Los ojos de Wheein parecía que caerían de su rostro al ver a su novia con la pequeña maleta de equipaje a su lado.
Hye Jin: ¿No vas a darme un abrazo? −Preguntó con lúdico mirar sonriendo ampliamente. –
La mayor seguía pasmada frente a la morena, su cuerpo petrificado por los nervios no se movía un solo milímetro, ante esto la morena avanzó por su cuenta estrechándola entre sus brazos.
Hye Jin: No podía estar un día más sin verte.
Sin siquiera respirar, el inexpresivo rostro de Wheein comenzó a brotar en lágrimas, la morena escuchando los sollozos la abrazó aún más fuerte.
Hye Jin: Oooh... Parece que tú también me extrañabas mucho.
La preexistente y creciente culpa que se había aposentado desde la noche anterior en la mente y el pecho de Wheein inundándola, se desbordaba en su llanto con gran pesar. Hye Jin dio palmaditas en la espalda de su novia para ayudarle a terminar de botar aquella angustia, desconociendo completamente el origen de la misma, creyendo que solo había conmovido a la mayor con su sorprendente aparición y ella lloraba a causa de una pura nostalgia. Se alejó un poco y ocupó ambos de sus pulgares para barrer las lágrimas en las mejillas de la más baja, mientras sostenía la cada de ella entre sus manos.
Hye Jin: Perdón por no contestar tus mensajes, los vi justo antes de subir al vuelo y quería sorprenderte.
Wheein: ¿Perdonarte?... Yo debería pedir perdón... −Dijo para romper en llanto otra vez. –
Hye Jin: Oh no, tranquila... seguro lo dices por que estabas odiándome por no llamarte. Está bien, no me importa, puedes odiarme cuanto quieras. −Supuso riendo al volver a abrazarla. –
Hye Jin: Vamos adentro, quiero dejar la maleta y descansar un poco, el viaje fue largo.
La menor le tomó de la mano y le hizo entrar a la casa. En cuanto las ruedas de la maleta rodaron a un costado del sofá, Hye Jin corrió a la habitación a lanzarse sobre la cama. Con el vientre pegado a las sábanas tomando aire por la nariz, la menor se regocijó de nostalgia al sentir el olor de Wheein junto a un tenue pero inigualable aroma a magnolia.
Wheein: ¿Extrañabas la cama?
Hye Jin: Tiene tu olor. Es la única que tiene tu olor.
Girando su cuerpo sobre el colchón, Hye Jin se puso sobre su espalda y dio un par de palmaditas sobre la cama, pidiéndole a Wheein al costado de la puerta de la habitación que viniera a su lado. Con movimientos tan sutiles como los de un gato, la chica de melena llegó hasta la cama recostándose a su deriva, Hye Jin volvió a tomar su mano entre las de ella en cuanto la cabeza de Wheein se recostaba en su pecho.
Hye Jin: Mis planes no resultaron, quería llegar ayer para acompañarte a la boda, pero los vuelos se retrasaron y no logré llegar, llegó un momento en el que comencé a creer que las cosas se confabulaban para que no pudiera llegar. Pero ya estoy aquí, contigo. −Resolvió dejando caer un pequeño beso sobre la cabeza de la mayor. –
Sin proferir palabra, Wheein retiró su mano de entre las de Hye Jin para rodearla con su brazo por la cintura sin querer soltarle. Después de unos segundos se atrevió hacer una pregunta.
Wheein: ¿Por cuánto tiempo te tendré aquí? −Consultó como renunciando a que la morena volviera a irse. –
Hye Jin: Saqué el ticket de regreso en un vuelo para el lunes por la mañana. Luego de eso en tan solo un mes volveré otra vez.
ESTÁS LEYENDO
Tentación
FanfictionComo alumna de artes visuales en la Universidad de artes de Seúl, el espíritu de Jung Whee In era libre y animoso, lleno de creatividad y siempre con deseos de algo nuevo, sin embargo la sonrisa que marcaba un hoyuelo en su mejilla no siempre había...