Parte 13

373 45 4
                                    

El viento golpeaba mi rostro abruptamente, como si de un martillo se trátase

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El viento golpeaba mi rostro abruptamente, como si de un martillo se trátase. Desperté con mal humor hoy, no sé porque, a veces lo hago y ya. Pasando ambas manos por mi largo cabello, entro al campus de mi universidad. Pude haberme mudado aquí, sin embargo, no le hallé la necesidad teniendo en cuenta de que vivo a unas cuadras solamente. Además, mamá se quedaría sola en casa.

Odio mi gran puntualidad. Soy una chica solitaria y con una actitud... peculiar. No tengo paciencia. Pero soy buena en mis calificaciones. Debería llevarme bien con mis profesores, pero al único que soporto es al señor Shin, y lo hago sólo por el hecho de que se queda dormido a mitad de clase dejándonos una pantalla con imágenes haciendo ruído. Sí, viendo filmes estúpidos que no tienen nada que ver con la materia.

Cargando los pocos libros, me adentro al edificio. Reviso mi reloj de pulsera para ver la hora, estoy a tiempo para ir por algo a la cafetería. No desayuno en casa porque no me dá la gana. Amo cocinar, pero a estas horas de la mañana me importa una mierda todo.

Arrastro los pies cuál zombie, odio levantarme a esta hora. Odio muchas cosas, lo sé.
Estoy por pasar la puerta de la cafetería, pero dos pies frente a mí me hacen parar. Alzo la mirada sólo para percatarme de quien se trataba.

Por la mierda, ¿qué le pasa?

—Muévete —, grazné con frialdad.

No, élla ni siquiera retrocedió.

Aprieto mis puños en un intento por controlar mi rabia. Mi sangre hervía cuál agua para té, sentía una vena formarse en mi cuello y las ganas de tirarme sobre ella sólo para golpearle su lindo rostro.

—No lo repetiré de nuevo —, alcé aún más mi cabeza, esta vez manteniendo el contacto visual. —Muévete.

—Aléjate de él —, de pronto dijo. Se cruzó de brazos sin una pizca de querer moverse.

¿Él?

Jennie, no voy a repetirlo una vez más. Muévete de mi camino o me veré obligada a sacarte por las malas.

No me interesaba su estúpido juego, me estaba cabreando la mañana y haciendo que mi mal humor incremente. No necesito tener buenos modales o hablar con tacto si tiene esa actitud.

—Vaya, es la primera vez que me llamas por mi nombre —será la última vez. —Yo tampoco volveré a repetirte esto; aléjate de él.

—¿A quién mierda te refieres? —estaba hartandome de esto.

—Jungkook —, dijo obvia. —No te acerques más a él, no le convienes.

Un pip en mi sistema comenzó a alertarme de que mi paciencia se había esfumado, en su lugar, más ganas de golpearla se apoderaron de mí.

¿Pero quién mierda se cree esta para venir a ordenarme que no vea al niño?

Y para que vea que no me importaba su estúpida órden, la empujé bruscamente con la palma de mi mano hacia a un lado, para dejar el camino libre.

Save Me ~Jungkook || BTS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora