudante secreta. Así que cuando toco elegir los asientos, Genesis nos dijo Alla están los de ustedes. Allison se fue a sentar, y yo a la par de ella. Fue nuestro primer viaje juntos. Bastante raro, pero ella empezó la conversación para salir de la incomodidad.

—Y entonces, ¿Qué clases llevas? — empezó preguntando por mi horario, cosa que, es el mejor tema para una larga charla en la universidad, y casi podía sentir como ella odiaba a Genesis por hacerla sentarse conmigo. —

—Pues llevo español, historia, y ambas matemáticas, usualmente salgo a la 1 pero hoy tenía libre así que pude estar aquí. — luego de un poco de charla general sobre la universidad decidí seguir adelante — No me recordas, ¿o sí?

—Sos el primo de Genesis, pero no te recuerdo

—Fuimos compañeros en la escuela, en Diynos. ¿Segundo grado, no recordas nada?

—¡No, imposible, no fuimos compañeros! — me dolía pensar que ella no se acordaba para nada, pero como siempre es mi culpa por tener más memoria en cosas irrelevantes que los demás. — Genesis! — le grito a mi prima que estaba a dos asientos enfrente a la izquierda de donde estábamos — ¡¿Verdad que Daniel no era compañero nuestro!?

— Si, si lo era — grito Genesis.

—¡Ha! ¿Viste? — le dije.

—No puede ser, yo no te recuerdo. — le conté la historia de las mandarinas a Allison, claro que no me creyó y simplemente me ignoro.

—No te parece raro, que después de tanto tiempo nos volvamos a encontrar, es casi como si fuera obra del dest-.

—YO NO CREO EN EL DESTINO — argumento ella, sin siquiera dejarme terminar mi oración. Desde ese entonces no olvido esa frase, el día que yo también deje de creer en el destino. —

Tuvimos platicas estándar, como el tipo de música que escuchábamos. Ella me pidió ver mis playlists, y apenas tenía canciones descargadas, metafóricamente venia naciendo en el mundo de la música así que tenía puro Linkin Park, y creo que eso la decepciono. Sin embargo, ella no quiso mostrarme sus canciones, eso me lo tenia que ganar. — La lista de reproducción dice mucho de una persona. — clásica Allison.

Luego del momento incomodo seguí la conversación hasta llegar al punto incomodo del tema sobre nosotros en la escuela y dejé ir la bomba.

—Seh, en ese entonces me gustabas. Bueno, no es que no siga siendo así. — ella se quedó callada, y quien para culparla. ¿Qué se supone que digas en momentos así? ¿Gracias? No. Solo empeoraba las cosas para mí mismo con mi estupidez, pero mi objetivo era dejárselo claro.

Volví a decírselo más adelante antes de que el viaje terminara. No pasaron tantas cosas interesantes ese día. Había un accidente ese día y ella quería verlo tanto que casi se me tira encima. Y hablamos un poco de nosotros. Pero generalmente, silencio. Cuando volví a decírselo, volví las cosas muy raras.

—Bueno, solo quería dejarte claro que me gustas, eso es todo.

—Okay.

—Entonces, ya me bajo aquí, nos veremos en otro viaje supongo.

—Si, cuando volvas a tener examen. — nos reímos —

—Bueno — extendí mi mano para un apretón, y cuando ella tomo mi muñeca — ehm, ¿te molesta si me despido con un beso en la mejilla?.

—hmmm, no. — después de eso, pude darle un beso en un lado de la cara, fue simplemente felicidad total, lo que quería estaba sucediendo y todo marchaba tal como planeaba. Después de despedirme, me bajé del bus y salí corriendo a contarle a mi hermano, quien era como mi gurú del amor, porque yo, no sabía nada. Ese día fue un logro, me inspiro a hacer más. Y eso, no era nada bueno.

Después de lo que paso en el bus, llegamos a vernos un par de veces, que yo recuerde. Cuando estaba en unas gradas tratando de ganar un gimnasio en Pokémon go, ella apareció con Emilia, y decidió saludarme.

—Que haces aquí? ¿No vas a 111? — se miraba preocupada por mis estudios. Claro. —

—Todavía tengo 15 min para entrar

—Wow, que rebelde — y con la misma intención, nos despedimos.

Luego cuando estaba en el día del estreno de Doctor Strange, mi super héroe de Marvel favorito, por este día en singular, estaba parado en el parqueo de los buses, y pude ver en mi periferia algo acercarse, cuando volteé, era ella

—¡Ay, yo quería asustarte! — estropee su plan supongo. Se dirigió al bus, y supuse que se había ido, pero volvió. —

—¿Que haces aquí parado en estas esquinas?

—Esperando que alguien se acerque para secuestrarlo. — Dios, no sé si eso fue lo que dije, pero es lo que recuerdo y estamos siendo sinceros aquí —

—Okaaaayyy — dijo. Mientras se alejaba lentamente. Solo podía pensar vaya manera de arruinarlo, genio y la llame para que volviera —

—Son bromas, ¿vos que haces aquí? — le dije antes que se fuera.

—Trayendo mi cuaderno, ya que no me voy a ir en el bus

—¿No te vas a ir en el bus, como te vas a ir?

—A la una de la tarde, con Genesis

—¿Con Genesis? Pero ella no se va en bus

—si, por eso, con Genesis — me tomo más tiempo entender el hecho de que mi tío las llevaría del que quiero admitir. — ¿Y vos adónde vas?

—Al cine, con mi hermano.

—¿Que vas a ver? — se veía más interesada que yo en el tema. —

—Doctor Strange. — cuando escucho eso, abrazo su cuaderno y dio una media vuelta, se veía tan linda que casi estaba babeando — ¿Ya la viste?

—No, pero la quiero ir a ver, bueno, ¡Adiós! — se veía con prisa, o tal vez creyó que yo iría a querer invitarla. En fin, después de todo lo que le dije sobre que me gustaba, ella me seguía hablando, y proactivamente, tal vez había oportunidad de algo, como siempre solo me ilusionaba a mí mismo sobre analizando cosas que no debería, esa es mi autodestrucción.

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