30 Días de Smut Challenge|| Yoonmin

Día 12. Beso negro

Pov JiMin

Me exalté en demasía, sintiendo como un duro cuerpo pálido me encerraba contra la pared, haciendo que nuestras complexiones rozaran calientemente en un pasional compás primitivo. Podía escuchar sus graves gruñidos y agudos alaridos que salían de mis trémulos labios. Luego levanté mi rostro, detallando su esculpidas facciones.

Su redonda pero afilada cara, sus rasgadas y felinas esferas de tonos oscuros como el mar, nariz tallada de manera tierna, sus labios finos que se fruncían orgullosos al soltar sonidos guturales, mas su maravilloso cabello que, a pesar de lucir jodidamente suave, estaba desorganizado de manera sexy debido mis regorditos dedos al masajear su cuero cabelludo mientras me besaba sin parar. Yo estaba encantado con los toques y sonidos de aquel extraño que apareció de repente, tocando mi cuerpo.

Luego sintió como el mayor empujaba mi todo, dejándome reposar en la cama. Empezó a tocar cada rincón que nunca habría pensado en tocar, sintiendo mi piel arder. Sin previo aviso, mi culo fue desenfundado descaradamente, haciéndome sonrojar y morder mi labio firmemente.

─Que hermosas nalgas tienes, precioso. ─ azotó una de las mencionadas, sacándome un gemido. Empujé mi cadera hacia atrás, sabiendo que estaría presente el pene empalmado del adverso. Su voz tan grave activó algunos botones que no conocía de mí.

Vio como YoonGi se deleitaba con mi enorme trasero, decidiendo prepararme deliciosamente con su lengua para mejor experiencia. Y ojalá alguien lo hubiera preparado para su húmedo músculo caliente.

JiMin tenía su cabeza hundida en la almohada, gimiendo, mientras sostenía su culo el cual estaba siendo comido completamente. Lamidas eran repartidas por toda mi raja, enfocándose más en mi entrada palpitante. De repente, el mayor insertó la lengua y el rubio se corrió con un grito prolongado.

Ya preparado, el de cabellos zafiro simplemente acercó su carne al orificio del menor, tentándolo. Pero, sorprendiéndole, yo mismo me arremetí contra el falo, hundiéndome al fin.

Un vaivén desenfrenado fue establecido, el mayor apuntando su pene desde la primera estocada hacia mi próstata, logrando que el acto fuera más rápido. Me vine rápidamente con un sonrojo adornando mi rostro y YoonGi con un gruñido muy masculino.

De repente, un confundido JiMin se levanta de la cama, notando que está enfundado con su ropa, no tiene ningún chupón y no tiene dolores en su espalda baja. Estaba desorientado. Parecía que aquel maravilloso sueño con el extraño había sido solo eso; un sueño.

Pero un cuerpo delgado y duro que ya había visto antes se colocó frente a mí, haciéndome ver su reconocido rostro. ¡Era el extraño! Sentí sus dulces labios juntarse con los mios, robándome un suspiro y allí recordé todos nuestros momentos juntos de pareja. Había olvidado a mi novio, ups.