Mi doble vida: Una historia de lobos y humanos

Capitulo 12: El túnel

Estábamos esperando a que Alicia abriera la "puerta", y finalmente lo hizo.

Simón hizo el plan correctamente, cuando Alicia abrió la puerta, él empezó a correr en círculos, y a subir y bajar sus orejas. Entonces Alicia intentó agarrarlo, pero en ese mismo momento yo salí por la puerta, me era muy dificultoso ir rápido como humano, pero lo conseguí. Alicia empezó a decir mi nombre (Sofia, no Kia) e iba hacia donde yo estaba, entonces empecé a alejarme. Simón aprovechó ese momento para salir, y fue a donde yo estaba.

—Vamos a rodear la casa antes de ir al bosque— Dijo Simón— Para que después no sospeche tanto de que estemos ahí.

Y eso fue lo que hicimos, pero Alicia era muy rápida, Simón también, y podía esquivarla, pero yo no, yo era muy lenta como humano.

—Kia ve un poco más rápido— Dijo Simón— O si no la humana te atrapará.

—No puedo ir más rápido— Dije yo— Debemos escondernos.

No había mucho tiempo para pensar, si tardábamos mucho la humana me atraparía, así que sugerí lo primero que vi:

—Ahí hay unos arbustos— Dije yo moviendo la cabeza hacia unos arbustos de color rojizo— Podemos escondernos ahí.

—Está bien, escondámonos ahí— dijo él— Pero no creo que sirva de mucho, porque la humana nos verá escondernos ahí.

Entonces nos dirigimos donde estaban los arbustos, y saltamos hacia ellos. Pero no era lo que nosotros esperábamos, los arbustos simplemente estaban ocultando algo que había debajo: Agua. Si, había agua debajo de los arbustos. No nos habíamos dado cuenta de que había agua hasta que saltamos, y al caímos en ella. Pero eso no nos importó, teníamos que escapar de Alicia, o si no nos atraparía.

Entonces, empezamos a nadar. A mi me costó mucho nadar, porque era un humano, yo nunca había nadado cuando era un lobo, pero creo que lo hubiera hecho muy bien. Como estábamos bajo el agua, no pude ver como nadaba Simón, pero creo que nadó bien, porque seguía vivo cuando salimos del agua. Pudimos subir a la superficie, para tomar aire, Simón se subió "literalmente" (Una nueva palabra que Simón me enseñó, como el "sarcasmo") arriba mío. Estaba todo oscuro, los lobos tenemos visión nocturna, pero como yo era un humano, pensé que ya no podría ver en la oscuridad, pero si pude.

—¿Ves algo?— Pregunta Simón— Porque yo no veo nada.

—Si, veo....— Dije yo— Veo algo así como "muros" que forman un círculo, una mitad está por arriba del agua, y la otra por debajo....

Hubo un silencio, hasta que Simón dijo:

— Tal vez sea....— Dijo Simón— ¿Una alcantarilla? No, no puede ser eso ¿Por qué habría una alcantarilla en un estanque rodeado por zumaques?

—¿Que es un zumaque? — Pregunté.

—Después te lo digo— Dijo Simón.

Otra vez hubo un silencio, yo iba a decir algo, pero en ese mismo momento escuché un ruido. Era alguien que hablaba a lo lejos, un humano, pero no cualquier humano era.... Alicia. Se escuchaba a la distancia las palabras: ¿¡Sofía!? ¿¡Sofía donde estas!? ¡Ven aquí!

—¡Es Alicia!— Dijimos Simón y yo al mismo tiempo.

—Di-digo es la humana— Dijo Simón.