𝐋𝐮𝐳𝐛𝐞𝐥»𝐋𝐒

Ordog - Diablo

           

"No juzgue nada por su aspecto, sino por la evidencia. No hay mejor regla."

[CHARLES DICKENS]

El lugar no era muy diferente a lo que vería en un día normal, había calles y edificios. Solo que parecía distinto de alguna forma ¿alguna vez han entrado al cuarto de los espejos en los circos? Pues era algo similar, no que no debería ser lo era y lo que era al derecho estaba al revés.

Camino por la misma calle de donde estaba, todo estaba muy limpio, en las calles no había basura de ningún tipo, los edificios y locales no tenían grafitis y todo parecía muy elegante y victoriano. ¿Estaba en el lugar correcto?

— ¿te perdiste? —una voz lo hizo sobresaltar en su lugar.

Se giro por inercia no porque quisiera ver el dueño de aquella voz.

—No... —dijo dejando la negación al aire.

Pues la dueña de la voz que le había hecho la pregunta, tenía un aspecto atemorizante o más bien, si lo quisiéramos ver desde la perspectiva de Harry diríamos que es único.

—Oh, ¿Qué te trajo al infierno? —pregunto la criatura.

Harry trajo saliva y apretó su mano de la ya no había ningún rastro de sangre o alguna cortada en ella. Miro de nuevo a la criatura, tenía aspecto de ser un perro de color negro, pero este estaba erguido, caminaba en dos patas y estaba vestido como una persona de la edad de los 70s, llevaba un sombrero de copa y en su pata derecha había un bastón. Tenía un saco café con pequeñas bolsas en la parte inferior de este y de él salía un reloj con una cadena.

—Yo.... —sacudió la cabeza y tomo una posición más relajada—Yo acabo de llegar, así que en realidad no lose.

—ya veo, podrías ir con el buscador, asigna penitencias y castigos a los que llegan aquí. Te aconsejo que vayas, si no él podría venir a buscarte. —le dijo la criatura en forma de perro, Harry asintió.

— ¿Podría indicarme el camino por favor? —le pidió el mortal a la criatura frente a sus ojos.

—Seguro, puedes ir hacia aquella estatua, esta al final de esta calle. Dile que deseas ir con el buscador y ella te transportara hasta allá. —indico la criatura. Harry asintió pues no sabía debía o no dar las gracias.

Avanzó por la calle dejando atrás a la criatura. Miro con un poco más de detenimiento todo, preguntándose si había mas criaturas únicas. Se subió a una de las aceras que había estando un poco más cerca de los restaurantes, tiendas y edificios. Miro en su interior a más criaturas en forma de animales actuando como personas. Si el inframundo era así y estaba condenado a pertenecer ahí cuando muriera entonces no era tan malo. Solo pedía no transformarse en un humano de nuevo, para él siempre serán las peores bestias en el mundo.

Sin darse cuenta y estar sumido en sus pensamientos llego a la nombrada estatua, esta tenia forma de grifo, de color dorado pero más brillante. Acerco su mano hacia la piedra donde estaba posada y la toco tres veces como si tocara una puerta. La estatua se movió y lo miro. Harry retrocedió con miedo, queriendo huir o en su defecto desaparecer ahí mismo.

—Podrí- as—dijo temblando—Podrías llevarme.... —la criatura abrió sus alas provocando un viento que hizo que Harry retrocediera aún más, admiro a la criatura que tenía alas grandes y majestuosas, casi deseo tocarlas. Se pensó un poco su petición y dijo convincente: — ¿Podrías llevarme con Luzbel? ¿Por favor?

El grifo lo miro inclinando su cabeza hacia derecha, como si se tratara de alguien extraño. De un salto bajo de su piedra y se acercó a Harry a toda velocidad, Harry al percatarse trato de correr pero como era de esperarse aquella criatura tenia mejor agilidad que él. Cuando pensó que lo iba devorar esta lo agarro con sus garras y lo elevo en el aire. Solo el grito de pánico que dejo Harry quedo como evidencia que hubo alguien ahí.