//Michell//
Me encontraba frente a una enorme y lujosa casa. La casa donde vivía el chico que había salvado mi vida hace dos años.
¿Como?
Pues hace 3 años fui diagnosticada con una enfermedad renal avanzada, de la cual mi única salvación era que alguien me donará un riñón
Mi madre desgraciadamente no podia donarme el suyo porque padecia de diabetes así que en ese tiempo mis esperanzas estaban muertas; no había ningún otro familiar que pudiera salvarme y en el hospital habían demasiadas personas esperando al igual que yo
Sentía que mi vida se apaga en cada minuto que pasaba, el hospital se había convertido en mi segundo hogar. No tenía vida social ni amorosa, toda mi vida era un caos pero aún así siempre había una persona que jamás me abandonaba. Mi madre
Un día ella llegó muy feliz dándome la mejor de las noticias. Había encontrado un voluntario que me daría su riñón aún sin conocernos
Se trataba de un chico de 18 años. Ese día ese chico me salvó la vida, hizo que mi mundo cobrará vida de nuevo. Y eso era algo que jamás olvidaría y que siempre se lo agradecería
La operación fue todo un éxito y mi cuerpo había recibido el riñón muy bien. Yo quise hablar con el chico pero resulta que él y su padre quien fue quien lo acompañó se fueron sin decir nada
Mamá investigo en el hospital y cuando me dieron de alta fuimos a buscarlos pero llegamos tarde, ellos se habían mudado hacia la ciudad
Y hoy después de 3 años al fin habíamos encontrado a los Jeon. Si, en el hospital nos dieron su dirección y el nombre del tutor del chico
En estos momento me encuentro con mi madre apuntó de tocar la puerta. Estaba nerviosa, después de tanto tiempo al fin conocería al chico que salvó mi vida.
—¿Puedo ayudarlas en algo?—Habló una señora mayor, vestía un uniforme celeste con un delantal blanco. Así que deduje de que era la empleada de la casa.
—¿Se encuentra el señor Jeon?—preguntó mamá. La mujer asintió y abrió la puerta para que entraramos.
—Tienen suerte de que hoy el señor Jeon este en casa. Normalmente pasa trabajando fuera—explicó la mujer muy amable por cierto.
—Parece que si tenemos suerte—afirmó mamá. La mujer le sonrió deteniendo nuestro paso.
—Pueden tomar asiento. Iré avisarle al señor.
—Gracias—dijimos al mismo tiempo.
La mujer se fue dejándonos en la inmensa sala a nosotras solas. Recorrí todo el lugar con mi mirada y todo era muy bonito.
La decoración era increíble y habían muchos adornos por doquier. Lo que me llamó la atención es que no habían muchas fotos familiares.
—Buenos días—escuchamos una voz masculina proveniente de donde se había ido la mujer. Mi madre y yo fijamos la vista en el hombre alto y pelinegro que nos observaba con sus manos metidas en las bolsas de su pantalón.
Vestía un pantalón negro y una camiseta del mismo color que abotonaba hasta su cuello. Parecía ser un hombre muy elegante.
—Buenos días—saludó mamá—¿Señor Jeon?—interrogó.
—Ese mismo—respondió en tono divertido —¿Puedo ayudarlas en algo?
—Hmm ¿no me recuerda?—mamá lo vio fijo esperando al menos una respuesta positiva pero fracasó. El señor Jeon negó con su cabeza apenado.
—No, perdón —se disculpó haciendo una pequeña reverencia.
—Tranquilo, no pasa nada. Soy Kim Dae
El señor Jeon se quedó unos minutos tratando de recordar hasta que sonrió ampliamente y tomó la mano de mi mamá agitandola frenéticamente.
—Ya lo recuerdo ¿y tú debes de ser Michell?—Preguntó acercándose a mi. Yo asenti e hice una reverencia —Me alegra que estés bien.
—Por eso es que estamos aquí —habló mamá—Mi hija quiere agradecerle a su hijo por la gran ayuda que le dio.
—Mi hijo—murmuro desviando su vista—Él no se encuentra en estos momentos pero ya que están aquí las invitó a cenar así hablamos mejor.
—Esta bien—dijimos ambas.
Estuvimos un rato en la sala hablando con él señor Jeon. Yo me moría de la curiosidad por saber como era Jungkook y no me iba quedar tranquila hasta averiguarlo.
—Disculpe—interrumpi las risas que se tenían él y mamá —¿Cómo es Jungkook?
—¿Hmm?—al parecer mi pregunta lo había sorprendido. Él se quedó en silencio un buen momento —Bueno Jungkook él es... Él es un chico un poco peculiar así que por favor les pido que le tengan un poco paciencia
—No se preocupe. Yo sólo quiero agradecerle por lo que hizo
—Yo te prometo que lo harás —me sonrió amablemente.
—Iré a la cocina por algo de tomar si no es mucha molestia —dije poniéndome de pie. El señor Jeon me dijo que podía ir y así lo hice.
Recordé a la señora encargada que nos atendió cuando entramos. Ella había dicho que el señor Jeon no pasaba mucho tiempo aquí así que por eso creo que no supo como responder a mi pregunta.
—Disculpe—dije llamando la atención de la señora quien se encontraba lavando unas verduras —¿Puedo hablar con usted?
—Claro. ¿En qué puedo ayudarla?—dejó lo que estaba haciendo y se acercó a mí.
—Sé que le parecera extraño y que tal vez no quiera decirme pero enserio quisiera saber sobre el hijo del señor Jeon.
—¿Usted es la chica a la que él le donó su riñón?
—Si ¿Como lo sabe?
—Hace años él me contó que había ayudado a una niña a curarse. Y también escuché que lo estaban buscando para agradecerle.
—Si, él me salvó la vida. Por esa razón quisiera saber sobre él así cuando lo vea saber a qué atenerme. EL señor Jeon dijo que era alguien muy peculiar y que debía tenerle paciencia
—El joven Jungkook es un chico muy amable y cariñoso, sólo que a lo largo de su vida a pasado por muchas cosas dolorosas. Y como les dije el señor Jeon casi nunca está aquí y por esa razón Jungkook no obtiene muchos límites para algunas cosas y puede que eso lo haya cambiado un poco
—¡Oh! ¿Y donde está en este momento?
—Seguro esta con su novia
—Ah ya. Bueno gracias por decirme todo esto
—De nada. Espero y le vaya bien con Jungkook
Ahhh nueva historia esta dedicada a Yaru97. Gracias por permitirme usar tu nombre y por siempre darle amor a mis historias.
Espero y te guste 💜💜💜💜
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❝𝘽𝙚𝙨𝙩 𝙤𝙛 𝙢𝙚❞
Fanfiction𝘚𝘶 𝘴𝘢𝘭𝘷𝘢𝘤𝘪ó𝘯 𝘺 𝘴𝘶 𝘱𝘦𝘳𝘥𝘪𝘤𝘪ó𝘯. É𝘭 𝘦𝘳𝘢 𝘢𝘮𝘣𝘢𝘴 𝘱𝘢𝘳𝘢 𝘦𝘭𝘭𝘢. 𝘗𝘦𝘳𝘰 𝘦𝘭𝘭𝘢 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪é𝘯 𝘦𝘳𝘢 𝘭𝘢 ú𝘯𝘪𝘤𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘱𝘰𝘥í𝘢 𝘴𝘢𝘤𝘢𝘳 𝘭𝘰 𝘮𝘦𝘫𝘰𝘳 𝘥𝘦 é𝘭.