Perversa adicción.

Capitulo 15

Una ves que terminamos de cenar, Alex se levanto y se acercó lentamente a mi tendiéndome la mano.

Alex- Acompáñame- Sonrió. 

Agarré su mano y subimos las escaleras posicionándonos frente a la puerta del cuarto rojo. 

Alex- ¿Estas lista?

Yo- Si- Sonreí tímidamente. 

Alex- Acuérdate del contrato, si dices rojo parare inmediatamente, si dices amarillo tendré que hacerlo lentamente, pero tendré que hacerlo, solo en situaciones extremas podrás decirlo Sarah.

Yo- Recuerdo todo el contrato Alex, no te preocupes.

Alex introdujo la llave en la cerradura y la giro haciendo que la puerta se abra, giro el picaporte y la empujo, me hizo entrar primero para luego cerrar la puerta detrás suyo.

Una luz baja se encendió dejándome ver todo a mi alrededor, Alex se posicionó detrás de mi y comenzó a respirar en mi cuello dejando leves besos sobre la zona.

Alex- Tienes que hacer todo lo que te diga, de lo contrario, serás castigada.- Dijo susurrando en mi oído.

Alex se paró frente a mi haciendo que lo mire a los ojos.

Alex- No puedes mirarme Sarah, no tienes tan claro el contrato como decías.

Yo- Lo siento- Dije bajando la cabeza. 

Alex- Levanta los brazos- Y así lo hice.

Alex deslizó el vestido por mi cuerpo sacándomelo y dejándome solo en ropa interior.

Alex- Eres preciosa- Susurró haciendo que me sonrojara- Arrodíllate en el piso y pon las manos sobre tu regazo, así vas a esperarme cada vez que vengamos- Asentí- No te escucho Sarah.

Yo- Esta bien. 

Alex- ¿Qué?

Yo- Esta bien amo- Dije en un susurro.

Alex- Levántate y levanta los brazos- Hice lo que me dijo.

Alex me colocó una especie de esposas en las muñecas grandes y mullidas, para luego engancharlas en el techo, abrió mis piernas y se adentro mas a la habitación en busca de algo. 

Volvió con una especie de palo con un laso en la punta de cuero, en cuando lo vi mis ojos se abrieron pero baje la cabeza rápidamente.

Alex- Si te duele me lo dices, ¿Esta bien?

Yo- Si amo- Susurré.

Comenzó a pasar el látigo por todo mi cuerpo haciendo que gemidos salgan de mi boca, a medida que acariciaba mi cuerpo daba pequeños golpecitos que me generaban descargas eléctricas en todo el cuerpo.

Alex dejo el látigo en el piso y se acercó a mi tomando uno de mis pechos con su boca, solté un gemido, mi pecho subía y bajaba, besó mi cuello y se arrodilló para besar mi panza y lamió delicadamente mi clítoris.

Yo- Alex-Gemí.

Alex se levanto lentamente del piso pasando sus manos por mi cuerpo y me miro fijamente.

Alex- El contrato dice que no puedes decir mi nombre y tienes que referirte a mi como tu amo, Sarah te mereces un castigo.

Lo miré con lo ojos abiertos pero mi pecho me delataba, quería mas.

Alex- Mañana por la mañana obtendrás tu castigo- Dijo serio. 

Yo me mordí el labio inferior haciendo que el bajara su mirada a mi boca.

Me sacó las esposas dejándolas en el piso junto al látigo y me llevó a la cama con sabanas rojas que se encontraba allí, me acostó lenta y delicadamente para luego sacar de uno de los cajones de los costados una venda, tapo mis ojos con ella y ató mis manos al respaldo de la cama con sogas.

Abrió mis piernas y se posicionó entre ellas para luego besar mis labios delicadamente y así bajar a mi cuello, deslizó su mano por mi vientre con algo helado entre sus dedos, por el camino mojado que dejaba en mi piel, supuse que se trataba de un hielo.

Gemí pero Alex no paro, paso el hielo por mis pechos y lo siguió bajando dejándolo en mi ombligo, uno de sus dedos se introdujo dentro de mi haciéndome retorcer por el frío de este a causa del hielo, muchos gemidos salieron disparados en mi boca, Alex atrapo mis labios y comenzó a besarlos mientras introducía otro de sus dedos dentro de mi canal.

Estaba por decir su nombre pero me detuve tragando saliva, él aumento la velocidad haciéndome explotar de placer.

Alex- Me encantas Sarah- Susurro en mis labios para después besarlos. 

Salió de encima de mi y por unos minutos no lo volví a sentir, no hacia ruido ni se escuchaba al menos su respiración, pensé que se había ido pero no creía en la posibilidad de que me dejara ahí atada y con los ojos vendados. 

Sentí una piel caliente sobre mi cuerpo, se había quitado la ropa. Comenzó a besar mi cuello y luego mis labios entrando en mi, gemidos salieron de mi boca pero Alex los atrapó besando mis labios. 

Aumento la velocidad y cuando estaba a punto de venirme...

Alex- No te vengas Sarah, voy a castigarte el doble si lo haces. 

Gemí aun mas y mi pecho subía y bajaba rápidamente.

Yo- No...puedo mas- Susurré.

Alex paro lentamente y me giro haciéndome quedar en cuatro se introdujo dentro de mi y con una de sus manos agarró fuertemente mi cabello tirando mi cabeza hacia atrás, mis manos seguían atadas así que no podía moverme mucho. 

Alex- No te vengas, ya sabes que pasa si lo haces.

Hice mucho esfuerzo para no venirme pero no podía mas. 

Yo- Por...favor- Gemí- No...puedo..mas.

Lagrimas amenazaban con salir de mis ojos, estaba muy extasiada y el hecho de no venirme me mataba.

Alex volvió a girarme en la cama y se metió entre mis piernas entrando nuevamente en mi, lo hacia cada vez mas rápido.

Alex- Hazlo Sarah- Susurro en mis labios. 

Un fuerte gemido salió de mi labios y su última embestida hizo que los dos explotáramos de placer.

Alex salió de dentro mío y me desató para luego caer en mi pecho. Yo lo acaricié, pero el corrió mi mano.

Yo- Lo siento- Susurré con los ojos cerrados y controlando la respiración.

Alex- Que mas da, estas rompiendo todas mis reglas.- Dijo con los ojos cerrados- Te llevaré a tu cuarto. 

Yo- Esta bien.

Me levantó en sus brazos y cerro la puerta detrás suyo, otra de las cosas que decía el contrato era que no dormiríamos juntos y creo que lo estaba cumpliendo. 

Yo- ¿No puedes quedarte conmigo?- Pregunte enredándome entre las sabanas. 

Alex- Tienes que descansar, no me olvido de tu castigo pequeña- Dijo sonriendo. 

Me dio un beso en la frente y cerro la puerta detrás suyo, yo me quedé dormida al instante. 

¡¡Holaa, Nuevo capitulo!!!

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