Capítulo 3

2.4K 94 1
                                    

—Entonces...¿Qué te parece?—preguntó Selina recargada desde la puerta.

Es un lindo y acogedor lugar. Pensó Bruce mientras ingresaba a la amplia habitación.

Tenía todo lo necesario para satisfacer las necesidades de un joven normal. Una amplia cama en el centro, un ropero, un tocador, un baño individual a un costado, un pequeño sillón de cuero en la esquina y un inmenso ventanal que iba del piso al techo.

—Es acogedor—respondió sentándose en una orilla de la cama—¿Ya trajiste todas tus pertenencias?.

—Si. 

—Me parece que estarás muy cómoda, Selina.—dijo Bruce y dudando un poco continuó—Sabes, puedes conseguir un trabajo mejor, eres lista y cualquier compañía estaría encantada de tenerte con ellos. Yo podría...

—Ya hablamos de eso cientos de veces Bruce—dijo Selina tomando asiento a su lado—No me veo en una oficina durante el día contestando teléfonos y haciendo tazas de café... Además, me están ofreciendo está oportunidad y no la pienso rechazar, esto es lo que quiero. Ser socia de este club es algo que va conmigo y sé que no te agrada la idea, pero no todos tenemos un futuro asegurado como el tuyo. 

—Lo que no me agrada es la idea de que estés involucrada con Tabitha y Barbará. Ambos sabemos que esto no es legal.

Y aunque sabía que esto encajaba perfectamente con Selina, sabía también que estar involucradas con ambas mujeres la arrastraría al caos.

Selina no era la persona más bondadosa, buena y honesta que él conocía, pero aún así, no podía dejar de pensar que Tabitha y Barbará traerán sólo más problemas a su vida. Además, Bruce sospechaba que todo el asunto del club era solo una tapadera para cubrir algún mercado de armas o drogas.

Un poco molesto y agobiado por el nuevo rumbo que estaba tomando la vida de Selina, se tumbó en la cama derrotado. La suavidad de aquel mueble nuevo lo sumergió entre algodón que le permitió relajarse.

Cerrando los ojos trato de encontrar en su mente alguna razón que le dijera que esta alianza era correcta. Pero era tan difícil. Solo era capaz de ver a través de sus recuerdos a Tabitha Galavan organizando su sacrificio un par de años atrás cuando llegó a la ciudad, un rostro retorcido de Bárbara jugando con él a lado de Jerome en aquel evento. No. Él definitivamente no tenía nada bueno que decir de ambas chicas. 

Podía sentir la mirada de Selina sobre él. 

Esto es una locura. Se repetía una y otra vez hasta que sintió como su cuerpo se sumergía un pequeño centímetro más al sentarse Selina sobre sus abdomen, ambas piernas de la chica presionando su costado. 

Bruce abrió sus ojos. Lo primero que vio fue el color verde de aquella persona que robaba su cordura cada vez que se acercaba y lo miraba. 

Selina recargó ambas manos a cada lado de su cabeza y se inclinó hacía él. Sus castaños rizos creando una cortina en donde sus rostros eran los únicos permitidos en aquel lugar.

—Te prometo—sus palabras rozaron el rostro de Bruce ante su cercanía— Que no me involucrare en algo que afecte a personas inocentes... Trataré de mantenerme al margen de problemas que puedan matarme o de personas que quieran asesinarme.

Aun cuando lo prometiera, sabía que sería difícil de cumplir.

—Solo promete que si necesitas ayuda o estás en problemas acudirás a mi— dijo Bruce haciendo a un lado el cabello de Selina.

—Lo prometo—respondió besándolo, sellando de alguna forma sus palabras.

***

Mi Brújula - Bruce Y Selina (Batcat)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora