Después de volar unas quince horas llegamos a Bora bora. No puedo quejarme en verdad es hermosa.
—Gracias —salto a los brazos de Aaron para besarlo.
Mientras esperamos el carro de golf que nos llevará a nuestra habitación.—Espera a ver donde vamos a quedarnos. — sonríe y vuelve a besarme.
Al llegar el carro nos lleva por un camino super lindo, hasta llegar a unas pequeñas casas sobre el hermoso mar cristalino, pasamos varias casas hasta llegar a la última y más grande.
—Su equipaje ya está aquí señor. — nos indica el simpático chófer— aquí tiene su llave. —le entrega una tarjeta.
—Gracias —dice Aaron.
—Señora —inclina la cabeza hacia mi, y se marcha.
—¿Señora? —digo poniendo mi mano en el pecho— ¿Me veo vieja?
—Nada de eso, tiene que pensar que eres mi esposa. —deposita un tierno beso en mis labios.
—Tendríamos que aclarar esa situación, ¿No te parece?
—Para nada.
Pasa la tarjeta para quitar el seguro y la abre para mí, haciendo que pase primero.
—Adelante señora.
—Gracias es usted muy amable señor gruñ... —no puedo terminar la frase al ver lo encantadora que es, doy unos pasos dentro y me tapó la boca y giró a mirar a Aaron que sonríe detras— Aaron esto es precioso.
Pasó junto a un living que tiene un champán sobre la mesa, y dejo mi bolso en el sillon, se ve el mar cristalino desde aqui. La habitación está a la derecha la cama tiene una frazada blanca con un corazón de pétalos rojos en el centro de la cama.
Me sobresalto al mirar el suelo y ver que a unos metros de los pies de la cama se puede ver el agua debajo.
—¿Te gusta? —me pregunta abrazándome desde atrás, mientras estoy cautiva por la vista.
—Lo amo —me da un pequeño beso en la cabeza— ¿Ya habías venido?
—No, es mi primera vez.
—¡Oh! —me pongo frente a él— su primera vez señor Williams gruño.
—Estas buscando que me enoje y te tire al agua así como estas.
—No —lo beso— gracias, gracias, gracias— lo vuelvo a besar cada vez que le agradezco.
—Tendré que darte sorpresas más seguido.
—No es necesario, con lo que ya me has dado tengo para dos años mínimo.
—Todavía queda muchas más sorpresas princesa —se separa de mi— ¿No quieres meterte al agua?
—¡Si! —digo saltando como niña pequeña.
Voy directo a buscar la valija para ver los trajes de baño que Chloe eligió, en casa ni los mire los puse directo en la valija.
—Tendría que habérmelos probado en casa, y si no me entran.
—Puedes nadar desnuda, nadie te verá —veo la picardía en su mirada— o puedo deshacerme de ellos así estas desnuda todo el tiempo.
—Aaron, las personas de al lado me van a ver.
—Es la más alejada y no se ven las casas de los costados. —sonríe ampliamente.
Pongo los trajes de baño sobre la cama.
—Elije uno.
—Este —me entrega un bikini de color celeste y coral.
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POR SIEMPRE A MI LADO (2da parte)
RomanceMaia se siente devastada al conocer el secreto que le ocultaban los Williams, sin darles oportunidad a explicaciones, huye de casa de Loretta. Desolada por haber puesto su corazon en manos de un hombre que con sus encanto la mantuvo cegada de lo que...