Rachel, Tony & Terry

pequeño extra

-¿Qué haces Rachel? –Pregunta Tony sentándose a mi lado.

No quito la mirada de la pantalla y simplemente le señalo con mis dedos. –Serie.

Tony sonríe. –Rach, ¿Cuándo dejaras de ver esas series coreanas?

El capítulo termina y yo cierro la laptop. –Nunca... son tan cursis pero me gustan. Además, los coreanos están bastante bien.

Tony frunce los labios. –No hables de otros hombres.

Ella me da un beso en la mejilla. –Te amo, pero los coreanos siguen siendo sexis...

Tony toma mi rostro y besa mis labios. –Bueno Rachel, ¿Qué haremos para año nuevo?

Se encoje de hombros. –No se... podrías proponerme matrimonio.

Tony abre los ojos. Y luego sonríe. Y sonríe más.

– ¿Quieres casarte conmigo?

Yo solo rio. –Hay, Tony, ¿Por qué te sorprendes? Digo... no amo la idea del matrimonio pero si tengo que casarme con alguien definitivamente seria contigo.

Tony rasca su cuello. –Bueno... no quiero que nos casemos hasta que nos graduemos pero... ahora que sé que si te quieres casar conmigo comenzaré a ahorrar para tu anillo de compromiso.

Me encanta cuando sonríe. –Bueno, Tony... debe ser el más caro de todos.

Él ríe. –Por supuesto, reina Rachel.

Me quedo callada unos segundos y luego digo: –Oye Tony... cuando tengamos un hijo podemos llamarlo Terry, ¿No?

Él frunce el ceño. – ¿Quieres llamar a nuestro hijo aun no existente como nuestro perro de la adolescencia?

Golpeo su brazo. –No fue solo un perro... fue nuestro cupido. Si él no hubiera corrido hacia mí el emo de Tony jamás se hubiera enamorado de mí.

Él se recuesta en mi hombro. –Ah, espera... si él no hubiera corrido hacia mí la chica mala y ruda no se hubiera enamorado de mí.

–Yo no me enamoré de ti primero, fuiste tú.

Él besa mi mejilla. –Boba, tú me amabas. Usaste la excusa de querer ver mis libros para meterte en mi habitación.

Lo golpeó fuertemente en el pecho. –Cerdo. En esos días no quería meterme en tu habitación... parecías un asesino o algo... uno sexy, pero asesino...

Tony sonríe. –Bueno Rach, jamás estaremos de acuerdo... ¿Por qué no mejor vamos a cenar?

Rio. –Ah. Cierto... hoy es nochebuena. Espero que mañana me tengas un buen regalo.

Él toma mi rostro y me besa. –Mañana te amaré. Ese es mi regalo...

–Me encanta, pero... dame algo caro Tony... soy una mujer con estándares

Tony sonríe.

Lo amo.

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FELIZ NAVIDAD!! Y PROSPERO AÑO NUEVO!!!