-SIETE-

45.2K 3.3K 531
                                    

Seguíamos sin decir ningún palabra esperando a que el otro comenzara a hablar.

—Dilo tú primero—le exigí.

—¿Estás segura?—asentí, es se apresuró a hablar—voy a irme por unos días,pues tengo una tarea que hacer, necesito que te cuides y qué cualquier cosa que suceda llámame en tu mente varias veces yo vendré lo más rápido posible.

—¿A dónde iras? ¿Cuánto tiempo?

—No se con exactitud cuanto me tardare, tampoco puedo decirte a donde ire, pero quiero que estes alerta y te cuides—tomó aire, parecía que no quería irse. Sacó de su bolsillo un collar dorado, con un dije de una piedra azul.
— Este collar... me lo dió mi madre.— me comenta y se le nota triste al recordar— Aleja a todas las malas vibras y personas que quieran causarte daño, yo ya no puedo usarlo, debido a que como soy demonio, es normal que conviva con personas que quieran causarme daño, y aunque me serviría para alejarlos, tengo que tratar con ellos día a día. Pero tú , no tienes porque lidiar con personas así, o malas vibras, úsalo por favor —toma mi mano y lo coloca sobre ella.

—¿Esto no te alejara a ti?, digo, eres un demonio y tu libro hizo que mi alma le perteneciera al diablo.

— Aunque no lo creas, no quiero causarte daño, solo cumplo lo que se me ordena, por eso trato de protegerte, y que no mueras antes de lo que deberías, para que puedas disfrutar mas tu vida y no te pase como...—se detiene al decir eso.

—¿Cómo a quién?

— Como a nadie, tengo que irme ahora, cuídate mucho y recuerda lo que te dije—mencionó nervioso.

—¿Por qué me proteges?

—Es mi obligación mientras dure el pacto, además, de cierto modo me recuerdas a...alguien. Me voy ahora, recuerda, llámame si te sucede algo.

—Espera Noah—hablé pero él ya se había marchado— Todavía no te habia dicho lo que queria decirte.

Ese Noah, porque siempre me deja de repente.

Aunque ahora que lo pensaba era bueno que no hubiese gente cerca, sería muy extraño ver a alguien desaparecer de la nada.

(...)

Habían pasado dos días. No sabía absolutamente nada de este demonio. Tampoco me había sucedido algo extraño, ni había escuchado de nuevo esa voz horrorosa que había logrado hacer que me desmayara. Así que no tuve la necesidad de llamarlo, más sin embargo tuve que enfrentar las preguntas constantes de Julieta. Incluso quería obligarme a ir a buscarlo pero le dije que estaba loca. Además él no estaría en ningún lado así que era inútil.

Me había pasado investigando en internet un poco sobre los demonios, encontré varios datos pero  no veía nada de pactos con humanos, bueno si, pero no decía nada de que al final se convirtieran también en demonios. A decir verdad había poca información de la que yo buscaba y también poca señal.

Estaba aburrida sin comprender nada, después me entristecí ya que al pensar que pasaría mi vida en el infierno cuando muriera me resultaba horrible. O bueno, seguramente iría allí de todos modos, he leído muchas cosas en mi vida, en especial Wattpad así que supongo que mi lugar ya se mantenía reservado igualmente.

Julieta entró en la habitación sacándome de mis pensamientos.

—Llegaste rápido.—dije mirándola.—¿qué tal tu día?

—Agotador—soltó tirándose a un lado mío en la cama.—¿Ya no has visto al chico sexy?

—¿Seguirás con lo mismo? Solo han pasado dos días, no es para tanto. Además ni novios somos.

Pacto Con Un Demonio| EN EDICIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora