Capítulo 2: Una noticia inesperada

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Estaba durmiendo tan tranquilamente, cuando escuche un ruido que venia de abajo y voces conocidas, me levante rápidamente y al salir me emocioné mucho, mis padres se encontraban allí, baje las escaleras lo más rápido que pude, me acerque a ellos, los salude y ellos me saludaron, les pedí que se sentarán conmigo y escucharan todo lo que me pasó, pero al parecer ninguno de ellos me escucho, le pregunte a mi madre pero me dijo de que estaba muy ocupada y que no iba  poder atenderme, entonces fui con mi padre pero este me dijo de que se sentia muy cansado como para escucharme, me senti no solamente triste, sino también rechazada, y por mis propios padres, no podia creerlo, me fui llorando a mi habitación, pues no queria que mis padres me vieran así, pues de seguro me dirian que ya estoy demasiado grande como para llorar por tonterías, pero yo sabia que no eran tonterias; ya en mi habitación, me eché en mi cama, con los ojos un poco rojizos, y me puse a pensar que hubiera sido si hubiera tenido unos padres diferentes, yo se que ellos tienen mucho trabajo y que no tienen tiempo para mi, pero desearia aunque sea solo por una hora o unos minutos que ellos me saludén, me pregunten como estube y se sentarán a escuchar mis anécdotas; una de las mucamas que me habia seguido hasta mi habitación, al entrar me pregunto por que estaba llorado, yo intente disimular y le dije que no me encontraba triste, pero ella se dio cuenta y entonces (creo que para alegrarme un poco) me pregunto si queria que ella jugara un momento conmigo, entonces le dije que sí, y después de jugar, me leyó un cuento y me quede dormida.

Cuando sonaron las campanas de mi reloj "cu-cu", me levante, me lave y me vesti; baje a desayunar, mis padres se encontraban hay, pero cada uno estaba ocupado en sus cosas, los salude y ellos me saludaron, me sente a desayunar, mis padres casi no me hablaban, pero no me importaba, porque solo con tenerlos al frente mio, bastaba para mí; estabamos ya casi terminado de desayunar, cuando mi mamá me dice:

Mamá: Amy, cariño, que te pareceria si hacemos tu fiesta en nuestra casa en la ciudad.

Amy: No entiendo, este lugar me gusta para mi fiesta de cumpleaños, que tiene de malo.

Papá: No hay nada de malo cariño, lo que sucede es que yo y tu mamá hemos estado pensando              en ir a vivir a nuestra casa en la ciudad.

Amy: Ir a vivir en la ciudad, no creo que eso me guste.

Papá: Bueno, si se que esta noticia es algo inesperada, pero mira lo bueno, seguiras con tus                    estudios en un gran colegio, además harás amigos y no tendras que preocuparte por                        seguir estudiando sola.

Mamá: Claro cariño, además estaras mas tiempo con nosotros.

Amy: Esta bien.

Después de esa charla, fui a mi cuarto un poco triste, pues no queria irme, pero pensé que tal vez hacer amigos no iba a ser tan malo además, iba a estar más tiempo con mis padres. Entonces baje de mi cuarto y me fui al bosque, caminé por varias horas hasta que por fin llegué al lugar que tanto buscaba, la mini cascada se veia muy hermosa, sus aguas cristalinas dejaban ver los hermosos peces de colores que se encontraban nadando campantes, me eche en el cespéd mirando al cielo y sin pensarlo me quedé dormida. Después de algunas horas desperte, me sobresalte al principio, pues no sabia quién o qué era lo que me habia despertado; cuando mi vista dejo de estar nublada, pude ver al hermoso venado de la otra vez, acerque mi mano lentamente, el venado me olfatio y después me dejó tocarlo, su piel era tan suave y tenia diversas mancha en su cuerpo, también tenia unas astas enormes, como si unos troncos brotaran de su cabeza, me rei mucho con mi pequeño pensamiento, el venado se fue apartando lentamente y se alejo, pensaba seguirlo, pero no lo hice, pues escuche las campanas que me indicaban la hora del almuerzo, cuando llegue, le dije a una de las mucamas que no tenia hambre y que esta vez no iba a almorzar, subi a mi cuarto y me eche a leer un libro, no tenia ganas de almorzar junto con mis padres pues no queria que me volvieran a relatar la noticia sobre ir a vivir en la ciudad. Cuando me dí cuenta ya habia anochecido, las estrellas brillaban intensamente, mientras veia el resplandor de las estrellas me puse a pensar sobre como seria la vida en la ciudad, después echada en mi cama ya con mi pijama puesta me dormi profundamente.

Pegaso, guardián de la naturaleza [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora