One Shot's NaLu

«¿Lo prometes?»

Una pequeña niña de cabello rubio con mechas rosas estaba corriendo por todo el jardín gritando: — ¡Papi! ¡Papi! — grito con alegría mientras corría hacia su padre y se tiraba a sus brazos.

— ¡Mi princesa! — exclamó Natsu — ¿Cómo te portaste hoy?

— ¡Muy bien! — exclamó feliz — ¿Vienes de ver a mamá?

— Si, ella te manda saludos — sonrió un poco.

Natsu tomo la mano de su hija y se adentraron a la casa, tomaron asiento en el cómodo sofá y decidieron ver una película.

— Papi, me puedes contar la historia de como se conocieron tu y mamá ¿Siii? — junto sus manitas y comenzó a mover sus pestañas, viendose muy adorable a la vista de Natsu.

— Claro que sí princesa— apagó la televisión y sentó a la niña en su regazo. — Todo comenzó un 13 de agosto

13 de agosto del 2012

Se encontraba una rubia sentada en una de las jardineras que estaban en el patio de enfrente de la universidad, traía un libro sobre la mitología griega y parecía muy concentrada, hasta que un grito la sorprendió.

— ¡Cuidado! — la chica volteo y lo único que recibió fue un fuerte golpe en la nariz, haciendo que su cara tomara un color rojo intenso y su nariz comenzará a sangrar.— ¡L-lo siento mucho! ¡Lo siento! ¡Déjame ayudarte! — habló torpemente el chico — Dios, en serio lo lamento — hablo bajo y le tendió una toalla para que se limpiará

La chica sonrió y tomo la toalla que le estaban ofreciendo. — No te preocupes...— el chico la volteó a ver

— Natsu

— No te preocupes Natsu, solo fue un accidente — le sonrió. Natsu más calmado le devolvió la sonrisa

— ¿Lo prometes? — dijo Natsu alzando el meñique

Lucy río — Lo prometo

Natsu río un poco y hablo —Como disculpa, acepta ir por  un café de mi parte, porfavor...— levanto una ceja esperando el nombre de la chica.

— Lucy, si así estás mejor de que solo fue un accidente, entonces si, acepto ir por el café — ambos se sonrieron.

—Y ahí empezó todo.

Los días pasaban, Natsu y Lucy salían cada que podían, se habían convertido en uña y mugre. Y así paso hasta que Natsu no pudo aguantar tanto y termino besándola en aquel festival, en donde Lucy se veía más hermosa de lo que ya era.

— Lamento si esto arruina nuestra amistad pero ya no lo soporto más — dijo antes de besarla, Lucy sorprendida tardo en corresponder, pero luego paso sus brazos por su cuello, para así profundizar más el beso.

— Me gustas mucho Natsu — murmuró cerca de sus labios y Natsu sonrió.

— Tu también me gustas mucho — sonrió y le dio un beso en la frente.

— Ese fue el primer mejor día de mi vida.

Los meses pasaban y con ello los años, y el noviazgo de Natsu y Lucy seguí igual de hermoso y fresco. Habían terminado la universidad ahora ambos estaban viviendo juntos, eran una hermosa pareja.

— Lucy, sé que no es un buen momento, quería preparar todo para que fuera más romántico, pero mejor así, a mi estilo. Sé que en algunos momentos tenemos problemas, pero quiero decirte, que quiero que seas la mujer que vea cada mañana que abra los ojos, que cuando llegue a casa sea tu hermosa sonrisa que me reciba y un aroma exquisito de tu comida, quiero que seas la madre de mis hijos. ¿Te quieres casar conmigo? — Natsu se arrodilló y abrió la pequeña caja aterciopelada en donde venia un hermoso anillo de compromiso, Lucy cubrió su boca con sus manos y sus ojos comenzaron a cristalizarse.