you should've know someone natural | scott mccall | natural#2

Capítulo 20

El cap está algo largo, si gustan pueden dividir la lectura por sí mismos, porque yo trate de hacerlo y no me convencía el resultado xd. Que los disfruten, ya casi terminamos!!!
Pd. Como siempre no quería publicar hasta ya tener un poquito del siguiente cap listo, pero como siempre también, me gana la emoción, jaja.

Fiesta de cumpleaños.

Me cuesta mucho abrir los ojos; es como esas veces cuando lloras hasta dormir y las lagañas te pegan los párpados. La noche pasada está algo confusa en mi mente, pero estoy completamente segura que no lloré.

Cuando al fin puedo ver la luz, tengo que cerrarlos de nuevo. Duele. Algo se siente como un dejavú en eso, pero lo ignoro y me incorporo en la cama con lentitud, pues temo que de hacerlo a un ritmo normal termine con nauseas. Evito machacarme los ojos para sacarme las lagañas, así que de a poco me paso los dedos por las pestañas. Suelto un bostezo y me pego las piernas al pecho; alguien debió quitarme los pantalones, pues puedo hacerlo con total libertad.

—Hey. —El corazón se me llena de esa cosa cálida que ya reconozco muy bien, la sonrisa se me dibuja de forma involuntaria en la cara y los ojos se me abren sin esfuerzo para mirar a Scott enfrente de mí. Frunzo el ceño ligeramente cuando logro mirar una mueca que podría interpretarse de tantas formas que ni siquiera me da tiempo a encontrarle un significado en lo que cambia a una sonrisa. Quiero preguntar, pero se me adelanta—. Se nota que dormiste genial —comenta con gracia al tiempo que da un par de pasos hasta llegar a mi cama. Me pasa la mano por el costado de la cara, acariciando mi mejilla y pasándome el cabello tras la oreja. Los párpados me tiemblan y pierdo la lucha contra cerrar los ojos.

—Me duele todo, pero imagino que dormí chueca —contesto en un murmuro, dejando caer el peso de mi cabeza en su mano. Me acaricia con delicadeza y suavidad, tanta que creo puedo dormir de nuevo.

—Debe ser eso...

—¿Qué me sucedió anoche? —pregunto antes de siquiera procesar lo que me sale de la boca. Me doy cuenta luego que no recuerdo mucho, solo detalles difusos y una cosa tan rara que no puede ser siquiera verdad...

—Algo te hizo daño en el rave —La caricia de Scott no se detiene, pero algo se siente distinto—, creo que algo en el aire, pudieron ser drogas...

—¿Y por qué a Stiles no le pasó? —indago, saliendo del cómodo espacio entre su mano y alejándome de sus caricias a propósito. Le miro cada facción del rostro, pero apenas alcanzo a ver algo; tiene la cabeza gacha y se rasca la nuca con nerviosismo. Alzo las cajas, pero él no mira eso mientras me contesta.

—Él llegó mucho después de ti y salió muy pronto en cuanto te miró mal.

Abro la boca.

Créeme, créeme, créeme.

Asiento. Tal vez en otro punto hubiera replicado por la insistencia o rogado por una explicación más clara. Para empezar, esa fue la forma en que me metí en todo este lío sobrenatural; pero ahora decido ceder.

—Tienes razón —Levanta la mirada, incrédulo. Sacudo un poco la cabeza y le tomo la mano libre al tiempo que me llevo su dorso a los labios y deposito un pequeño beso sobre su piel. La mirada de Scott se torna anonada por un segundo, así que sonrió—, eso debió ser.

Él asiente a su vez y se las arregla para tomarme por la cintura y arrastrarme hasta que termino sentada de lado sobre sus piernas. Siento algo de frío, pues no cargo más que la ropa interior, pero una de sus manos se posa sobre mis muslos desnudos y ya no siento más que una punzada de calor.