Dos meses pasan muy rápidos si lo estas pasando bien pero muy despacio cuando estas pensando en alguien a quien quieres y sin embargo no puedes estar a su lado.
El día 30 se fue a la playa, el lugar donde nos conocimos hace 6 años y seguimos llendo, pero mis padres trabajaban así que yo no pude ir y me quedé encerrada en mi casa, en esas paredes, sabiendo donde estaba él y sin poder ir a su lado. Yo iba a ir el día 22 del siguiente mes, justo después del campamento de baile (me encanta bailar, por si no lo he mencionado antes) y también justo después de que él se vaya al extranjero un mes entero. En resumen; estuve echándole de menos, acordándome de él y llamando a su timbre cada vez que pasaba por su casa un mes.
Estuve con todos mis amigos de allí. Me reí mucho, me lo pasé genial y pasaron mil cosas pero no podía parar de pensar que se lo estaba perdiendo, todo, su verano. Hablábamos todos los días cuando podíamos, pero no era suficiente, le quería tener aquí, conmigo y no con la gente de allí, ellos no sabían que había llegado el tesoro más grande del mundo a su país.
Él no quería irse, le obligó su madre pero cuando vino, fue todo un millón de veces mejor.
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La Fuerza del Destino
RomanceA veces es increíble como se solucionan las cosas. Cuando piensas que todo está mal y de repente aparece un poco de luz en algún rincón de tu alma…