Capitulo 2

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Omnisciente.

El Día Domingo mostraba ser un día caluroso, donde el sol pegaba fuertemente en Los Ángeles, un hermoso día para estar en la piscina observando a tus pequeños intentar nadar, mientras que Olivia jugaba en su pequeña piscina inflable con apenas tres centímetros de agua de altura, pero ella era feliz mientras reía y jugaba, mientras que Louis nadaba de un lado a otro en la piscina más grande en la casa de sus padres junto a sus primos Ben y Dalton hijos de Chris cada uno de cinco y tres años, mientras que Lily de dos años jugaba con su prima en la pequeña piscina, era el panorama Perfecto donde eran felices, a pesar de todo debían seguir con sus vidas por muy difícil que fueran, así todos los entendían excepto Camila, y comprendía la situación de la morena pero también entendía que no podía seguir lamentándose por lo sucedido y aunque sonara frío la vida sigue continuando y aún habían razones por las que luchar, tenían dos hijos más por los cuales ser fuertes aún. Solo esperaba que su esposa algún día comprendiera todo eso, por el bien de ambas.

Lauren bebía un poco de cerveza mientras miraba a sus dos pequeño y también a sus sobrinos en alerta ante cualquier cosa, mientras escuchaba a su padre hablar alegremente a su lado mientras preparaba la barbacoa para todos ese día, Chris se metía a la piscina para estar más pendiente, mientras que Taylor se quejaba sentada por tener una panza tan grande, su esposo era el responsable de mirar a su pequeña, un hombre de veinticinco años dos años mayor que ella pero lo bastante bueno para su hermana, se llamada Dereck. Y bueno la esposa de Chris estaba junto a Camila y Clara sentadas en la mesa bebiendo jugo mientras conversaban, la esposa de sus hermano era hermosa y alegre, una chica que llegó a controlar la vida alborotada de su hermano cuando parecía ser un caos, pero ahora ambos eran felices, Melanie fue la luz en su vida y se podía notar cuanto amor se tenían, por eso era bueno estar todos reunidos, porque a pesar de todo seguían siendo unidos.

-¿Como van las cosas con Camila?.- pregunto su papá por lo bajo mientras daba vuelta la carne en la parrilla, Lauren hizo una mueca acomodando los lentes de sol dándole una respuesta más o menos a su padre.

-No mejoran para nada, por más que intento no puedo, cada paso que doy retrocedo veinte, es frustrante.- le confiesa con tristeza en su voz. -Si yo no le doy un beso ella no me lo da papá, un simple beso que ella limita a un tope corto de labios.- la frustración era notable. -La amo papá, pero todo esto me está doliendo.- su padre la miro comprensivo.

-Es difícil la situación por la que han pasado, pero también ha pasado un año de todo lo sucedido, es mucho tiempo para seguir torturándose con el dolor.- Lauren asintió ante sus palabras. -Se más amorosa, búscala Lauren, demuéstrale que su vida aún tiene un sentido, dos razones pequeñas más.- dice por sus hijos.

-A ellos no los ha aparatado al menos, pero aún así se que Louis nota el cambio en su mamá, en especial en nuestra relación.- Bebe de su bebida.

-Los niños notan todo, no dejes que esto les afecte a ellos, han sufrido mucho por Luke.- Le dice con una media sonrisa. -Ven aquí.- Lauren envolvió los brazos en cuerpo de su padre para recibir El Fuerte abrazo del hombre.

Porque lo necesitaba bastante cuando todo estaba aún más cuesta arriba, solo quería que todo estuviera bien, que pudiera recuperar su Camila y sentir que su matrimonio era como antes, que se amaban y que podían soportar cualquier turbulencia que tuvieran, porque en esos momentos cualquier cosa iba a terminar de romper todo lo que habían construido en años.

-¡Mami!.- Louis le gritaba desde la piscina, Lauren de inmediato lo miro con una sonrisa. -¡Se tirarme piqueros!.- dice emocionado.

-Muy Bien hijo.- Lauren se acercó de inmediato.

-¿Quieres ver?.- le pregunta con ilusión.

-Claro que si.- Chris estaba parado al frente por cualquier cosa, él Niño emocionado se tiró a la piscina demostrando lo que había aprendido, provocando la emoción de todos los presentes.

Volviendo a sentir, Camren Donde viven las historias. Descúbrelo ahora