Tenía sentido, claro, ahora los escuchaba. Escuchaba lo que decían, entendía sus palabras y pese a que el día anterior había sido casi un shock, el sentir esa incomodidad entre Jisoo y él había sido lo peor. Cuando se acercó para explicarle la situación, o más bien para aclarar que absolutamente nada en ese rumor era cierto, ella lo escuchó atenta. Ella se molestó.
"¿Este es el verdadero tú?"
Se le veía molesta, decepcionada. ¿Porque lo había negado o qué? Creía que eso relajaría las cosas, ella comprendería y seguirían en el tira y afloja entre ambos. Pero en lugar de eso decidió alejarse de él y decidir que debían ganar la competencia y era todo, básicamente.
Las reacciones que siguieron fueron casi similares, porque al día siguiente todos parecían tener ya ganas de preguntar, algunas otras fueron con algo de pena, casi lastima, pero no parecían ser dedicadas a él. Fruncía el entrecejo, preguntándose quién había decidido iniciar dichoso rumor y por qué. Quería dejar las cosas claras pero entre más parecía decir la verdad, las personas parecían indignadas por alguna razón.
"Tranquilo. Es el siglo XXI."
¿Y a él qué? No era un verdadero problema, de hecho él creía que estaría bien, que sería genial, pero no aplicaba para él porque no era cierto. Dos días después la cosa siguió igual, sin dar pie a resolverse, se podría decir que el rumor podría ser tomado como algo verdadero y él podía seguir su vida como le viniera en gana, con toda tranquilidad, pero él no quería eso porque no se hablaba con Jisoo. Ambos eran profesionales y en el escenario todo problema personal quedaba fuera, sin embargo, la competencia se acercaba y junto a ella su declaración, tenía que decirle lo que sentía antes de que llegaran las vacaciones porque entonces pasarían largos días antes de volverla a ver y todos saben que en vacaciones cualquier cosa podía suceder.
− ¿Cómo es que no sabes quién fue? – Desde el segundo piso, veía junto a su inseparable amigo a Jisoo con su grupo de amigas, a veces creía que era un grupo extraño, pues un par de ellas parecían no encajar con el estereotipo de amigas de la chica modelo y eso era lo que le resultaba a Yugyeom tan genial de parte de la bailarina, que ella se fijaba en la esencia de las personas y no en los beneficios. Además, claro que Lisa era la mejor bailarina que tenían y era normal que se volvieran inseparables también. − ¿Lisa no te ha dicho nada?
− Ya te dije, ella fue la que me hizo desvelarme hasta noche con la noticia. Jisoo únicamente les había contado de lo que se había enterado. A Lisa le sorprendió, así que me habló, no tiene ni idea de dónde lo sacó Jisoo, yo le dije que no era cierto pero ella cree que debió ser alguien cercano para que Jisoo lo creyera a ciegas −. Explicó Bambam, siendo Lisa y él tailandeses se habían vuelto cercanos, y eran los primeros en buscarse cuando explotaba algún chisme en la escuela, pues sabían que si a uno de ellos le faltaba información seguramente el otro la tendría.
− No tiene sentido −. Se volvió a quejar, soltando un suspiro como hacía últimamente cada vez que tocaban el tema. Pues, como se había mencionado antes, entre las tantas cualidades de su primer amor, Jisoo era una chica lista. ¿Qué sucedía?
− No, no lo tiene −. Concordó su amigo, observando a todos en el patio desde su posición. Encontrándose con otro grupo cerca de biblioteca, cinco chicos conversando tranquilamente con algunas chicas, miembros del grupo de porristas de la escuela, Twice. – Oye −. Llamó a su amigo, reincorporándose de su lugar después de notar lo extraño del asunto. Un "hm" de parte del más alto lo invitó a continuar, sabiéndose escuchado. − ¿Por qué él no ha dicho nada? – Sólo ante esa pregunta, Yugyeom le volteó a ver, curioso de pronto también.
− ¿No ha dicho nada? – A decir verdad él ni siquiera lo había pensado, lo único que tenía en la cabeza era que ese rumor hacía que Jisoo le rechazara antes de tiempo. Pero si lo pensaba por un momento, así como Bambam hacía, eso tampoco tenía sentido. − ¿Por qué no ha dicho nada? – Cuestionó a su amigo, como si él tuviese la respuesta escondida en alguna de sus mangas, pero el mayor de los dos sólo se encogió de hombros. No lo sabía.
− Él es cercano a ella. ¿No? Debió decirle algo.
Sí, él era cercano a Jisoo. Todos lo sabían, Junior era el mejor amigo de Jisoo, por lo tanto él debía estar también enterado y debió haber aclaro el asunto con ella. Entre más buscaba una explicación, más se daba cuenta que no tenía sentido nada de nada. Además, se sumaba el hecho de que las cosas entre aquellos dos iban igual que siempre, a aquél nadie lo evitaba y mantenía esa expresión entre alegre y seria de siempre, porque sí, el mayor atractivo de aquel sujeto era esa aura de misterio que solía mantener.
− Tal vez, él sepa algo.
Yugyeom observó a su amigo, dándose cuenta que tenía razón, no importaba cuántas vueltas le diera al asunto no encontraría la respuesta porque no la tenía. Arrugó el entrecejo, torció la boca y volvió a quejarse, pero esta vez de forma positiva.
− Tienes razón... Debería preguntarle.
− Sí, quizá y te ayude a aclarárselo a Jisoo, ya que él seguramente no tiene ni idea de que te interesa y que planeas confesarte pero que el rumor que comparten no te deja.
Asintió un par de veces, dejando de observar a la bailarina para fijar los ojos en el que era conocido como el príncipe de la escuela. Él seguramente no tenía ni idea de lo mucho que le perjudicaba, buscaría su ayuda después de clases y entonces todo se resolvería.
No podía estar más equivocado.
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Manipulador
Fanfiction-Me gustas-. Jamás había sentido tantas ganas de golpear a alguien. - No te preocupes, ya me corresponderás -. Quería borrar con el puño aquella arrogante sonrisa.