Cuando Yoongi llega a casa tarde una noche después de la clase, agotado y sin ganas de más que una larga ducha, recibe la sorpresa de su vida.
Acostado en el sofá, murmurando algunas tonterías incoherentes y aún sosteniendo una botella de soju, es Jinhyun.
Y revolviéndose a través de los armarios para encontrar algunas tazas de repuesto, está Hwa.
Yoongi entra en el apartamento, con la boca abierta y los ojos muy abiertos. Hwa es la primera en notarlo, y deja caer la taza que encuentra en el proceso. Ambos pares de ojos siguen la copa mientras se rompe en pedazos sobre el piso de la cocina, y para sorpresa de Yoongi, los ojos de Hwa se llenan de lágrimas.
- L-l sie-ento - ella tartamudea, cayendo de rodillas en un intento de limpiar - Simplemente no esperaban que regresaras tan pronto.
Yoongi mira el cuerpo inerte de Jinhyun en el sofá, luego deja caer sus bolsas y se une a Hwa en la cocina. Ella lo mira con ojos vacilantes, que Yoongi conoce muy bien - Necesitaras una escoba, no te cortes - Él le dice a ella, pero va a buscar la escoba y limpiar el vidrio roto él mismo.
Hwa se para, mordiéndose el labio inferior en el proceso, viéndolo limpiar - Sindy me llamo despues de clases, dijo que lo encontro vomitando en la calle - ella dice - Me dijo que lo llevara a casa
La mirada de Yoongi se desvía hacia Jinhyun. ¿por qué no lo llamó Sindy?, ella podía estar enojada, absolutamente enfurecida con Yoongi, pero Hwa no se merecía nada de esto.
- ¿Porque? ¿porque no se llevo a Jinhyun a casa?
- Ella.. .- ella se calla, negándose a hacer contacto visual.
- Ella no queria verme, ¿verdad? - Hwa solo sacude su cabeza en respuesta. Ella termina de agarrar un nuevo vaso de agua para Jinhyun antes de dirigirse al sofá, Yoongi camina detrás de ella, la observa mientras se arrodilla frente a Jinhyun y le entrega un par de tabletas. - Te sentiras mucho peor por la mañana si no lo tomas, confia en mi - ella vacila, luego agrega - Y no vallas por ahi derramando cosas que no tienen sentido.
Jinhyun gruñe en su sueño ebrio, tirando las tabletas sobre la mesa y dándole la espalda. Ya era la tercera vez en esta semana que Jinhyun llegaba a casa borracho, y esta vez, ni siquiera podía llegar a casa él mismo. Yoongi desea que todo pueda volver a ser antes de Hwa, pero él sabe que no había nada que pudiera hacer para evitar que ella acudiera a él.
- Voy a cuidar de el - Yoongi le dice a Hwa - Puedes irte a casa
Hwa se levanta, agarra su bolso y su teléfono de la mesa, luego se gira hacia él.
- Yoongi - Ella dice, dando su nombre con tanto cuidado que Yoongi casi deja escapar un suspiro - ¿Puedo besarte? - Las palabras lo golpearon como un choque de trenes.- ¿Que? - Susurra, incapaz de controlar el temblor en su voz.
Su cuerpo tiembla a pesar del calor de la casa, tanto que Hwa se acerca para agarrar su brazo, sus ojos lo encuentran en la oscuridad, sus manos arden contra su piel, su voz tan hogareña en los oídos de Yoongi
- ¿Puedo besarte? - Ella susurra de nuevo, esta vez más cerca.Yoongi consigue sacudir la cabeza - N-no
- ¿Quieres?
- S-si - Yoongi susurra
Hwa mira hacia otro lado, mordiéndose el labio con tanta fuerza que podría sangrar. Yoongi sabe que está perpleja porque junta sus cejas - ¿Porque no puedes?
- Porque... - Yoongi se está asfixiando - Porque..
La risa de Hwa carece de humor y está rota
- Porque voy a morir, ¿verdad? - mira a Yoongi - Sabes, borracha la gente suele decir lo que realmente tienen en mente, nunca creeria a Jinhyun, pero todo lo que sucedió me dice que tu historia retorcida es mas que una historia.- Hwa
Hay lágrimas en los ojos de Hwa, y Yoongi lo odia - Esta bien, ¿sabes? solo dejame el margen y dejame sentir el corazon roto porque realmente pense que me odiabas, me muero cuando nos besamos, ¿verdad?, entonces, no me beses.
Él espera que ella continúe - Vi esas polaroides mias en tu pared, te estas lastimando, no lo somos todo, pero no tienes que hacerlo
- N-no estoy seguro de lo que estas diciendo - se calla.
- Cariño, no necesitas girar en torno a los besos. Yoongi, estoy bien sin eso, y si usted tambien lo esta, entonces podemos hacernos trabajar