Mi Brújula - Bruce Y Selina (Batcat)

Capítulo 17

Realmente no había tenido tiempo de involucrarse demasiado con nadie ni con nada en mucho tiempo. Pero toda esa semana fue distinto. Tan pronto como vio que Selina tomaba a Helena en sus brazos y cerraba la puerta del automóvil de Tabitha, inicio a ocupar su mente.

Solo bastaron tres días después de la partida de Selina para que los errores comenzarán a llegar uno tras otro. 

Los últimos tres acontecimientos se encontraban frescos y dolorosamente guardados en su mente esa noche. 

Bruce estaba en la estación de la GCPD sentado en una esquina de la oficina del capitán Jim Gordon. El joven de cabello negro esperaba que Alfred fuera a recogerlo. 

Una urgencia había nacido y solo necesitaba la llegada de su protector para sentir algo de paz en medio de aquella tormenta. El solo quería volver a la mansión para encerrarse en el estudio y llamar a Selina. Estaba ansioso por escuchar su voz y saber cómo se encontraban esa noche con Helena. 

Bruce quería establecer una conversación normal con esa chica que amaba para despejar su mente del caos actual.

Respiró de nuevo hondo. Paso sus manos frías por su cabello negro mientras se recostaba en la silla y miraba al techo. No soportaba pasar más tiempo ahí. Estar encerrado en entré esas paredes solo le permitía torturar así mismo y recordar sus tres errores.

Error número uno. Haber mentido a Selina. Él hirió a su esposa de una manera no intencional, pero dolorosa. La mirada de dolor que plasmaron sus ojos verdes esa noche a descubrir cómo cubrió el engaño de María por seis meses, fue suficiente para hacerlo sentir enfermo consigo mismo, cómo podía decirle a Selina que hiciera lo correcto cuando él no lo hacía.

Bruce quiso correr detrás de ella para explicar cómo su intención había sido muy distinta al resultado final. El solo quería que la señora Kyle se diera cuenta de lo maravillosa que era Selina, por ello proporcionó un pago correspondiente para detenerla en Gotham todo el tiempo posible. Creyó que su suegra se daría cuenta de lo valioso que había recuperado con el pasar de los meses.

María Kyle había acudido seis meses atrás desesperada por ayuda económica a su estudió. La mujer fingió un papel de víctima a tan solo dos semanas de haberse conocido para obtener dinero. Bruce no fue tonto, detectó el engaño inmediatamente después que la señora Kyle se retiró de la mansión.

Él tomó sus recursos y los empleó para saber quién era realmente Colt y María Kyle. A través de una sencilla investigación encontró que su suegra  tenía una fuerte relación romántica con su presunto amenazante. Los periódicos y expedientes sólo reafirmaron sus conclusiones, cada uno que tomaba y leía encontraba redactado los delitos de María y Colt; robos, asaltos y estafas.

Bruce aún conociendo todo su plan disfrazado de lástima, pena y compasión, continuó proporcionando fondos para todo el juego de María. Lo que fue un gran error.

El pensó en muchas ocasiones decirle la verdad a Selina, pero cada vez que la idea se presentaba solo era capaz de imaginar el dolor que causaría en ella. 

Bruce estaba aterrorizado en un principió ante la idea de Selina de marcharse de la ciudad con Helena, más comprendió que era lo mejor. No servía de nada permanecer en el mismo lugar cuando no había seguridad.

Entre más ocupado estaba, menos tiempo tenía para tirar la basura que recientemente se junto a su alrededor. Fue ahí donde cometió su segundo gran error.

Error número dos. Retomar su investigación sobre la daga adquirida. 

Fue el segundo día que Selina y Helena se fueron de la ciudad. El estaba aburrido en la mansión cuando vio la daga guardada en su escritorio. Habían pasado un poco más de seis meses desde que la adquirió en la subasta del Oswald.