"𝑩𝒆𝒔𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒓𝒐𝒃𝒂𝒏 𝒆𝒍 𝒂𝒍𝒎𝒂" #1 ||Christopher Vélez|| TERMINADA

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Estoy de pie frente a mi casillero acomodando mis libros de la escuela cuando de la nada una de mis compañeras se me acerca. No me doy cuenta hasta que tengo esa sensación extraña cuando alguien está detrás tuyo.

—Hola Ina— me dice con ese tono de voz que me saca de quicio —mira, antes que nada sé odias el reggaeton y esos ritmos urbanos que ahorita todo el mundo escucha...— todo el mundo. Claro, me molesta demasiado las letras demasiado misóginas y molestas —...y la verdad es que antes de que me digas que no— en realidad la estaba ignorando. Tenía cosas más interesantes que hacer como acomodar mis libros por tamaño, tal vez materias e incluso por clases. Lo que sea con tal de dejar de hablarle —quería pedirte un favor— suelo ser una persona bastante amable con las personas. Pero ella tiene esa vibra molesta que nadie soporta. Es simplemente muy... insoportable —Verás, mañana es la noche mágica del festival del globo y va a estar mi banda favorita...— no por favor. Aquí va, ya sé a qué banda quería ver.
—Tengo dos boletos VIP para ver a CNCO y no quiero ir sola, mi mamá me va a acompañar pero siendo sincera prefiero ir contigo— ¿Conmigo por qué? Solo le hablo porque se sienta enfrente de mí en el aula. Nada extraordinario.

—Si, este..., mira Fer...— tengo que ser amable, pero no quiero. Ella es de esas personas que insisten infinidad de veces y no reciben un no por respuesta —...no estoy de humor para acompañarte a un concierto de una banda que no conozco. Su música ni siquiera me gustan no quiero que gastes un boleto en mí. Busca a alguna niña como tú. Puede que ellas te lo compren— dicho esto volteo de nuevo a poner orden en mi casillero. ¿De dónde salen tantos libros?

—Ina... te lo ruego— vuelvo a oír su voz. Está chica me está colmando la paciencia—.

—Mira Fer. Te voy a ser sincera— volteé a verla para que comprendiera la situación. No, no quería ir a ese concierto pero tampoco podía por mi extraordinario. Así que lo utilizaré como excusa para evitarlo —Reprobé mi parcial de filosofía y me darán oportunidad de presentarlo otra vez así que tengo que estudiar este fin de semana— espero y con esto me deje en paz. Terminé de acomodar mis libros y cerré mi casillero. Ella continuó hablando mientras tomaba mi mochila para ir al salón y me empezó a seguir. En verdad que nunca se rendía. Le demostré que no tenía mínimo interés en escucharla pero nada lograba separarla de mí.

—Tu examen es el cinco de diciembre. Tienes mucho tiempo para estudiar, hoy es quince de noviembre y el concierto es mañana. Cabe recalcar que el lunes no tenemos clases— dijo mientras me seguía hasta mi lugar —Ándale ¿si?— yo seguía ignorandome mientras pretendía sacar mis libros del casillero y estaba apunto de estallar. Soy una persona de poca paciencia y ella ya estaba terminándose la mía. La única solución es aceptar y de último momento cancelarle.

—Si digo que si, ¿me dejarás de molestar?—.

-Si dices que sí, te dejaré de molestar y mejor aún, te daré la mejor noche mágica en el festival que puedas imaginarte— por un momento me sentí bien por hacerla feliz cinco minutos, pero solo por eso  no quiero ir —Por el boleto no te preocupes, son mi regalo de cumpleaños y yo te invito— si yo tuviera ese regalo de cumpleaños, lo vendería en vez de regalarlos y hecho esto, con el dinero me compraba unos libros o algo más útil.

Cuando Fernanda por fin se fue, yo me dispuse a sacar los libros de mi mochila y ponerme a estudiar. Era bastante pesado pero es mi consecuencia. En verdad a tenía que pasar ese parcial porque de no ser así, me corrían de la escuela y por más que lo deseara, sé que me dolería dejar a mis amigas y mis padres se sentirían decepcionados de mí.

Las clases continuaron y llegó la hora del receso. Me senté con mis amigas a comer como normalmente lo hacemos. Es el único miembro de mi vida en el que me siento tranquila y feliz. Normalmente hablábamos de muchas cosas y era bueno conversar.