"𝑩𝒆𝒔𝒐𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒓𝒐𝒃𝒂𝒏 𝒆𝒍 𝒂𝒍𝒎𝒂" #1 ||Christopher Vélez|| TERMINADA

40 || PARTE 1 ||

Ayer en el concierto la pasamos bien. Fue un concierto muy dinámico con las fans. Las chicas y yo estábamos en primera fila junto a otras fans. La verdad es que había sido muy divertido, hice unas buenas "amigas", si se puede decir así. Debo de admitir que me puse un poco celosa de las chicas que le lanzaban besos a mi chico y aún más de las que se les insinuaban, pero si me pongo en sus zapatos, en realidad yo haría lo mismo con Zayn Malik, así que lo dejé pasar.

Aunque era novia de uno de los chicos de CNCO, en mi vida había escuchado sus discos enteros, solo algunas canciones que Christopher había puesto en el disco que me obsequio. Eran verdaderamente joyitas que quería tener en mi mente por siempre. Ayer logré escuchar el disco entero. Venían canciones variadas de mis bandas favoritas.

Saliendo del concierto nos dirigimos al hotel donde estaban hospedándose, la verdad es que fue un ambiente demasiado incomodo ya que Karina estaba tratando de evitar a Zabdiel en todo momento al igual que él a ella. Habíamos hecho una pequeña fiesta para "festejar" de alguna manera mi cumpleaños adelantado. Los chicos viajarían mañana en la tarde para continuar con su tour, así que no podríamos hacer una fiesta con ellos el día exacto de mi cumpleaños. Dean y Charly no habían podido venir por cuestiones de trabajo, pero prometieron hacerlo antes de que el mes se acabara, aunque fuera por separado.

-¿Lista? -me dice mientras me coloco mi vestido negro sin mangas ni tirantes, era un poco escandaloso ya que me quedaba ajustado y se amoldaba a mi cuerpo, el largo estaba bien, me llegaba un poco más abajo de las rodillas.

-Súbeme el cierre -dije terminando de colocarme mis aretes. Él lucía verdaderamente sexy. Traía unos pantalones negros de vestir que le quedaban un poco ajustados junto a una camiseta de vestir negra. Se veía totalmente irresistible.

-Me encanta este vestido. ¿Nunca lo habías usado, cierto? -volteé a verlo y solté una risa picaresca.

-No. Lo estuve reservando para una ocasión especial -le tomé el rostro con mis manos y pegué sus labios a los míos- ya vayámonos. Se hará tarde y perderemos nuestra reservación.

Christopher había prometido llevarme a cenar hoy a un lugar aquí en Los Angeles. No estaba segura de dónde sería pero no importaba, siempre y cuando estuviera con él.

Llegamos a un lugar un poco muy elegante. Un señor de traje negro con camiseta blanca y moño negro nos recibió en la entrada y recogió las llaves del auto. Otra chica de vestido rojo y ajustado, le lucía a ella mejor su vestido que mí, pero soy lo bastante segura como para dudar de que Christopher esté disfrutando de la vista.

-¿A nombre de quién es la reservación? -dice la chica.

-Christopher Vélez -dice mirándome. Estoy muy segura que está haciendo un esfuerzo por no ver los pechos de la chica que sobresalen de su escote. Y noto esa acción y le doy un golpe en el hombro cuando ella empieza a caminar y nos indica donde está nuestra mesa.

Era un lugar bastante hermoso. La mesa era en la terraza. Era una vista realmente hermosa. Toda la ciudad lucía simplemente hermosa.

-Es igual que al letrero de Hollywood -dice apretándome la rodilla justo debajo de la mesa, lo cual hace que me sobresalte ante el roce de sus manos frías.

-Ni me lo recuerdes. Casi nos llevan a la cárcel por tú culpa. Aparte, eran mis pantis favoritas -dije haciendo puchero.

Él solo se rio. Durante toda la cena estuvimos hablando de nuestros planes en un futuro. Le conté sobre Miami. Me sorprendió mucho que me apoyara. Nunca pensé que le pareciera buena idea. Aunque tendría que apoyarme, de eso depende mi futuro y mi carrera. Empezamos a hablar sobre como sería nuestro día a día si ninguno de nosotros estuviera ahora mismo en estas posiciones.