Olvidando [Itasaku]

Capítulo 7 <<Noticias malas, noticias buenas>>

Como no podía dejar a su reciente visitante afuera en la calle Sakura le invito a pasar e incluso a cenar junto a su familia, o lo que queda de ella.

Una vez concluida la cena subieron a su habitación.

—¿Sucedió algo?— se atrevió a hablar por primera vez la pelirosa.

—No— hizo una pausa—. Bueno sí.

—¿Que pasa?— se sentó algo rendida sobre la cama—. Vamos Ino, puedes contar conmigo para lo que sea.

—Lo sé— se escuchó frágil—. Es solo que, es difícil.

—¿Porque?

—Hace mucho que las dos no hablábamos, no me atrevía a venir aquí, hasta que Sai... Bueno el me dijo que estabas mejor— la ojijade sonrió conmovida.

—Si, lo estoy— suspiro dejándose caer sobre la cama—. A decir verdad, el me ayudó mucho, le noto muy cambiado, es más sensato, atento y cariñoso, creo que le haces muy bien Ino, has sabido enseñarle el valor de los sentimientos.

—Sakura— sonrió con ternura—. Eres una frentesota muy linda.

—Callate Ino puerca— río.

—Sakura— volvió a pronunciar más sentimental mientras se arrojaba a ella—. Te extrañe— dijo entre lágrimas mientras se aferraba a su cuello.

—Yo también— dijo entre risas, Sakura se sentía feliz de verdad.

Entre risas y cariños ambas empezaron a rodar hasta que de pronto se cayeron de la cama.

—¿Sucedió algo?— pregunto su madre al oír el fuerte golpe.

—¡No!— grito Sakura para después estallar en una carcajada.

—Extrañaba estos momentos contigo— seco una lágrima caprichosa que resbalaba por su mejilla—. Me has hecho tanta falta frentesota.

—Lo sé, y lo lamento— la rodeó en un abrazo protector—. Prometo estar siempre para ti, no importa lo que pase, ya no quiero dejarme caer— hizo una pausa intentando no llorar, suspiro e intento cambiar de tema—. Basta ya, hay que dejar de llorar, ¿Que era lo que tenías que decirme?

—Ah claro, eso— se separó un poco—. Necesito ayuda con algo muy complicado.

(...)

—No es tan complicado como creí.

—Lo es para mí— de pronto Ino salto en un brinquito—. ¡Dios! Ya es muy tarde, debería regresar a casa.

—Puedes quedarte si quieres, hace mucho que no tengo una noche de chicas— dijo algo apenada.

—Me encantaría— sonrió pero enseguida se puso sería—. No traje pijama.

—¿Es enserio?— sonrió divertida—. Sabes que puedes usar una mía.

—¿Hay de mi talla?— su aire desafiante y su mirada directa a el pecho de Sakura hicieron que está se sonrojara.

—¡Ino puerca!— trato de taparse mientras la miraba molesta.

—Sabes que bromeó.

(...)

Unos minutos más tardes ambas se encontraban sentadas sobre la cama cada una con una pijama acogedora para este mes de noviembre que comenzaba a sentirse fresco y frío.

—Sakura, sabes siempre he tenido una duda— se sonrojo algo incómoda—. ¿Que se sentirá hacerlo?— Sakura casi se atragantaba con su propia saliva.

—¿Porque me preguntas esas cosas? Es obvio que no lo sé.

—Bueno, creí que también te despertaba interés, se que en algún momento de nuestra relación Sai y yo tendremos que hacerlo, porque quiero que mi primera vez sea con el.

Sakura sonrió pero enseguida se entristeció, ella tenía el mismo sueño con Sasuke, solo que ya no sería posible.

—Lo siento— se disculpó viendo la mirada perdida de su amiga, comprendía en que estaba pensando—. No quise que recordarás... Bueno tú sabes.

—No, está bien— la reconfortó—. Se que eres lo suficientemente pervertida como para no hacer este tipo de preguntas en una pijamada.

—¿Per-vertida?— se sonrojo—. Claro que no, es simple curiosidad.

—Si, claro— antes de poder decir algo más Sakura recibido un almohadaso en la cara—. Acabas de firmar tú sentencia— sonrió mientras tomaba una almohada y se la estampaba de igual forma.

(...)

Los fríos vientos de otoño que arrastraban consigo las hojas caídas parecían ser un gran centro de atención para Itachi.

Ya llevaba bastante rato sentado sobre el tejado de su casa-departamento. ¿Porque era tan difícil decifrar tus sentimientos? Si Sasuke estuviera aquí seguramente le diría que es un tonto. Los sentimientos no se analizan, simplemente se viven, se sienten.

Miraba atento el vacío de la noche, le parecía irónico pero así de vacío se sentía el, sin Sasuke todo le parecía más triste. Su hermano menor, el era su única prioridad, cuando le salvó de las garras de aquel enmascarado que aniquilaba a su Clan su único objetivo era ponerlo a salvó incluso si eso le costaba la vida, pero cuando fue derrotado por Pain, cuando eso pasó el ni siquiera pudo llegar a tiempo para despedirse, para decirle cuánto adoraba que fuera su pequeño hermano menor, para darle su último poke, para decirle que lo amaba.

Las lágrimas habían comenzado a brotar sin que él se diera cuenta, quién sabe desde cuándo comenzaron a caer.

—¿Que debería hacer Sasuke? Ella era tu novia, tú luz, recuerdo cuando me lo dijiste. ¿Puedo ser así de egoísta? Ni siquiera debería de pensar en ella como una opción, Sai tiene razón. ¿Debo alejarla? Me parece que sí. Lejos, si ella está lejos más rápido olvidare esto.