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Fui hacia mi habitación y en la pequeña mesa comencé a realizar el boceto del dibujo del rostro de una persona. Básicamente la profesora nos dijo que le diéramos cada uno nuestro propio estilo.

Comencé a darle más forma con trazos suaves y cuando estuve conforme con el resultado lo repasé con una micropunta.

Ahora faltaba pintarlo.

Estaba sacando la caja de colores, ya tenía la idea en mente cuando escuché que mi madre llamaba para que comiéramos.

-¡Ya voy!- acomodé un poco los materiales de la mesa, y con acomodar solo me refiero a empujar todos los materiales del dibujo.

Me levanté de la silla y caminé hasta la pequeña mesa en la que máximo cabían cinco personas. Necesitábamos algo pequeño para un departamento pequeño, y a mamá le gustó esa mesita circular.

El almuerzo fue como todos, sin novedad grande, los tres platos tenían arroz y ensalada. Cada uno se puso la carne a gusto.

No dije nada sobre Yukhei, a mi madre tampoco le agrada, pero no le gustaría que me metiera en problemas. O quizá no; Sohee siempre discute con niños de su curso y mi madre solo le da la razón porque mi hermana exagera mucho las situaciones.

Hoy al parecer se peleó con una niña de su curso porque se formó adelante de ella.

-Y aparte la Yeobo me dice que ese es su lugar porque llegó antes, pero no, ella es más alta que yo.

-Era que no le hagas caso, porque era una fila común.- dijo mi madre acariciando su melena.

-¿Y si la próxima cuando sea una fila para educación física se pone en mi lugar?

-Le dices a la profesora que ese no es su lugar, simple.- dije recogiendo mi plato después de que mi madre lo hiciera.

Sohee asintió algo desconcentrada y recogiendo su plato también.

-Bueno, voy a mi cuarto.- dije después de dejar mis platos y cubiertos en el lavavajillas.

-Hijitos, dentro de un rato tengo que ir al trabajo, Minseok, tú vas a lavar los platos y tú Sohee barres el comedor.

Suspiré con algo de resignación y me di la vuelta.- ok.- caminé asintiendo hasta el lavavajillas y comencé a lavar los platos, mientras más rápido acabe, mejor.

Mi hermana se fue a su cuarto a buscar la escoba.

Para cuando ella la encontró, yo terminé de lavar los platos, fui al baño para lavarme las manos, es algo que siempre hago después de lavar algo, costumbre supongo.

Ahora tenía que terminar el dibujo, cuando llegué lo miré, estaba bonito, pero tenía que pintarlo.

Me senté tomando el color rojo para pintar el cabello de la chica (los rostros femeninos siempre se me han hecho más fáciles de dibujar), pero me arrepentí, se vería muy corriente.

Lo miré desde otro ángulo y no sabía de que color debería ser su cabello, vaya. Mejor veamos de que color debería ser su piel. Tampoco sabía de que color.

Y pensar que esto se volvería difícil. Si esto no fuera un dibujo, me diría que debo pintar su cabello con el primer color que me salga y después hago que el resto combine, pero este dibujo podría ser hermoso con los colores indicados.

-Mierda.- murmuré casi inaudible y comencé a mirar los colores tratando de decidirme en uno para hacer algo, y miré nuevamente el color rojo...Jongdae.

Tomé este y le pinté los ojos así, o sea, solo la "bolita negra", no crean que todo.

Después tomé mi celular y le mandé unos cuantos mensajes:

Otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora