—No creo que sea buena idea —el Beta cruzó sus brazos nervioso acariciándolos lentamente— ¿Él aquí? Aunque suene primitivo, es el territorio de TaeHyung ¿sabes?
—Necesita estar en un ambiente que le pertenezca completamente a JiMin —NamJoon sopló suavemente su café, envolviendo la taza de porcelana con ambas manos, no obstante las retiró al sentir el calor en su piel— ¡Auch! No sabemos como tratar con él, no sabemos en qué estado de inconsciencia está; lo mejor es que su lobo este rodeado de lo que JiMin considere suyo.
—Aun así, siento que es muy mala idea... —YoonGi mordió el interior de su mejilla— ¿Qué tal que JiMin le vuelva a llegar el celo así de la nada? No podemos arriesgarlo, no existe una señora Jeon ahí para rescatarlo.
El Alfa observaba con dulzura a su amigo, Min YoonGi realmente había cambiado desde que empezó a vivir formalmente con el Alfa pediatra. Incluso si tenía aún encima la tremenda sombra de la pérdida del cachorro, YoonGi contemplaba un aire diferente.
NamJoon recuerda aquellas épocas de universidad, cuando observaba atentamente a Min y Park. Ambos solían pasar tiempo juntos, y muy raras veces podías verlos sin el otro mientras estaban en la universidad. Él podía jurar que YoonGi en algún momento se sintió más cómodo con JiMin que con cualquier otra persona que rodeará su pequeño círculo social.
En algún momento, el Alfa realmente creyó que lo que aquel Beta sentía iba más allá de una simple hermandad, pero ambos, Beta y Omega eran muy distraídos para eso.
—Entonces, usaremos esto —tan simple como encoger los hombros, NamJoon le extendió en la mesa una pequeña bara de metal color negra con el mango recubierto de goma— oprime ese botón, hyung —el mayor lo hizo. Y de inmediato el aparato se extendió por lo menos dieciocho centímetros, y lo que más le sorprendió a YoonGi es el fuerte sonido que produjo cuando el campo eléctrico se accionó.— 65 watts de potencia, capaz de domar a un Alfa macho de la misma proporción que ese tipo.
—Lo puedes matar ¿sabes?
—Creí que lo querías lejos de JiMin, YoonGi hyung. —el hombre pequeño sonrió con sorna.
—Bueno, sería interesante meterle esta cosa por el culo —observó el desfibrador con interés— ¿no tienen los Alfas hombres próstata?
Una profunda carcajada resonó en el espacio— No, no tenemos. Según los altos profetas, un Alfa macho no debe estar con otro puesto que es un insulto a todo lo que la composición de nuestra clase.
—Patrañas, eso decían de la leyenda de Huin.
—Bueno si, pero en realidad tienen algo de cierto los lineamientos de los profetas —recostó su mejilla en su palma a su vez que el codo tocaba la superficie de la mesa— un Alfa no concibe, difícilmente una Alfa porque el lobo es tan orgulloso que jamás permitiría mostrar el cuello. Primero muerto antes que ello.
—Ah~ definitivamente ustedes son difíciles de entender —YoonGi rodó los ojos, en ese momento, como si un animalito se tratara, NamJoon pudo ver sus orejas de gatito imaginarias moverse cuando el aroma de JiMin llegó a donde ellos— JiMinie...
—¿Ha vuelto TaeHyung-ssi?
Con tranquilidad, el Omega se movilizó hacia la cocina mientras llevaba consigo unas compresoras y un pequeño frasco que antes tenía agua, al acercarse al grifo llenó aquel contenedor para volver donde sus amigos.
—No. El cachorro sigue en observación. —JiMin asintió con los labios apretados— ¿cómo vas?
—Bien. Aunque está agitado, es su padre, después de todo. Estarán conectados hasta que HyungShik sea marcado.
ESTÁS LEYENDO
Toi + Moi ✾ KOOKMIN [2]
Conto«Donde la vida de JungKook ya no es perfecta, es más bien un infierno. Se ha separado de su hermosa esposa omega, y su adorado -ya no tan- pequeño, tiene problemas; hasta que después de ocho años vuelve a ver a su destinado, JiMin» 💠 secuela de...