P.O.V Logan.
Ya era Viernes, ¡gracias a dios!, esto de levantarse temprano todas las mañanas era irritante. Por más que lo intentaba, no lograba acostumbrarme al ritmo de levantarme temprano, desde la universidad que no lo hacía.
Ya era las dos de la tarde, solo quedaba una hora en la escuela. Todo un día sin cruzarme a Anna o Chloe, estaba muy ocupado con los asuntos legales de la escuela. Eran un desastre, había ciertas cuestiones hasta ilegales. El anterior representante legal no debía de hacer nada, porque tantas cosas mal hechas o eran a propósito o era muy distraído.
Tres y treinta, suena la campana, interrumpiendo el placentero silencio que reinaba en la escuela. Me levanté y me dispuse a marcharme rápidamente, con suerte me las cruzaría a las dos chicas de mi vida. Junte mis pertenencias lo más rápidamente posible que me daban las manos y salí de mi oficina. Caminaba a paso acelerado para poder ganarle tiempo a ella que siempre salian mas tarde, cuando oí una voz familiar hablando con mi hermana.
-¡LOGAN!-exclama la voz, y ahí lo vi, lo que me faltaba Isabel. Ella se acercó corriendo hacia mi y se me lanzo.
-Isabel, ¿Qué haces aquí?-pregunté irritado, mientras trataba de quitarmela de encima.
-¡Vine a visitarte, amorcito!-dijo feliz, tratando de acercarse de nuevo, pero yo se lo impedi. Podía observar a mi hermana riendo detrás de ella.
-Deberías haber avisado antes-la regañe, alejándose algunos pasos de ella.
-¡Es que se hubiera arruinado la sorpresa!-chilló, casi había olvidado su chillona voz.
-Isabel, ¿tu comprendes que terminamos hace tres meses verdad?-le pregunte serio.
-Si, pero lo hiciste por la distancia-me explico-¡Así que por eso me mudare aquí contigo!-lazo alegre.
-No, terminamos porque terminamos-le dije- Hace tres meses, antes de que yo siquiera supiera que me venía para acá-le explique, pero no le importo mucho, porque dirigió su atención a algo que pasaba por el pasillo, creo que a propósito, negando la realidad, como siempre.
Les explicare, Isabel era una chica que trabajaba en la oficina donde tenía mi estudio en Londres. Parecía linda al principio, por eso coqueteabamos, hasta que ella se lo tomo como algo más serio (ella sola) y comenzó a hacer circular el rumor de que ella era mi novia. Como asumí que era algo pasajero y era mi primer ligue un poco más estable desde Anna, acepte ser su "novio". Pero con el tiempo se hizo más intolerable y acabe rompiendo con ella, pero no lo tomo muy bien, creyó que era una broma y siguió persiguiendome, hasta que me mude del país. Ella era claramente uno de los motivos por los cuales escape de allí y acepte volver a Nueva York.
-¡Oye, ¿Por Qué no vamos a tomar algo a algun lado, amorcito!?-preguntó a los gritos mientras colgaba sus ambas manos en mi cuello- Vi un bar muy bonito aquí cerca.
Mi hermana seguía riendo detrás de ella, juraría que esto había sido obra suya. Era el colmo, trabajo desbordante aquí, en el estudio, McBonito y Anna, Chloe y para variar se sumaba esto. ¿¡ALGO MAS MUNDO!? Y hablé demasiado rápido, porque en ese instante, por el pasillo, doblaban Mc Bonito, Dory, y el colmo de los colmos, Anna con Chloe. ¡DEMONIOS!, ¿QUÉ ACASO NUNCA ERA SUFICIENTE TORTURA!?
La cara de los cuatro fue de completo asombro, pero la de Anna era la peor. Se podía ver enojó, por su seño fruncido, decepción, por su mirada triste, y asombro, por sus boca completamente abierta. Creo que eso había terminado de arruinar mi día por completo, esa escena.
-Hola Señor Logan-rompió el silencio la pequeña niña, con una pequeña sonrisa.
-Hola Chloe- dije y aproveche la distracción para quitarme a Isabel de encima, y correrme unos pasos de ella-¿Todo tranquilo?-sonreí y la miré a Anna, que negaba con la cabeza, y con el ceño más fruncido que había visto jamás.
-Creo que aquí sobramos-acotó divertido McBonito- Mejor nos vamos-les dijo a las tres mujeres.
-Tienes razón-asintió rápidamente Dory- Vamos que interrumpimos algo-dijo y me guiño el ojo- Buen fin de semana- se despidió y tomó a Anna de un brazo y se la llevó, junto con Chloe. El otro las siguió, no sin antes saludarme feliz con la cabeza, él sabía que acababa de ganar un comodín, ¡yo lo sabía!
-Yo tambien me voy-anunció mi hermana- Nos vemos, hermanito- dijo risueña y se marchó.
-¿Vamos, amorcito?-preguntó Isabel agarrándose de mi brazo.
-Esta bien-respondí resignado, a lo que ella respondió con un chillido de felicidad y me arrastró hacia afuera.
Creo que las cosas no podrían haber salido peor, en ningún universo, ni en ninguna otra realidad existente. ¿¡Cómo iba a hacer para que Anna entendiera la situación!, "MI EX, QUE NO COMPRENDE QUE ES MI EX, ME SIGUIÓ HASTA AQUÍ Y JUSTO NOS ENCONTRASTE EN LA PEOR SITUACIÓN POSIBLE", era completamente increíble por donde lo viera, acababa de meter la pata y en grande.
Pero creo que fue suficiente castigo tener que oír a Isabel por dos horas hablar acerca de su vida y sus estupideces, fue suficiente castigo. Sigo sosteniendo que si pudiera viajar en el tiempo, lo primero que haría sería decirme a mi yo del pasado "¡NO LO HAGAS, ES UNA TRAMPA, CORRE".
Una vez que logré deshacerme de ella, dejándola en su hotel, luego de estar media hora convenciéndola de que no debía venir a casa, me subí al auto y trate de llamar a Anna. No hubo respuesta. Bien, si ella queria jugar así, esta perfecto. Encendí el motor, y me encamine a su casa. Mientras iba manejando, con el manos libres, la seguí llamando, sin éxito alguno.
Cuando llegue a destino, me baje del auto y me dirigía a la puerta de su edificio, cuando la vi en la calle a ella. Estaba con Chloe, y con otra persona, pero no la podía distinguir. Me escondí dentro del auto, tratando de distinguir quién era a través de los vidrios polarizados. Se iban acercando y empezaba a reconocer a esa persona, ¡ERA EL PADRE DE ANNA!
Demonios, no podía bajar, ese hombre me odiaba, si me veía ahora, no se quien me golpearía más fuerte, si Anna o el. Tenía que hablar con ella, a como diera lugar, debía arriesgarme. Salí del auto y me les acerque, debía aclarar las cosas.
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Eight Years Between Us (Ocho Años Entre Nosotros)
Teen FictionAnna lleva una vida normal criando a su hija Chloe, pero sin un padre. Ocho años después de la separación, "El" reaparece en su vida y viene para quedarse. Anna vivirá una montaña rusa de emociones mientras equilibra su vida emocional de adolescente...