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Han pasado tres días, de los cuales no he visto para nada a Benjamín, internamente lo agradezco, aún no me puedo sacar de la cabeza la imagen de el desnudo, definitivamente me iré al infierno....

- Cristina me llamaste, ¿qué sucede?

-necesito que por favor le lleves estos documentos a la oficina de Benjamín...

-y ¿porque debo llevarle documentos a él?

-porque él nos ayudará a expandirnos, tú solo llévale esto, él sabrá qué hacer

-estás hablando en serio, y acaso ¿confías en el?

-por supuesto, no le estoy dando mi compañía, el solo nos dará una opinión, nada más, no te alteres por nada niña!!

-está bien, tú eres la jefa...(risas), dile que ya voy en camino

Al salir de la oficina y ver la dirección, me doy cuenta que es algo lejos, tendré que ir en mi auto, decidido esto me dispongo a ir por el, me subí y puse música y me fui rumbo donde Benjamín...

Al llegar, veo que no es un edificio muy grande pero sí muy elegante, sus ventanas son todas negras y unas grandes letras plateadas dice "Ibáñez asociados".

Dejo mi auto en el estacionamiento que dice visitas, bajó del auto y cruzó las grandes puertas, lo primero que veo es un mostrador con una muy sonriente señorita...

-buenos días, bienvenida, ¿en que la puedo ayudar?

-buen día, busco al señor Benjamín Ibáñez

-espere un momento por favor

Ella marco un número en el teléfono y le informó que alguien lo buscaba..

-disculpe, ¿cuál es su nombre?

-Emma spencer

-Emma spencer señor, sí señor....puede pasar, tercer piso primera puerta a la derecha

-gracias

Tome el elevador y marque el tercer piso, se podía escuchar una melodía muy bonita mientras el elevador subía, el viaje fue rápido, las puertas se abrieron y veo un pasillo, con oficinas en ambos lados, toco a la primera puerta justo como me dijo la señorita de el mostrador y escucho el pase

-Emma, qué agradable sorpresa, ¿cómo estás?

-bien gracias, porque sorpresa, ¿no sabías que vendría?

-no,

-como que no, Cristina me ha enviado con unos documentos para qu tú los revises...

-ah, claro, lo había olvidado, disculpa...

-si no te preocupes, aquí están los documentos, si eso es todo ya me voy, permiso

-pero como, ¿ya te veas?, ¿no quieres un café?

-¿café?, (miro mi reloj), si tengo tiempo para un café...

-perfecto

Él llamó a alguien y le pidió dos cafés, yo me puse nerviosa y no se porque, tome mi celular y le envié un mensaje a Cristina, diciendo que llegaría un poco tarde, en ese momento entro una señorita con dos tacitas de café, y mis manos comenzaron a sudar....

-Emma, ¿supiste que Cristina y mi tío se mudaran a las colinas?

-si ya me lo dijo, me pidió ayuda para este sábado, a organizar sus cosas

-y ¿podrás ir?, me refiero, tu novio ¿no te pondrá problemas?..

-No, él está de viaje, en Italia...

Un Verdadero Amor...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora