THE HOST OF EVIL Alternative Lives. (Completa.)

Capítulo 21: ~ Un pequeño mundo.~

  "Basta con un hombre odie a otro, para que el odio vaya corriendo hasta la humanidad entra."   

 _ Anonimo._

- Despierta.

- ¿Qué?, ¿Qué sucedió? - Abro los ojos, la intensa luz me lastima, intento cubrirme pero no puedo moverme.

- Bienvenida.

Esa es la voz de una mujer, más bien de una niña ¡Será...! - ¿Dónde estoy?

-El lugar es lo de menos, lo que importa es que ahora estás conmigo y trabajas para mí.

- Me agrada más tu hermana. – Un inmenso dolor de cabeza me atacó, junto con toques por todo el cuerpo.

- Irrespetuosa.

- ¿Sabes? Traerme aquí fue lo más estúpido que pudiste hacer, me ahorraste todo el trabajo de buscarte.- La habitación es completamente blanca, una puerta de lado derecho del mismo color, una bocina en la esquina izquierda y en la derecha una cámara. Me mire y mi ropa ya no está, ahora tengo ropa blanca, descalza de pie, sujetada del torso, muñecas y tobillos. ¿Dónde están mis cosas?

- Como sabrás, ella y tú están conectadas, unidas; como quieras llamarlo lo único que tenía que hacer es neutralizar sus defensas, estas caen y tú estás expuesta, eres fuerte, es por eso que mi trabajo fue más arduo.

- Ve al grano. Me aburres.- El dolor de cabeza y la electricidad regresaron más fuerte.

- Primero trabajaras para mí.

- ¿Por qué lo haría?

- Tongo todas las respuestas que buscas y que mi hermana no te da. Si no contribuyes lo haré a la fuerza.

Si me quedo tendré más acceso, buscar a los demás y usar todo lo de Umbrella, control absoluto.- Tengo mejores cosas que hacer, como liberarme de aquí y apagarte.

- Tienes algunos rasgos de tu padre.

- ¡¿Qué?! ¡¡¡Ah!!! - Es peor, la sangre me quema intento levantar mi brazo, jalando lo que me sujeta, tomando en cuenta que todo es de metal.

- Continua.

Libero el brazo ella aumenta la intensidad, hago lo mismo con el pie, las descargas como el dolor de cabeza, van desapareciendo.- ¡¡¡¡Ah!!!! - Esta sensación es distinta nunca la había sentido comencé a reír, abro los ojos.

- ¿Algo que decir?

- ¡¡Voy acabar contigo!! – Libero el otro brazo y aumenta la electricidad.

- Esa no es la respuesta que yo quiero oír.

Sostengo mi cabeza, cerrando los ojos con fuerza.

- Solo tienes que decirlo y pararé, de otra manera me veré obligada a entrar eso no es lo que quiero yo, dilo con tus propias palabras.

- Lo... lo haré, ¡trabajaré para ti! – Me libera cayendo en el piso.

- Los mismos ojos de él.

Sonrió sin que ella me viera, me levante y camine a la salida, cuando la puerta se abrió algunos soldados estaban afuera.

- Bienvenida Señorita, estamos a su disposición.

Dijo uno de ellos, firme. – Excelente, quiero mis cosas y un informe de lo que está pasando.- Todos me miraron sin moverse. - ¡¡Que esperan!!