Capítulo 4

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Durmieron unas cuantas horas, pues el tiempo de la madrugada era mucho más esencial que otro momento del día, en las noches las patrullas aumentaban y en la tarde el tiempo se hacía escaso, una de las misiones que tenían ahora era asaltar uno de los museos, un acto que se le hacía despreciable para Geno pero era aquello o quedarse sin dinero para poder luchar contra el gobierno. 

Los artistas del país habían sido exiliados, muchos de ellos no estaban en condiciones de pelear contra la élite, así que en vez de sufrir a diario con el temor a ser encontrados, era mejor quedarse en el extranjero donde la paz se mantenía ajena a los problemas civiles, claro, cuando había sido posible escapar, ahora el país permanecía encerrado y vigilado. Geno a veces deseaba estar allá, pero al rato se daba golpes mentales por querer descansar en una situación así.

Afortunadamente, el lugar no estaba con ciudadanos, el museo ese día estaba cerrado, así uno del grupo, Killer, especializado en la computación podía pasar a través de los conductos de ventilación mientras Nightmare le daba órdenes desde un intercomunicador. ¿De dónde sacaron todo ese material? No era más que baratijas que sí podían servir para casos así.

Geno, Nightmare, Error y Red estaban en el exterior del museo camuflados entre las personas, había largas filas en las tiendas para comprar y podían aprovechar el lugar estático pero envuelto de monstruos que sus acciones podían pasar desapercibidas para todos.

— ¿Ya estás dentro? —Preguntó Nightmare, Red le arrebató el comunicador para exclamar en voz baja.

— ¡Apúrate, mierda, no ves que ya no están mirando raro!

— Si haces escándalo obviamente nos estarán mirando, idiota. —Se quejó Error atrás de ellos, Geno suspiró agobiado, pero la respuesta de quien hacía la primera parte del plan interrumpió las quejas de todos.

— Ya estoy cerca, ¡No se quejen tanto!

— Ya está en posición, vamos a las nuestras.

Los cuatros dejaron de estar en la fila para irse detrás del museo, allí había una entrada solo para empleados y esa iban a usar para poder entrar, no obstante antes de llegar al sector se colocaron en la pared antes de ser vistos por una de las cámaras, Geno observó al asomarse aquel aparato y con una pistola silenciadora le atinó al instante, no podían esperar ningún segundo y debían tomar todo el tiempo para aprovechar lo más que podían.

— Vamos, vamos, vamos.

Los cuatro acudieron a la entrada, y Red se encargó de abrir la puerta cerrada con seguro, Nightmare esperó respuestas de Killer pero no recibió ninguna durante el proceso, eso alertó a Geno que observaba sus expresiones, irritadas, sabía que no tenía paciencia al igual que su hermano y por ello sus facciones delataban bastante.

— ¿Qué ocurre? —Preguntó Geno.

— No responde a los silbidos. —Respondió al instante, Error murmuró una grosería.

— ¿De verdad que ya le mandaron hostias? —Se quejó— Gente inservi...

— ¡Whoops! Perdonen la demora, me estaba divirtiendo un poco con los códigos.

El de bufanda suspiró tranquilo y acudió donde Red que al lograr abrir la puerta sonrió orgulloso. No tardaron en proseguir con el plan, atravesando algunos pasillos para llegar a los salones con el contenido valioso, tenían que llevar todo a salvo con la mayor velocidad posible, por lo que Error en vez de adentrarse se desvió al exterior del museo. Geno, Red y Nightmare a pasos rápidos sacaron artificios que no sobrepasara el metro de alto, en sus mochilas iban recolectando, lozas, cuadros, joyas en cantidad.

Sistema corrupto ¦ AfterdeathDonde viven las historias. Descúbrelo ahora