Capítulo 10

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- Buenas tardes. Soy el Capitan Orive. Martos me avisó que vendrían - El hombre de pelo largo y apariencia desenfadada estrechó la mano de Cepeda ignorando a Miriam

- Encantado. Agente Cepeda. Ella es la Jefa Rodriguez - Soltando su mano para señalar a Miriam y dejar claro los rangos que el Capitán Orive no parecía reconocer

Orive carraspeó incómodo por el evidente mal entendido - Lo siento. Un gusto- Inclinándose levemente ante la gallega - Les mandé a preparar una oficina para que puedan trabajar a gusto - Dijo indicando con el brazo el camino que Miriam y Luis siguieron 

Al abrir la puerta del pequeño despacho se encontraron una pila de cajas de evidencia dispuestas sobre una mesa redonda. A la derecha una mesita con una cafetera eléctrica de dudosa higiene y 2 vasos plásticos. 

- Será posible que alguno de los detectives que participaron en la investigación nos den un mano. Si no es molestia- Consultó Miriam

- Lamento no poder ayudarlos. Yo estoy al mando de la comisaría desde hace 2 años apenas. Tengo entendido que ya no queda nadie. Gutierrez se jubiló el año pasado y su compañero, Azcurra está ahora en Asuntos Internos pero puedo averiguar si alguno de los oficiales en funciones recuerda algo.

- Se lo agradezco - Asintió Miriam girando para observar a Luis que ya se encontraba inmerso en una de las cajas de evidencia.

Habían pasado casi 3 horas revisando las cajas de evidencia, clasificando pruebas y haciendo anotaciones prácticamente en silencio, sólo interrumpían su concentración para intercambiar alguna opinión sobre la investigación cuando alguien golpeó a la puerta para luego abrirla sin esperar a que Miriam o Luis autorizaran la entrada.

Un joven uniformado se abrió paso y el Capitán Orive detrás de él.

- Agentes, les presento al oficial Right. El colaboró con Gutierrez y Azcurra en la etapa final de la investigación y se ofreció a colaborar con ustedes - El joven sólo asintió tímidamente a la afirmación del capitán quien se despidió inmediatamente cerrando la puerta tras él.

Luis se paró de su asiento para estrechar su mano mientras que Miriam le dedicó una sonrisa desde su lugar.

- La verdad no recuerdo mucho. Yo apenas entraba a la fuerza y Gutierrez y Azcurra me captaron. Yo les hacía los informes y reportes que ellos no querían hacer básicamente. 

Luis rió, recordando que solía hacer lo mismo con Roi al principio hasta que se terminó convirtiendo en su mano derecha y la izquierda también pero sobretodo en su mejor amigo y la persona más incondicional que tenía a su lado.

- Fueron en total 12 robos. Al menos los que pudimos relacionar porque marcaban las casas robadas con una X dibujada en aerosol rojo en la puerta. 

- Narcisista - Interrumpió Luis - Dejar ese tipo de marcas en las escenas del crimen revela una personalidad narcisista que necesita un reconocimiento. Supongo que no les pusieron un mote o un seudónimo?

- No en realidad no - Contestó Right para luego continuar con su relato -La huella se encontró en el primero de los robos. Después de eso se perfeccionaron y seguramente usaban guantes o limpiaban muy bien la escena. Hackeaban las cámaras de seguridad haciendo imposible encontrar algún rastro por esa vía. En principio atacaban casas de familia de un radio acotado cuando las familias no se encontraban. Se llevaban joyas, dinero, objetos de valor pero en sí siempre cosas pequeñas sin forzar las cerraduras lo que resultaba más llamativo. Creemos que tal vez lograban engañar a algún miembro de la familia para robarles las llaves, hacer copias y luego devolverlas. Pero el último caso fue diferente. La casa no estaba vacía... - Right se detuvo evidentemente conmocionado por el recuerdo - Era un matrimonio joven con un bebé de 2 años. Ellos fueron fusilados de un tiro en la cabeza...

El Crimen de CenicientaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora